MASK

Cap.17

Caminaba junto con Mark, estaba riendose mientras ibamos juntos al teatro de la escuela.

-¿que se siente ser Romeo? Hay muchas chicas que desean ser Julieta- me codea Mark divertido.

-estas exagerando, no son tan...-pero me callé porque a mi alfrente habia como tres colas de chicas que audicionaban para el papel de Julieta, ¡wou!.

-¿ya vez hermano? Eres famoso.

Talvez tenia razón, lo curioso es que nunca me esforzé por ser popular.

-¿que opinará de esto Lorena?-pregunté preocupado.

Si Lorena veía que muchas estaban a mi atrás, talvez se molestaría mucho.

-nada, ni siquiera querias participar, ademas solo será un beso cortito, no te preocupes- menciona relajado.

En eso entra Lorena a la habitación, atrayendo la atención de muchos chicos.
Es que era muy bonita, tenia su cabello color fuego y esos ojos verdes brillantes que te daba ganas de quedarte mirandolos.

Ella me miró y me sonrió.

Soy tan afortunado.

-deja de poner cara de bobo primo, no pienso limpiar tu baba - menciona asqueado James.

Despierto del sueño que estaba.

—lo hace casi todo el tiempo—dice rodando sus ojos Mark

-losiento, me distraje ¿como estas? No hemos hablado desde la mañana- le sonrío.

-estoy bien,una pregunta ¿porque estan haciendo filas las chicas?- miro intrigado la escena.

-pues estan haciendo cola para ser Julieta- despues paso mi mano por mi cabello- y yo seré Romeo.

-wou, felicidades Josep-me sonrío-bueno, yo estoy postulando para Teobaldo.

-que bien, creo que Mark tambien esta postulando para ese papel, será mejor que te esfuerzes- le palmeo su hombro de manera de consuelo.

-algo que debes saber, que yo nunca me rindo- me lanzó una mirada desafiante y se fué.

—vaya, que intenso tu primo— dice Mark.

Bueno...

Hasta que mi mirada se va a una chica con cabellera rubia en una coleta alta, que curiosamente estaba en la fila de Julieta.

Espera... HELENA TOMILSON ESTABA EN LA FILA DE JULIETA.

—hermano, parece que hubieras visto un fastama ¿que pasó?— me mira intrigado Mark.

—Helena...—la señalo.

—pero ¿de que hablas?—mira donde señalo y se queda tan sorprendido como yo.

—Hola chicos—al ver que no le hacemos caso—espera ¿estan bien?— pregunta Sadashi quien nos mira extrañada.
No la culpo, parece que estuvieramos viendo una pelicula de terror.

Denuevo señalo el lugar donde esta Helena.

—¡oh!— se ríe— Helena esta audicionando porque su madre y hermano la obligaron a audicionar.

—¿como?— esta vez la miro un poco confundido.

— su mamá a su edad participo del mismo papel en su escuela y su hermano en el papel de Romeo, ellos aman lo que tenga que ver con el teatro, ella no quería pero parece que lograron "convencerla"— me río al imagener como habra sido la escena del convencimiento.
Segura una Helena parecida a una fiera.

—espera, ¿su hermano esta aqui?—pregunta animado Mark.

Nose si sabrán pero Asher Hamilton era el chico mas popular y no solamente porque era guapo, sino tambien porque era el capitan del equipo de futbol y tiene talento como tocar el violín, lo hace de maravilla.
Lo que no sabía es que habia participado en una obra de Romeo y Julieta.

Mi amigo Mark lo admira, sobre todo por su popularidad, me pregunto coml le estará llendo en la universidad.

—sí, esta de visita por un tiempo, debe de estar de vacaciones.

—creo que uno de estos dias deberiamos ir a verlo ¿no Josep?— me pregunta mirandome Mark.

—sí, seria bueno...

En eso me llama la profesora para que suba al escenario.
Que fastidio.

— que te vaya bien bro— nos damos un choque de puños y subo al dichoso escenario.

Cuando lo hago varias chicas gritan.
¿Okey?.

—comenzemos con la señorita Madison.

Era una chica de cabello negro y ojos azules, tenia que admitir que es bonita.

—¿comenzamos?—le sonrío.

—si...si— contesta nerviosa.

Y asi es como paso una hora lleno de practicas con chicas nerviosas que se olvidaban sus lineas o se ponian muy timidas, hasta que llegó Lorena.

Ella con una sonrisa segura subió al escenario y me miro con sus ojos verdes segura de si misma.
La profesora sonrío al verla, despues de todo ella era la mejor de la clase.

—linda, puedes escojer cualquier escena con nuestro Romeo—sonrió alegre.

—bien— comenzó a tararear, yo la mire confundido.
¿Que esta pasando?
Al ver mi mirada de ¿acaso estoy viendo un marciano?

Giro sus ojos indignada.

—son tecnicas de actuación querido, cosas que no tienes idea—me guiño un  ojo.

La deje ser.

—estoy lista.

LORENA.-  ¡Ay de mí!

JOSEP.-  ¡Habla! -¡Oh! ¡Prosigue hablando, ángel resplandeciente! Pues al alzar, para verte, la mirada,tan radiosa me apareces, como un celeste y alado mensajero a la atónita vista de los mortales, que, con ojos elevados al Cielo, se inclinan hacia atrás para contemplarme, cuando a trechos franquea el curso de las perezosas nubes y boga en el seno del ambiente.

LORENA .-  ¡Oh, Romeo, Romeo! ¿Por qué eres Romeo? Renuncia a tu padre, abjura tu nombre; o, si no quieres esto, jura solamente amarme y ceso de ser una Capuleto.

JOSEP.-   (aparte.)¿Debo oír más o contestar a lo dicho?

LORENA-  Sólo tu nombre es mi enemigo. [Tú eres tú propio, no un Montesco pues.]¿Un Montesco? ¿Qué es eso?

—¡corte!—grita la profesora, sabía que eres la mejor linda, toma asiento.

Ella sonríe y se va contenta a sentarse.
Siento lastima por la que le sigue.
Creo que lo hizo bien.

—Helena Hamilton, pase porfavor— llama la profesora.

NO PUEDE SER.

Ahora la miro con mas detalle.
Esta con su cabello suelto,un polo blanco y unos jeans mas grande que su talla habitual, como siempre sin ninguna gota de maquillaje.

—no te emociones Josepo, solo vengo obligada—rueda los ojos.
Me lanza una mirada penetrante y despues suspira.
Almenos no va hacer raros rituales.

—¡comienza!—grito la profesora.

HELENA.-  ¿Por qué así me violentáis? - Jamás consentiré, pueden faltarme las fuerzas, pero es invariable mi voluntad. -No quiero casarme con Paris. ¡Romeo es mi consorte!

JOSEP-  Romeo es tu consorte; ese Romeo soy yo. Ni todo el contrario poder de la tierra o de los hombres romperá nuestro vínculo, ni te arrancará de mi corazón.

HELENA.-  Yo conozco esa voz; su mágica dulzura despierta mi suspenso espíritu. -Ahora recuerdo bien todos los pormenores. ¡Oh! ¡Mi dueño, mi esposo! 
¿Huyes de mí, Romeo? Deja que toque tu mano y que guste el cordial de tus labios. -¡Me asustas! Habla. -¡Oh! Que oiga yo otra distinta voz que la mía en este lúgubre antro de muerte, o perderé el sentido. -Sostenme.

NO PUEDO CREERLO.

Helena me esta abrazando.

Continuará.......

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