Una mañana con papá.

8K 970 490
                                    

Mis ojos de abrieron lentamente por la luz del sol, ni siquiera sabía la hora que era pero sí era muy tarde, por suerte era mi día libre así que no tendría nada que hacer.
Bueno, eso suponía.
Una pequeña figura correteando de un lado a otro con un pijama de oso y cabello largo y negro llamó mi atención, sonreí al darme cuenta que era Fuji seguramente haciendo una travesura como siempre y volví a acostarme para disfrutar de ese día ¿qué fecha era? tampoco tenía idea pero sabía que era jueves.

Jueves.

Salté de la cama como resorte y tomé mi celular para fijarme la hora. Ahogué un grito al darme cuenta que una vez más la había cagado, eran las ocho de la mañana y se suponía que Fuji ya debía estar en la escuela, por mi cabeza empezaron a pasar todas las formas en las que mi esposo me mataría pero no, cálmate Keisuke, todavía hay esperanza, todavía se puede.

Corrí como alma que lleva el diablo hacia el baño tomando a mi hijo en brazos.

- Fuji, maldito mocoso malcriado ¿por qué apagaste mi alarma? - Lo miré con reproche mientras lo sentaba en la tapa del inodoro y me giraba para sacar lo necesario. - Te dije que le hagas travesuras a quien quieras pero no a mí porque no me aguanto y te la devuelvo.

- Papá no me gusta. - Sus ojos tan verdes como los de Chifuyu me miraron con enojo, pude ver a mi omega reflejado en ellos mientras me decía que era un imbécil. - Papá malo.

- Está bien no gustarle a todo el mundo pero ¿malo? - pregunté mientras sujetaba su cabello en una pequeña coleta. - ¿Cuál fue el mal que yo hice?

- Papá dijo que mamá no enojarse y mamá se enojó. - Un adorable puchero y unos ojitos de cachorro hicieron que me derrita de ternura mientras le cambiaba la pijama por el uniforme.-

- No, mamá no se enojó contigo cachorro, solamente está molesto conmigo. - Dejé un pequeño beso en su frente y después lo levanté con un brazo mientras que con el otro cepillaba sus dientes con cuidado. - Además ¿cómo se te ocurre hacerme caso? Fuji, yo no soy el cerebro del equipo, ese es el tío Mitsuya. -

Una vez listo, corrí fuera de la casa con él en brazos pero me detuve al notar que al parecer Chifuyu se había llevado el auto. ¿Y ahora qué? van a matarme, a este paso iba a terminar divorciado y dando una charla en alcohólicos anónimos. 

- ¡Ahí papá! - Sus pequeños deditos señalaban con emoción mi moto y bueno no es como si pudiera hacer otra cosa porque ya era tarde y Fuji seguramente haría un berrinche si lo llevaba en taxi, punto para el mocoso. Le puse el casco y arranqué la moto para ir lo más rápido posible.

Apenas llegamos y yo ya estaba con Fuji en la puerta de la escuela mientras le acomodaba la mochila y lo empujaba suavemente por los pasillos. Todo iba considerablemente bien, pero cuando vi a la directora dando la vuelta por el pasillo en el que estábamos nosotros todo empezó a ir considerablemente mal. Miré a mi hijo que tenía un puchero en los labios y me agaché para hablarle, si alguien debía sacrificarse ese debía ser yo. 

- Rápido Fuji, corre, corre lo más rápido que puedas y si te piden justificación les dices que se murió tu abuela. - Asintió con su pequeña cabecita y corrió lo más rápido que sus cortas piernas podían.

- Señor Baji, es un milagro tenerlo aquí y en esas fachas. - La directora me miró de abajo hacia arriba, su olor a menta era muy fuerte y asqueroso, sin dudas era alfa. - Se me hacía extraño no ver a su omega por aquí. 

Ahí me percaté de mi pijama del capitán américa. 

- Ah, es que Chifuyu tenía que operar a un gato hoy. - Ahora necesitaba a Kazutora porque si hay algo que no puedo hacer es mentir, ese trabajo le dejo al tío favorito del mocoso. Mis nervios siempre juegan en mi contra.

- ¿Su esposo no trabajaba en un cafetería? - Bueno, cagarla una vez, dos veces, solamente es una raya más al tigre ¿no?

Carajo.

- Es una cafetería para gatos. - 

Al menos Fuji sí llego a clases y la directora me dejó en paz después de asegurarle que pagaría lo del auto del profesor de Fuji, llamé a Chifuyu para contarle todo lo que me pasó y solamente recibí un "Baji, debes despertar más temprano ¿sí? iré a atender a alguien, te amo. "

Tuve fe. 


، ✶ 𝗟𝗔 𝗙𝗔𝗠𝗜𝗟𝗜𝗔 𝗕𝗔𝗝𝗜 !Donde viven las historias. Descúbrelo ahora