✧†ⁱᵉᵐᵖᵒ ᴰᵉᵐᵒⁿíᵃᶜᵒ✧ ObiDei [AU]

- Tiempo-espacio

– ¿Pero que eres tú? Digo, sé que los demonios y ángeles se ven muy diferentes a los humanos, pero tú te ves demasiado diferente, tú cuerpo es mitad blanco y mitad negro, tus ojos son distintos también y tú cabello se ve muy suave
– Tienes razón Obito, pero yo soy una especie de combinación entre ambos...
– Combinación entre ángel y demonio ¡Qué genial!
– Así es, soy Zetsu el híbrido del tiempo
– ¡Es un nombre genial!
– Bien yo los llevaré a donde quieran ¿Algún universo en especial?

Obito pensaba cautelosamente esa pregunta, pero en realidad él no sabía a donde ir, solamente quería ver de nuevo a Deidara.
No sabía cómo nombrar a los universos, nunca había oído hablar de otro que no fuera el suyo
– Zetsu, yo seré quién te diga el universo, Obito no sabe nada
– Al parecer tienes razón Sasori, Obito no conoce los universos ¡Qué ironía!

Zetsu se paró junto a Sasori, él tiró de sus hilos, enrrollando con éstos a Obito, mientras que Zetsu colocó su mano, oscureciendo los hilos. Obito nervioso cerró sus ojos, sentía los hilos sobre su rostro, al igual que una leve corriente de aire.
– Tranquilo Obito, ya puedes abrir los ojos, ya estamos aquí
– Obito que nervioso estabas

Por la orden que recibió, Obito abrió sus ojos, la vista no era muy diferente a lo que estaba acostumbrado a mirar, pero los hogares se veían inusuales, parecían graneros bien decorados.
– ¿Donde me trajeron? Y más importante ¿Donde esta Deidara?
– Una pregunta a la vez, esté universo es pacífico, así que no te preocupes por nada y sobre Deidara... Debería estar por aquí supongo

Obito buscaba con la mirada a Deidara, entre la multitud de personas no podía ver bien
– Cierto, Sasori...
– ¿Sí?
– Tengo está pregunta desde que me hablaste de los universos
– ¿Y cuál es?
– Si existen multi universos, existe otro Deidara en éste universo, significa que también debe de existir otro yo por aquí ¿No?
– Que sorpresa, sí piensas sobre lo que haces, pero tienes razón, Zetsu explicale a Obito como funciona todo esto

Zetsu salió nuevamente del suelo, ahora estando junto a Sasori
– Espero entiendas... Tienes razón, existen versiones aleatorias de ti, pero no te preocupes por eso, al ser yo quien se encarga, elimino todo peligro, así que al universo al que viajes solo existirá un Obito, osea tú, por ejemplo aquí, en este universo solo estás tú, no hay otro Obito
– Comprendo, ahora respóndeme las preguntas que haga
– Comienza a hablar
– ¿Ésto no afectará a mis versiones originales de los universos? Por ejemplo, si ahora yo me voy y como un pan, pero en este universo yo no puedo comer pan ¿Le va a afectar a la versión original?
– Pregunta difícil, pero no, ahora que has interferido en los universos, cuando te vayas a otro, tus versiones originales seguirán actuando como lo harías tú
– Ya veo, no entiendo nada... ¿Ésto no va a afectar a mi universo original?
– Para nada, tú ya estás muerto en el universo de donde provienes, así que no tendrá efecto alguno
– ¿Y cuando me quiera ir de este universo?
– Sasori y yo te vamos a estar acompañando, cuando te quieras ir, solo debes llamarnos por nuestros nombres
– ¿Nadie me está tomando por loco al ver que hablo solo verdad?
– No, ahora mismo estás es una “burbuja” y nadie puede verte, a menos que salgas de ella
– ¡Es asombroso lo que la magia demoníaca puede hacer!

Obito miraba la ya visible burbuja que había mencionado Zetsu, cuando sus ojos encontraron a la persona deseada, era inconfundible, su cabellera rubia y larga, con una pequeña coleta, flequillo igualmente largo, y la voz, esa voz que volvía loco a Obito; Deidara pasaba unos metros frente a él.
– Deidara... ¡Es Deidara!

– Espera Obito, todavía hay algunas cosas que debes saber
– Lo siento Sasori, pero debo ir por Deidara
– Pero de- ¡Obito regresa!

