AMOR Y DESEO (Flaviera)

16.- La Rambla

Flavia: "Crucemos por "el Raval" y llegaremos en diez minutos. Es un barrio intercultural con teatros, museos, bibliotecas, mercados, tiendas, bares y restaurantes. Lo negativo de él es la suciedad de sus calles y la inseguridad que se sufre en ellas por las noches. Solo una de las aceras de "las Ramblas" pertenece a este barrio, pero igualmente las dos están fusionadas".

Javiera: "Ah, de acuerdo", dijo todavía confundida por lo sucedido.

Flavia: "¿Ves? Cambiamos de acera y ya no estamos en "Sant Antoni".

Efectivamente, Javiera pudo apreciar la diversidad cultural que conformaba el barrio y se sorprendió al descubrir varios teatros y salas de exhibición.

Nada más entrar en "las Ramblas", allí estaba la fuente de "Canaletas", donde los aficionados del Barça celebran sus victorias. También había un teatro en cada acera.

Flavia: "Vayamos por el centro".

Flavia cogió de la mano a Javiera, la llevó al centro del paseo y comenzaron su ruta, dejando atrás la Plaza Cataluña y dirigiéndose hacia el puerto antiguo.

Javiera estaba sorprendida. "¡¡¡Iban cogidas de la mano!!!", pensó, "¡¡Qué sensación tan agradable!!".

Vieron los quioscos de prensa, los puestos de flores, el Teatro del Liceo, el Mercado de la Boquería, las iglesias, los bares, las tiendas de souvenirs y lo más impactante, las estatuas vivientes: personas disfrazadas magistralmente que no se mueven durante horas y van recogiendo los donativos de los transeúntes.

De lo que más sorprendida estaba Javiera era de la libertad con la que podían pasear cogidas de la mano. El paseo estaba lleno de personas de diversas nacionalidades que iban en ambas direcciones. Se oían varios idiomas.

De pronto, Flavia soltó su mano y ella se sintió por unos instantes perdida en medio de la marabunta. Pero acto seguido, la cogió por la cintura y la abrazó. Volvió a sentirse protegida.

Tocándole el culo, ("¡¡¡¡Me ha tocado el culo, me ha tocado el culo, me ha tocado el culo!!!!", gritaba Javiera en su interior) Flavia le propuso sentarse en una terraza a tomar café.

Escogieron una mesa bien posicionada y se sentaron mirando el paseo mientras esperaban a que vinieran a atenderlas.

Camarera: "¡Hola Flavia, qué gusto verte!" Se acercó a darle dos besos mientras que le acariciaba un brazo y la contemplaba con coquetería.

Javiera abrió los ojos como platos y se dijo: "¿¡Cómo!?"

Camarera: "¿Qué te pongo?"

Javiera pensaba: "Esta niña no me mira. ¿Soy un fantasma?"

Flavia: "Tráenos dos cafés, por favor".

Camarera: "Ahora vengo". Y se dirigió al interior del bar.

Flavia: "Es la Nicole. Una amiga de la Miri".

Javiera: "¿Por qué no me la presentaste?"

Flavia: "Perdona, no me dí cuenta".

Javiera: "Ya, te has emocionado demasiado".

Flavia: ¿De qué hablas?

Javiera: "Además, ¡ella ni siquiera me miró!".

Flavia: "Jajaja, ¡estás celosa!"

Javiera: "No".

Flavia: "Jajaja, que sí".

Javiera: "Simplemente es cuestión de educación. De ¡falta! de educación".

Flavia: "No me vas a hacer una escenita, ¿no?"

Javiera: ¿Escenita?

Flavia: "Sí, escenita".

Javiera: "No me lo puedo cree...."

Llegó Nicole con los cafés y con una sonrisa de oreja a oreja.

Nicole: "Aquí los cafecitos. Os he traído unas chocolatinas". "Por cierto, (se dirigió a Javiera) soy Nicole". Y le extendió la mano.

Javiera también le ofreció la suya y las estrecharon.

Javiera: "Javiera, encantada".

Nicole: "Ya sé". Y se retiró hacia el bar sin darle posibilidad de réplica.

Javiera miró a Flavia con confusión.

Flavia: "Oh, nada, Miri le explicó, ya está".

Javiera: "¿Qué le explicó exactamente?"

Flavia: "No sé, que yo tenía novia... y supongo que también le diría tu nombre. No creo que le dijera nada más".

Javiera quedó callada y enfadada.

Flavia: "Oh, no, ya vale. Sigamos disfrutando de este maravilloso día".

Tomaron sus cafés en calma y silencio. Javiera, que se había tranquilizado bastante pero seguía mosqueada, cogió con rapidez el monedero del bolso de Flavia y se dirigió al interior del bar a pagar la consumición.

Nicole le hizo una señal al compañero de la barra y se acercó a ella.

Nicole: "Estáis invitadas. Espero verte pronto. Bienvenida". Y miró a Javiera de arriba abajo.

Javiera no pudo reaccionar cuando Nicole se le acercó, le dio un beso en la comisura de los labios y le puso la mano en la cintura. Se sintió deseada y se puso contenta.

Javiera: "Adiós, Nicole, un gusto haberte conocido". Y salió en busca de Flavia.

Flavia: "Uy, qué feliz se te ve. Si no fuera porque no te ha dado tiempo, pensaría que venías de echar un buen polvo".

Javiera: "Tonta". Y le dio un beso largo en los labios. "Sigamos con el paseo".

Caminaron un poco más, pasando por delante del museo de Cera y viendo los puestos de pintura y artesanía.

Flavia: "Y he aquí, finalizando "la Rambla", la controvertida estatua de Barcelona".

Javiera quedó mirándola detenidamente.