Prohibido.

12

El no se daba cuenta de mi presencia y yo solo lo miraba de reojo sin que mi guapo jefe se diera cuenta.

Jungkook.- ¿Quiere que ya nos retiremos? - me preguntó tranquilo

Si - dije levemente - Tenemos que levantarnos temprano

El sonrió y pidió la cuenta, noté como Jimin la devoraba a esa chica y solo apreté mis puños.

Al pagar ambos salimos, pero sentí una mano tocar mi cintura y al ver ví como mi jefe caminaba tranquilo sin quitar su agarré de mi cintura.

Pidió un taxi para ir a dejarme a mi casa, al llegar le pedí que pasará para agradecerle.

Jungkook.- Linda casa - miró alrededor

Gracias - dije sonriendo

Sentí como me atrajo más a él y sus manos se posaron en mi cintura mientras yo lo miraba fijamente a los ojos.

Esto está mal - hablé

Jungkook.- ¿A caso te importa? - alzó una de sus cejas

Eres mi jefe - me acerque a su oído y sentí su respiración en mi cuello - Un jefe no puede estar así con su secretaria

Comenzó a reír mientras seguíamos mirándonos.

Jungkook.- ¿Has visto esas series dónde el jefe está interesado en su secretaria? - me preguntó y asentí - ¿Por qué no podemos hacer esto ahora?

Sus labios ahora están sobre los míos, nuestro besó fue salvaje y apasionado.   Comenzamos a quitarnos nuestras prendas y de un momento a otro estamos en uno de mis sillones.

Su tacto en mi piel me hacía estremecer, sus manos acariciaron mi espalda hasta llegar a mi cintura.

Me agrada esto - sonreí coqueta

A la mañana siguiente ví como mi jefe comenzó a vestirse, lo miré de cercas y tienes buen cuerpo; caminé unos pasos hasta llegar al frente y le extendí un café caliente.

No sé si te guste pero es para animarte - dije tranquila

Jungkook.- Después de lo de anoche nada puede animarme - sonrió coqueto

El está sin camisa y comenzó a beber el café hasta terminarlo, lo dejo encima de mi mesa de centró.

Jungkook.- No tengo problema que llegues un poco tardé - dijo tranquilo - No te voy a descontar

¿Seguro? - hice un leve puchero

Jungkook.- Más que seguro - acarició mi barbilla y dejo un corto beso - Nos vemos en la oficina muñeca

Terminó de ponerse su camisa y salió de mi casa, sonreí, fue una buena noche; deje ambas tazas sobre el lavabo y fui a mi habitación para darme un buen bañó.

Me puse un pantalón y un blusa blanca, tiene un ligero escote pero deja ver bien pechos y bien formados; arreglé mi cabello, un ligero maquillaje natural.

Al estar lista salí de mi casa y me topé a Jimin quien luce demasiado bien con un pantalón negro y camisa gris, dejando ver su pecho, su cabello ahora negro.

El está recargado en su automóvil y me mirá fijamente a los ojos; respiré un poco y caminé hasta llegar a él.

Buenos días - dije tranquila

Jimin.- ¿Tan tarde al trabajó? - me preguntó seriamente

Si - hablé tranquila - ¿Por qué?

Jimin.- Por nada - dijo serio - Sube te llevaré a tu trabajó

No es necesario - negué mi cabeza - Puedo tomar un taxi

Jimin.- Escucha órdenes linda - me tomó de mi cintura y me atrajo a él - No me gusta que me nieguen cuando soy una orden

Me abrió la puerta y subí, el hizo lo mismo, lo encendió y comenzó a manejar.

Jimin.- Te estuve marcando - me dijo sin quitar su mirada

Estaba dormida - mentí

El no me dijo nada y cuando ví que el giró del otro lado de la calle donde es rumbo a mi trabajó.

¿Por qué das vuelta? - dije confundida

Pero el no me respondió a mi pregunta y continuo manejando hasta llegar a un hotel de cinco estrellas, se estacionó en una de las habitaciones que hay y puso seguro en las puertas.

¿Qué hacemos aquí? - pregunté

Jimin.- Son buenos los mañaneros - dijo tranquilo - Ahora te quiero encima de mí

Su intensa mirada me puso un poco caliente, hice lo que me pidió y sus pulgares acariciara mis pechos, quitó con cuidado mi blusa dejando ver mi lencería blanca.

Jimin.- Te queda jodidamente bien - dijo con voz ronca - Esperó no te moleste llegar más tarde a tu trabajó