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Euge

- ¿Te das cuenta de que pasan los años y seguimos siendo un culo para la matemática-?-dijo Tiago riéndose.

Hace media hora estábamos los dos tirados en el piso, tratando de resolver unos ejercicios que nos había dejado la profe particular.

-Sí, hermano. No puede ser- dije tapándome la cara de lo frustrada que me tenía el ejercicio ese- bueno, ya fue ¿merendamos algo?- propuse tirando el lápiz arriba de la fotocopia.

Ya tenía el cerebro chamuscado de tanto pensar.

-no pudiste tener una mejor idea- me contestó, chocando los puños.- voy al baño y te ayudo-

Mientras lo esperaba, fui hasta la cocina y saqué todo lo que precisaba. Vasos, cucharas, la chocolatada, el azúcar, porque el nefasto le pone azúcar a la chocolatada.

Mientras buscaba un paquete de galletitas, escuché que bajaba.

-Bro, al final me voy porque quedé en merendar con mi abuela y recién me acuerdo- dijo, uno más mentiroso no existía, pero bue.

-De una, mandale un beso a mi tocaya- le respondí, su abuela se llamaba igual que yo.- dale que te abro, Ti-

Yo ya sabía que no iba a merendar con su abuela, me había dicho media hora antes que la abuela estaba en la casa de sus primos, a 100 km de acá.

También sabía que se iba a ir a ver con una pibita, porque sin querer le vi un chat con una tal "Meli".

Al final, decidí prepararme la merienda y bajonear sola, porque que el que te gusta te deje por otra debe ser de lo más feo que existe.

𝘁𝗵𝗲 𝘀𝘁𝗼𝗿𝘆 𝗼𝗳 𝘂𝘀 | 𝗧𝗶𝗮𝗴𝗼 𝗣𝘇𝗸Donde viven las historias. Descúbrelo ahora