"La gente verá, Sho-."
"Shhh," Me calló, levantando su dedo índice y presionándolo contra mis labios, "Si sigues hablando de eso, tal vez lo harán." Su mano libre se extendió hacia abajo, su toque recorriendo mi muslo, su torso presionando el mío y empujándome contra la pared. Desde que nos reunimos en esa concurrida autopista de la manera más dramática, las cosas entre Shota y yo parecían haberse reavivado. Me encontré jugando a visitas secretas y sorpresas a la UA entre patrullas, y volvía a casa para preparar baños con velas perfumadas de lavanda. "Diez minutos no son suficientes," Susurró, enterrando su rostro en el hueco de mi cuello, besando suavemente mi piel, "para todas las cosas que te quiero hacer." Subió más mi falda con brusquedad, sus dedos se engancharon en el dobladillo de mis bragas.
"Sh-Shota-." Respiré, sintiendo que mi cara se calentaba y mis piernas se debilitaban, "Sh-." Su dedo cayó de mis labios, deslizándose por mi camisa, manteniendo los botones abiertos mientras palmeaba mi pecho sobre mi sostén negro.
"Llámame Sensei, (t/n)." Murmuró, descendiendo lentamente a sus rodillas, rasgando mi ropa interior al suelo, con su otra mano apretando debajo de mi sujetador. Hizo una breve pausa, mirándome con los ojos oscuros y hambrientos, su largo cabello recogido con mechones sueltos enmarcando su rostro. Dios, quería que me destrozara en ese mismo momento. "Y suplícame, (t/n)." Mordí mis labios, sintiendo mis rodillas temblar suavemente.
"Por favor..." Fruncí el ceño, levantando una mano y apoyándola sobre su cabeza, "S-Sensei..." Suavemente empujé su cabeza hacia abajo, mirando atentamente mientras se agachaba debajo de mi falda sin dudarlo, tomando mis muslos y separándolos. En estos días siento que soy más yo misma que cualquier otra cosa. Sentí sus labios rozar mi entrada mientras mis piernas se encontraban alrededor de sus hombros, dándole más espacio para trabajar. Estoy días me recuerdan cuando todavía venía a la escuela aquí. Nerviosamente miré la puerta de su salón de clases, escuchando el parloteo de los estudiantes pasar, el riesgo de que cualquiera entrara en algún momento dado lo hacía mucho más caliente. La lengua de Shota recorrió con cuidado mi clítoris, la punta se movía hacia arriba y hacia abajo lentamente pero lo suficientemente rápido como para hacer que un escalofrío recorriera mi columna y salieran maldiciones de mi boca, "M-mierda..." Gemí, "Aizawa Sensei..." Seguí jugando con lo que a él le gustaba, mis dedos tomaron sus oscuros mechones mientras descansaba mi cabeza contra la pared, "Aizawa-."
"¡Aizawa Sensei!" Una voz alegre gritó desde el otro lado de la puerta, rompiendo el estado de animo y haciéndonos saltar a los dos, "¡Aizawa Sensei-!" Observé con horror cómo la puerta comenzaba a deslizarse lentamente fuera de lugar, lo que me hizo lanzarme hacia adelante para mantenerla cerrada, causando que Shota cayera hacia atrás y chocara contra un par de escritorios, creando el choque de la vida. Shota y yo nos miramos en silencio, casi en estado de shock de que algo como que nos atrapen realmente pudiera pasar.
"¡U-un momento, Ashido!" Shota gritó en respuesta, frotándose la parte posterior de la cabeza. Lo miré, sin aliento con mis bragas alrededor de mis tobillos y mi camisa medio abierta. ¿Mina? ¿En serio? ¿Ahora?
"¿Estás bien, Aizawa Sensei?" Preguntó a través de la puerta, sonando un poco demasiado cerca, casi como si estuviera presionando la oreja contra la puerta, "¿Te caíste?" Contuve la respiración cuando Shota se puso de pie antes de correr hacia mí y mantener la puerta en su lugar para que pudiera arreglarme.
"Estoy bien, yo-. Me atrapaste por sorpresa." Shota mintió fácilmente mirándome mientras me abrochaba rápidamente la camisa y me ponía las bragas, "¿Q-qué puedo hacer por ti, Ashido?" Tartamudeó, tratando de actuar con normalidad, "¿Pasó algo malo?" Silenciosamente cepillé mi cabello, ajustando mi falda a la par que Shota me sonreía suavemente, haciendo que mis mejillas se enrojecieran.
"¡Todoroki y yo queríamos preguntarte sobre algunas ideas de movimientos combinados!" Ashido explicó, "¡Fuego y ácido! No-, ¡Hielo y ácido!" Mis ojos se agrandaron cuando escuché a mi propio hermano hablar a su lado.
