Helena no sabe mostrar sus sentimientos, siempre ha sido arisca, malhumorada y siempre a la defensiva, ella no era ninguna chica débil pero como todos, siempre tenemos una debilidad.
Josep es el antónimo de Helena, nunca le ha gustado su carácter...
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—jajajajaja — rompe en carcajadas — no mientas Helena, ¿encerio le hiciste eso al profesor? —Josep esta rojo de tanto reírse.
—no me culpes, estaba aburrida.
No puedo creer que el chico de mis sueños este riéndose conmigo, se ve tan lindo, como sus ojos brillan cada vez que se ríe.
— supongo que sí —me da una mirada de soslayo — ¿te gustaría ver una película?
¿Quiere ver una película conmigo? ¿Los dos veremos juntos una película? Oh amor mio, ¿que le haces a mi corazón?
—sí, no estaría mal.
Entonces agarra una caja que esta llena de cd, se pone a mirar una por una y me mira.
—¿que película quieres ver? — me pregunta.
—solo no pongas una cursi, ¿que tal una de acción?
—¿rápidos y furiosos? —me sonríe.
—me leiste la mente.
Cuando pone la película de sienta a mi lado y me mira.
—sabía que no te gustaría esas películas cursis — me guiña el ojo y ahora si mira la pantalla.
Y aquí esta el chico que con cualquier gesto podia enamorarme cada vez mas, si es que eso es posible. Nos demas quedamos viendo esa película como dos horas y siento algo en mi hombro, es su cabeza, ¡esta recostado sobre mi hombro!.
Puedo sentir su respiración que me cosquilla en mi piel, su calor me embriaga, su perfume me hipnotiza.
Sera mejor que me valla antes que mis padres se preocupen, ¡ja! como si esas cosas pasaran.
Me muevo suavemente y dejo su cabeza en un cojín, se ve tan lindo cuando duerme. Apago el televisor y la luz, cierro despacio la puerta para no hacer ruido .
Bajo las escaleras y cuando abro la puerta escucho un carraspeo. Volteo y es el abuelo con la abuela.
—cariño, ¿no pensabas irte sola tarde a tu casa? — me dice la abuela.
—ya estoy acostumbrada —me encojo de hombros, mis padres no son los más responsables que digamos.
—no, Jhon y yo te llevaremos, no irás sola —se niega la abuela
—pero...
—no te preocupes suban a mi carro que esta afuera.
Solo me queda obedecer, salimos a oa calle y en la acera esta un parkad color verde, es antiguo ese carro pero se ve cuidado.
En silencio subimos al carro, los abuelos adelante y yo atrás. Mientras el abuelo enciende el carro, me acomódo mirando hacia fuera.
—entonces Helena... ¿Tienes planes para este fin de semana? — pregunta el abuelo mientras mira al frente.
