Serán dos historias en una pues se contara la historias de los hijos de la Reina Briana con el Duque Bennett. Un par de gemelos nacidos en el Reino de Germania el Imperio predominante y conocido como una potencia mundial.
El carruaje custodiados por soldados, apareció en mi campo de visión, mi cuerpo tiembla de los nervios pero una mano presiona la mía en un pequeño apretón.
-Tranquila todo está bien, te lo prometo. -su sonrisa y la promesa de que todo estrategias bien, me relajan un poco.
El carruaje se detiene a la entrada de las puertas y la primera persona en salir es... ¡Es ella!. Pase toda la noche pensando como sería, si es mi hermana entonces ¿se parecerá a mi? Esos eran mis pensamientos, pero nunca pensé que seríamos muy parecidas.
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Su mirada esta puesta en la mía, en este momento no existe nadie más a nuestro alrededor, ella no pierde más tiempo y se apresura a llegar a mi y yo hago lo mismo, al estar tan cerca ella acaricia mi rostro y yo hago lo mismo.
Nuestras apariencia son tan similares que podría asegurar que me estoy viendo en un espejo, con la diferencia de nuestro color de cabello.
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-Hermana... Eres mi hermana. - la voz reprimida de la reina sale de ella esforzándose por no llorar.
-Por favor, entremos y tomen asiento. - Darren interrumpe nuestro nuestro y no es el único, la voz de alguien más se escucha no muy largo.
-¡ah! Es la segunda vez que mi esposa se olvida de mi. No sabes cuanto lastimas mi corazón. - la voz es de nada más y nada menos que el mismo rey que se dirige a nosotros junto a sus hombre.
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-Darío, por favor pídele que entren para que puedan conversar a gustas. - el Duque habla de manera muy informal hacia el rey lo cual me sorprendió.
-Hermano, hermano, definitivamente no conoces a mi esposa, están obstinada que no pudo esperar en su castillo, así que tuve que venir con ella, ¿Crees que te va a escuchar ahora? - no puedo evitar reír por la manera tan casual en la que se hablan.
En la mayoría de la socialité lo que más prevalece son sus rangos o posición social más que los parientes, así que esto me resulta muy impresionante.
La mano de Aurora todavía sigue acariciando mi rostro, creo que esto la a conmocionado más a ella, me pregunto si ella ya sabía de mi existencia.
Tengo tantas cosas que preguntarle pero recuerdo que ha hecho un largo viaje y debe estar cansada por lo que trato de persuadir.
-Hermana. - para mi todavía es extraño llamarla de esa manera. - ¿Quieres acompañarme a mi habitación? - ella asiente con una sonrisa brillante en su rostro.
La tomó de la mano y la dirijo hacia la habitación que preparamos para ellos, a mi espalda escucho la conversación de los dos hermanos mientras nos están siguiendo.
- ¡Jajaja! Tu esposa ya no te quiere, mira que rápido se olvido de ti. -el Duque da bromas al rey y no puedo evitar estremecerme por sus palabras.
-Si, están gracioso y más aún cuando me lo dice alguien que no se a casado porque las mujeres ni se atreven acercarse a ti. - las palabras de defensas del rey provocan que quiera reír pero me contento cuando veo a Aurora darse la vuelta.
-Detenganse, la ex reina dijo que si se llegaba a enterar que ustedes están peleando como de costumbre, prometió castigarlos así que pertenece bien. -ella les señala a los dos como si fueran dos niños para luego volverme a tomar la mano. - Vamos no les preste atención a esos niños.
A pesar que fueron regañados como dos niños de cinco años, la escena me pareció muy agradable tanto así que mis nervios desaparecieron. Aurora y yo entramos a la habitación, tenemos tanto de que hablar.
~~~~Aqui les traigo el encuentro de las hermana la pregunta es ¿Y ahora que va a pasar? ☺☺😘😊😘~~~~