"No creo que el ácido y el hielo funcionen bien juntos-." Dijo Shoto. Volví a mirar a Shota, el tiempo se movía en cámara lenta al darme cuenta. Mi hermano está a punto de acercarse a mí anotando un rapidito con su profesor. Oh dios mío.
"¡Por supuesto que lo hace! ¡Podemos congelar y derretir al mismo tiempo! Podemos llamarle... ¡Granizado de chicle!" Ashido gritó en un tono que no coincidía del todo con mis hermanos.
"Siento que ese nombre se acopla más a ti que a mí..." Murmuró Shoto en voz baja.
"Está bien, sólo déjenme-." Shota comenzó a acomodarse el cabello cuidadosamente detrás de la oreja, pero Ashido lo cortó deslizando la puerta para abrirla libremente.
"¡TÚ eres el granizado y YO soy el chicle-!" La chica rosa hizo una pausa en sus ojos para encontrarse con mi estado desaliñado y luego parpadeó de nuevo a su maestro, "Oh, hola, Todoroki número dos, ¿Qué haces aquí?"
"Uhh..." Me detuve, tratando de encontrar algún tipo de excusa, "Sólo estaba-."
"Teníamos una reunión hoy." Shota se entrometió, tirando ligeramente de su bufanda como arma alrededor de su cuello, "¿O ya olvidaste que Harbinger sigue siendo mi ayudante?"
"¡Oh, sí! ¡Olvidé que Harbinger inicialmente comenzó como una compañera!" Ashido sonrió, empujando juguetonamente el hombro de Shoto.
"No sabía que ustedes dos todavía trabajaban juntos." Dijo Shoto, con las manos envueltas en la correa de su mochila.
"Algunas veces." Forcé una sonrisa, alisando mi camisa nerviosamente, "En casos complicados."
"Oh, ¿como el de Azureth?" Preguntó Shoto. Sentí que mi corazón se saltaba un latido al escuchar a mi propio hermano decir mi nombre de Villano en voz alta.
"¡Oh, sí! Ese raro, ¿huh?" Ashido exclamó, apoyándose en Shoto al hablar, "¿Por qué un villano atacaría a otro villano?" Podía sentir los ojos de Shota sobre mí, preocupado de que se me deslizara algún lugar de alguna manera y renunciara a algo.
"Tal vez porque Azureth ya no es un villano." Shoto dijo en voz baja, mi cabeza girando hacia él mientras continuaba, "Quizás Azureth se retiró y Clover todavía esté enojado." ¿Clover? ¿Es así como le llaman?
"Deja el trabajo de detective a los profesionales, Icy Hot." Bromeé agitando mi dedo hacia Shoto inocentemente y distrayendo a Mina con el apodo con el que lo había marcado, "Uh-, si-, bueno." Me volví para mirar a Shota, con una sonrisa algo satisfecha en su rostro mientras metía las manos en los bolsillos, "Gracias por su tiempo, Aizawa Sensei, pero tengo que volver a patrullar. Te veré-, ¡ah! Quiero decir, le llamaré más tarde por actualizaciones." Incliné mi cabeza rápidamente, cerrando los ojos al hacerlo, sabiendo que él estaba siendo pateado por verme hecha un desastre nervioso.
"Por supuesto." Shota tarareó, mientras me paraba derecha, nuestros ojos se encontraron, "Fue agradable ponerme al día contigo, (t/n)." Su voz fue más baja con esa frase, los otros dos ni siquiera notaron el brillo en sus ojos, o lo débil que me hizo. Sentí que la parte entre mis piernas se humedecía y de repente la frustración de ser interrumpida comenzó a golpearme mientras prácticamente salía corriendo de su salón de clases. ¿Por qué siempre hay algo interrumpiéndome? Corrí por los pasillos de la UA, mirando por encima de mi hombro cuando la campana sonó. Será mejor que termine cuando llegue a casa. Me di la vuelta, chocando contra alguien que se dirigía en la dirección opuesta a la mía. Sentí sus brazos rodear mi cintura para evitar que cayera hacia atrás.
"¡Oh! ¡Mierda! Lo siento-." Me di la vuelta, mirando quién era mi salvador.
"¿(T/n)?" Su voz me hizo sentir enferma.
"Mirio."
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Erased消された (Español)
Fiksi Penggemar"¿Cuál soy, Shota, huh? ¿Soy un héroe o un villano?" "Eres todo para mí." Secuela de: Erase Her ____________ Ésta historia es original de @JojoWritesx, cuento con su consentimiento para hacer ésta traducción, así que todos los créditos van dirigidos...