/ Cartas /

|Capítulo uno|

Lunes 4:30 a.m.

Ahí estaba, un chico de 16 años, durmiendo en su cama, en diferentes posiciones. Era muy temprano para ser verdad. La noche anterior durmió temprano ya que mañana iba a la escuela.

Ahora es lunes, era su primer día de escuela, estaba entusiasmado y algo asustado.

6:06 a.m.

Este solo se levantó, para después ir a tomarse una ducha.
Solo se quedó pensando acerca de cómo sería su primer día. ¿Podría hacer varios amigos?
La verdad no sabía.

Al terminar de ducharse, se puso una toalla a la cintura, evitando que se viera su parte íntima.

Se puso su uniforme, aunque en realidad no era nada especial, solo se trataba de unos simples pantalones de color negro con una camisa blanca, podemos aclarar que la camiseta era tapada por el chaleco y el suéter, estos eran de un color azul marino, y una pequeña corbata de color negro.

Parecía todo listo, ahora a peinarse.

Aunque, este era difícil, su pelo largo, no lo aceptarían así en la escuela, solo se hizo una pequeña trenza y listo.

Agarro su mochila y fue caminando hacia su cocina.

No esperaba nada, su madre iba temprano al trabajo y llegaba tarde por la noche.

Solo fue a la pequeña mesa, para ver qué había una pequeña bolsa con algo adentro, tenía una nota.

" Hola, cariño.
Espero que te vaya bien en tu nueva escuela.
Te prepare comida, para tu receso, está en la bolsa que está sobre la mesa.
Te quiero ~.
- Mamá "

No era nada nuevo, le era normal que su madre no tuviera tiempo para el, solo tomo la bolsa y la puso en su mochila.
Agarro una manzana y se la empezó a comer, mientras cerraba la puerta.

[]

Estaba caminando hacia su nueva escuela.

Sintió como alguien tocó su hombro, era su mejor amiga Eepop.

— Hey, amigo.- Dijo, saludando la rubia.

Esté solo la saludo. No quería demostrarlo, pero sentía envidia de su físico.

Su amiga Eepop, era un chica rubia, de ojos azules, de estatura mediana, sus mejillas eran de un color rosa y sus labios eran rosados claros.

Todo lo contrario a el.

— ¿Estás nervioso, Kedamono?- Pregunto la de ojos azules.

— Un poco.- Dijo, ignorando la mirada de la chica.

La rubia solo saco su lengua en forma de burla, le gustaba molestar a Kedamono. Esté se enojaba fácilmente .

Al llegar a la escuela la rubia corrio hacia adentro, dejando solo a Kedamono.

Aunque este, solo entro.

— Perdón, Kedamono.- Se disculpo la rubia.- Tengo que saludar a este, bombón.- Dijo abrazando a un chico.

— Me quiero imaginar, es tu novio.¿No es cierto?- Pregunto el de pelo morado.

— Ay, claro que no.- Dijo coqueta.- Es solo un amigo.

— Eepop, eres muy coqueta.- Dijo su amigo.

— Dijo el chico que es asocial.- La chica solo le hizo una seña de burla.

[]

— Demonios..- Dijo con una voz ronca el de ojos rosas.

— ¿Que pasa, Kedamono?- La rubia solo se acercó a su amigo, mientras frotaba sus pechos en el brazo del contrario.- ¿Estás nervioso?