Me empeze a desesperar. Voltee y vi como los demás se levantaban adoloridos. Después oyeron lo mismo que yo oí y empezaron a gritar. Carl se levantó para calmarlos. Luego llego otra persona que me escolto hacia adentro y hablo.
-¡Escuchen!- grito. -No entren en pánico, hay que calmarnos y bajarnos del autobús. Todos ayudaremos a ponerlo derecho, así que levántense y vengan.
Mire hacia mi lado derecho y vi que Phill se levantaba hacia ellos. Yo hice lo mismo. Me arrastre por los asientos de a lado (bueno, ahora de abajo) hasta que llegue a la puerta, donde me ayudaron a salir.Al salir, lo primero que hizo fue ver que nadie se hubiera lastimado seriamente. Al comprobar que nadie estaba en ese estado voltee al otro lado para ver si había rastros de algún loco corriendo hacia nosotros. Por suerte, no había nadie.
Entonces salió Phill. Carl fue de los últimos en salir. Por las cosas que a hecho, no me sorprendería que el fuera el líder.
-¡Tenemos que levantar el camión, así podremos llegar al refugio!- grito a toda la gente.
Todas las personas, incluyéndome, estaban empujando el camión para enderezarlo. Íbamos como a la mitad del camino cuando se oyeron los mismos gritos, y al voltear vi a un grupo de personas que corrían rápidamente hacia nosotros.
-¡Corran, no nos queda mucho tiempo!- grito Carl.
Toda la gente usó toda la fuerza que tenía para levantar el camión. Estábamos tardando y nos estaban alcanzando. Seguíamos empujando, hasta que de repente el camión volvió a tener la misma posición. Ahora sólo faltaba encenderlo.
Nos subimos todos y nos sentamos donde íbamos. Entonces se encendió el carro y dio marcha atrás. Estábamos a punto de irnos cuando de repente, el auto se paró completamente. El conductor intentó avanzar, pero no podía.
-¿Qué paso?- grito Carl.
-Se averió el motor, se sobré calentó. No hay modo de mover este camión.- dijo el conductor.Para ese momento los locos estaban a tan sólo unos metros de nosotros. Entonces Carl tuvo una idea.
-Salgamos por la salida de emergencia. Tenemos qué encontrar otro vehículo.-
Abrió el techo (que era la salida de emergencia) y nos condujo a todos ahí . Todos cabíamos en el techo, ya que juntos no éramos más que 20. Voltee a ver a las personas y sólo estaban a una cuadra. Eran por lo menos 90. No había una posibilidad de correr. Estábamos todos agotados y teníamos varias cosas en la espalda. Carl hablo:
-¡Tendremos que saltar a ese edificio y correr por ahí! No hay otra opción, ¡en marcha!
De repente, salto hacia la gasolinera que tenemos a lado. Creí que no iba a llegar, pero lo hizo, y todas las personas en orden saltaban hacia allá. Estábamos cerca de mi turno cuando un fuerte estruendo se sintió en el camión. Después se oyeron unos fuertes golpes que daban al camión. Al voltear hacia abajo se me paro el corazón. Ellos, los locos, estaban ahí abajo.Me estaba empezando a desesperar. Hasta dude en pedirle a Phill la pistola. Pero 3 personas sacaron un rifle que tenían y empezaron a disparar. Unos segundos después, llego mi turno. No estaba segura de poder llegar hasta allá, estaba muy lejos, como la distancia de un carro. Pero lo hice, salte con todas mis fueras sal techo. Cuando creí que me iba a caer vi a muchas manos tomándome. Me subieron y llego el turno de Phill. Es salto como sí fuera un paso, sin dificultad. Después de unas tres personas llego el turno de las personas con los rifles.
Ellos seguían disparando, tratando de detener a los locos. Al darse cuenta de que seguía su turno, dejaron de disparar y fueron a saltar. Pero antes de que el primero lo hiciera se oyó un gran zumbido en el motor, luego comenzó a incendiarse. Carl grito
-¡Corran, antes de que s....!-
Pero ya era tarde. Una explosión fuerte destruyo todo el motor, con ellos arriba.
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Sin salida
Science FictionEn un Apocalipsis zombie una chica y un chico lucharán por sobrevivir a lado de un ex soldado del ejército estadounidense en un mundo asolado por la destrucción de una guerra. >