Día 7: La propuesta
Draco x Harry
Draco se consideraba un hombre poderoso, sin miedo al éxito, para Draco todos en el mundo deberían arrodillarse en frente de él.
A sus 25 años era el dueño de más de 5 empresas exitosas en el mundo, era socio de otras 7 y ahora mismo estaba por expandirse a asía, ya que su negocio por los terrenos en china había resultado perfecto.
Draco jamás se arrodillaría ante nadie, ni siquiera porque su vida se encontrara en riesgo, prefería mantener su dignidad.
O eso era lo que pensaba hasta que apareció...él.
Todo empezó en su último año de estudiante, iba a una escuela de prestigio, solo las élites del mundo podrían pagarlo, pero a su benevolente director se le ocurrió la idea de crear fondos para becas.
Ese último año se hicieron exámenes más rigurosos para quienes aplicaran a una beca, de esos exámenes solo 2 estudiantes los pasaron, Hermione Granger y Harry Potter.
Harry Potter...ese chico de ojos verdes y cabello revoltoso, igual que su personalidad lo había atrapado en el primer instante en que lo vio en la ceremonia de bienvenida a los estudiantes.
Fue presentado como el chico con el mejor puntaje de todo el colegio; los siguientes días Draco trató de no darle importancia y trataba de pensar “es un becado nada mas”, pero ese pensamiento no le duró demasiado.
El compartir con él casi todas las clases, verlo esforzarse todas las tardes en la biblioteca, si, ayudaba en la biblioteca para obtener cupones de comida en el restaurante del colegio.
Verlo estudiando en los recesos cuando el sol estaba en su mejor punto y caía sobre las hermosas facciones de Harry...cuando Draco menos se dio cuenta, ya había caído ante él.
Al llegar el receso de navidad, Draco se propuso comprar el mejor regalo para Harry y lo encontró en una tienda sencilla, sin lujos, sin prestigio...un prendedor con una esmeralda pequeña.
Sí, era algo afeminado, pero sintió que le quedaría bien a Harry, así que la compró y esperó dos semanas para volver al colegio.
Cuando entraron de nuevo a clases, Draco se dio cuenta de que tenía competencia, cedric Diggory, el tipo le estaba dando a Harry una pulsera...Y HARRY LE SONRIÓ.
Era ahora o nunca, así que Draco se armó de valor y se apareció en frente de Harry y de Diggory.
-Yo ahm...pues...mm...te quedaría bien-. Sacó el prendedor de su cajita de regalo y se lo puso a Harry en el cabello, claro que sus manos temblaban y sin querer terminó picando el ojo de Harry.Entró en pánico y salió corriendo, sin querer había dejado caer el prendedor en frente de Harry.
Su amiga pansy se había estado burlando de él por las siguientes 3 semanas, hasta que un día vio casualmente a Harry en el jardín estudiando como todos los días a la misma hora, solo que este día tenía puesto el prendedor que Draco le había regalado.
Eso animó a Draco a volver a intentar hablar con él, así que se acercó.-h.hola-.
Harry alzó la mirada y le sonrió.-hola...-.
Las manos de Draco estaban sudando, su corazón estaba palpitando demasiado rápido queriendo salir de su pecho.
-yo bueno...yo, lo siento...ese día no quise...lastimarte-.Harry rio levemente.-no me hiciste daño -.
Draco le sonrió conteniendo inútilmente su nerviosismo.-quisiera que...quisiera saber si tu querrías, bueno, estas obligado a aceptar, pero quisiera saber si… -.cerró sus ojos y lo dejó salir .-¿Quieres ir mas tarde por un helado...conmigo? -.
Harry asintió.- Sí, me gustaría -.Sonrió...la sonrisa más hermosa que Draco hubiese visto en su vida.
Esa tarde salieron del colegio y fueron por el helado y el resto fue historia
Ahora 8 años luego Draco estaba igual de nervioso que en aquella ocasión.
Había salido temprano en la mañana despertando a Harry con su desayuno favorito, le dijo que saldría temprano a la empresa.Pero en realidad fue a buscar el anillo perfecto y las flores perfectas para darle a Harry.
Estuvo toda la mañana y parte de la tarde buscando cuando por fin encontró un par de anillos, uno con pequeñas incrustaciones de esmeralda y el otro con diamantes, perfectos para ambos.
Luego fue por rosas blancas, las favoritas de Harry.
Pero en eso recibe un mensaje por parte de Harry, “Pansy me dijo que no has ido a la oficina en todo el día, ¿dónde demonios estás?”.
Sintió el verdadero terror, así que se apresuró a volver a casa sin responder e mensaje.Al llegar vio que Harry estaba en la entrada de a casa esperándolo, sin darle rodeos al asunto se acercó a Harry y se arrodilló, estaba nervioso y sus manos temblaban.
-Harry Potter, sé que a veces te sacó de tus cabales y que a veces me pongo insoportable, pero sin ti yo no podría seguir viviendo, mi vida ya no tendría sentido sin ti-.
Abre la caja del anillo.-¿Quieres casarte conmigo?-.
Pero en vez de alzar la caja con el anillo terminó alzando las flores y...picó el ojo de Harry de nuevo…