𝐒 | ❝ déjame ir ,Peter, estaremos bien❞
susurró ella con un hilo de voz,
y soltó su mano.
Donde el amor de Amy y Peter era tan poderoso, que incluso la estrella más fuerte del universo podría ser vencida por ellos. Un impe...
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Peter tensó su mandíbula y se levantó de su silla.
—Escúchame bien Tobey, no quiero que vuelvas a hablar así de Amy, no la conoces, ninguno de ustedes la conoce, entonces mejor ahórrense sus estúpidos comentarios— el Pevensie advirtió.
—¿Por qué la defiendes Peter? Ella no es importante— Lisa contestó.
—Dejen que defienda a su familia, es solo un idiota más— Tobey interrumpió dirigiéndose a los demás en la mesa.
Esos comentarios desataron la ira del rubio, y no pudo contenerse más. Le lanzó un puñetazo a su supuesto amigo, ganándose las miradas sorprendidas de todos los demás alumnos que se encontraban en el comedor.
Rápidamente, Edmund, Amy y Susan se pusieron de pie y corrieron en dirección a Peter para ver qué sucedía.
Tobey le devolvió varios golpes al mayor Pevensie y así comenzaró la pelea entre ambos. Luego, se les unieron otro grupo de estudiantes, algunos apoyando a Peter (entre ellos Edmund) y otros apoyando al chico Tobey.
—¡Peter detente!— gritaban Susan y Amy al unísono bastante preocupadas.
Pronto, varios profesores llegaron a separarlos y a ambos los llevaron a dirección. Mientras tanto, mandaron a todos los otros estudiantes que se encontraban en el comedor hacia sus aulas.
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La hora de la salida había llegado. Amy tomó su mochila, la colgó en sus hombros y salió de su salón. Afuera, la estaban esperando Susan y Edmund.
—Qué pasa?— preguntó confundida.
—Acabamos de ir a ver a Peter... él quiere verte, está en la enfermería— Edmund avisó.
—Está bien, pero antes debo recoger a Ava.
—Nosotros la llevamos a casa, ahí puede estar un rato con Lucy, tú tranquila— Susan la calmó y Amy asintió agradeciéndoles.
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—Hola Pete.— lo saludó una vez que llegó a su lado
Peter estaba solo, sentado en una camilla de enfermería.
—Hola— respondió con la mirada perdida en algún lugar
—¿Cómo estás?— la chica miró los moretones que comenzaban a formarse en el rostro del rubio.
—Supongo que bien, me suspendieron por una semana— se encogió de hombros