Obito había salido corriendo de la burbuja, fue tan feliz al ver a su amado caminar nuevamente y sobresalir entre los demás.
A pocos centímetros, Obito abrazó a Deidara por detrás, mientras no paraba de decir “Dei eres tú ¡Estás aquí conmigo! Deidara de verdad eres tú!” la respuesta que recibió no fue tan gratificante
– ¡¿Que crees que haces idiota?! ¡Yo nunca te he visto así que suéltame!

Deidara se soltó de los brazos de Obito, por su parte, él no podía asimilar lo que Deidara le dijo.
Sin apartar la mirada, vio como Sasori ya se encontraba detrás de Deidara; había detenido el tiempo
– Te dije que no salieras corriendo, por eso suceden estás cosas
– ¿Que hiciste?...
– Solo congelé el tiempo en este segundo, de nada
– No me refiero a eso... ¡¿Porque no me reconoce?!
– Si escucharás, tal vez lo sabrías

Obito tomó bruscamente de la capucha a Sasori
– ¡Dime por qué no me reconoce, maldito enano pelirrojo!
– Estaba a punto de decirte, pero saliste corriendo...
– Ahora dime por qué
– Como ya sabes existen más versiones de tí, al parecer en este universo nunca has hablado con Deidara, así que el no te conoce
– ¿Entonces que hago?
– Puedes volver a enamorarlo o simplemente ir a otro universo
– Es una buena idea, regresa el tiempo a la normalidad
– ¿Estás seguro de lo que haces?
– Sí

Sasori volvió a regresar el tiempo al momento en que lo había congelado, desapareció con la corriente de aire
– Disculpame, creo que te confundí con alguien más
– ¿Tengo cara de estúpido? Dijiste mi nombre así que me debes de conocer
– Hay una buena explicación para eso

Obito estaba nervioso, no sabía cómo explicar, pero una pequeña salvación apareció
– ¡Deidara no te alejes de mí!
– Y yo te dije que no necesito de tus cuidados, estoy bien

Una jovencita de cabello corto y castaño llegó
– Tus padre me dijeron que necesitas cuidados, así que no te alejes
– Mis problemas no te deben de interesar, Rin
– Deidara...

Obito estaba confundido, nunca había visto a esa chica, pero parecía ser cercana a Deidara.
Rin lo vio con intriga
– Perdón Deidara, mi amigo te asustó ¿Verdad?
– ¿Es tu amigo?
– Sí Deidara, ¿No te había dicho que vendría?
– No me dijiste
– Mi error, pero él es mi amigo, ahora voy a hablar un poco con él ¿Sí?

Rin se llevó a Obito, el no sabía ni que decir, mientras caminaban seguía observando a Deidara ¿Cómo lograrías enamorarlo de nuevo? ¿Podría funcionar lo que hizo originalmente?
– De verdad no sé quién seas... Pero no molestes a Deidara
– ¿Y tú quién eres para prohibirme eso?
– Soy la encargada de cuidar a Deidara, el tiene problemas de ira
– ¿Problemas de irá?
– Cualquier situación de nerviosismo le causa problemas y comienza a gritar, así que no lo molestes, puede ser muy peli-
– Me gusta Deidara y voy a buscar la forma de estar con él
– ¿Qué?
– Soy Obito y voy a casarme con él
– Pero-
– Así que adiós, voy a hablar con Deidara

Obito regresó con Deidara, sonriendo le tocó el hombro y el rubio volteó a verlo
– ¡Hola! Me disculpo por lo de hace unos minutos, Rin me había hablado de tí y yo me emocioné al conocerte
– ¿Cuál es tu nombre?
– Obito, puedes decirme Obito
– Obito, hm, que nombre tan extraño
– ¿Extraño?
– Eres muy alto, ven conmigo, necesito que me ayudes
– Pero Rin...
– Déjala, me molesta mucho así que vamos a mí taller, hm
– Está bien, eres muy lindo, Dei
– Gracias... Tu también lo eres, Obito
– ¿Eh?
– Nada, camina rápido, hm

Obito fue detrás de Deidara, a lo lejos lo veía Sasori y Zetsu
– ¿Le dijiste sobre el trato?
– No, hay que dejar que disfrute un poco de ésto, además no creo que le importe
– Que considerado, Sasori-kun
– Lo mismo digo, Zetsu
– ¿Y crees que él se de cuenta de que no le estás cobrando el trato a Obito?
– Lo va a saber, él sabe todo, hasta lo que estamos diciendo ahora
– Que miedo... Pero ¿Obito podrá lograr lo que quiere?
– Lo va a lograr, pero creo que ya conoces la respuesta... Quiero ver cómo termina esta vez
– ¿Será interesante ahora?
– Puede ser, pero voy con él
– Ya quiero que comience lo interesante
– Me gusta tu diversión...