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Diez segundos después de que Tiago dio el portazo, los demás entraron por la misma puerta.

La encontraron sentada en el piso, con las rodillas contra el pecho, haciendo puchero mientras las lágrimas brotaban de sus ojos.

-¿qué pasó, mi vida?- dijo Lombardo apenas la vio así, lo conmovían las personas en ese estado.

¿A quién no?

Euge

No sé en qué momento entraron. Lo único que sentí fue el peso de un cuerpo que me abrazaba y abrí los ojos, esperanzada de que fuera Tiago que había dado la vuelta.

Ilusa.

No podía parar de llorar, estaba angustiada.

-Euge, respirá por favor.- escuché entre sollozos y traté de hacer lo que me pedían.

-ey- Pri que me hacía señas.- mírame.- dijo agarrando mi cara- necesito que nos digas qué pasó, para saber si los tengo que cagar a trompadas- y provocó que me riera un poquito.- te hablo en serio.-

-¿por qué no te vas a lavar la cara y te pones el pijama? Así estás más cómoda. ¿Queres agüita?- me decía Maga mirándome con los ojos llenos de una mezcla de compasión y lástima. Asentí e hice lo que me dijo sin dudar.

Me miré al espejo y me di lastima. El rimel y el delineador corridos, los ojos hinchados y la boca bien en forma de carita triste. Con razón se preocuparon.

Me desmaquillé, me lavé la cara un par de veces y me puse lo que había llevado para dormir.

-Meu ¿Necesitas algo?- escuché a Pri decir del otro lado de la puerta y la abrí, viendo que estaban todos esperando que saliera. Menos Paula, que la habían mandado a dormir después que tiró la bomba.

-¿Estás bien?- me preguntó Lombardo.

Asentí- estoy cansada.- dije limpiando unas lágrimas que seguían saliendo.

No hicieron más preguntas y fuimos a dormir. Maga me dio el agua que me había servido, y los demás quedaron en silencio.

-cualquier cosa que necesites, nos despertas- me dijo mi amigo antes de apagar las luces.

Ahora quería llorar por los amigos lindos que tengo.

-

Pasé la tarde con ellos. No me querían dejar agarrar el celular para mandarle mensajes a ninguno de los dos.

-déjame avisarle a mis papás que estoy bien por lo menos- dije poniéndome fastidiosa.

-ya le avisó Maga- dijo Pri.- Ahora termina de comer, hasta que no termines el plato no te levantas.- ok, mamá.

-

Estábamos viendo una película, cuando la madre de Priscila le avisó que había gente en la puerta.

-pasá.- dijo seria.

no podía ver quien era porque estaba sentada en el piso y tenía que dar vuelta toda la cabeza para chusmear.

-¿está Meu?- preguntó bajito.

Era Mauro.

-estoy- respondí ahora sí mirándolo.

-¿Podemos hablar ahora?

Le respondí que sí y salimos a la puerta, a sentarnos en el cordón.

Ambos estábamos nerviosos.

-Déjame hablar y no me interrumpas, lo vengo ensayando desde que salí de mi casa- confesó el platinado, a lo que asentí.

-Perdón. Y no empieces con que no te tengo que pedir perdón porque si, me enojé por una estupidez que no tendría que haberme jodido y te eché la culpa de algo que hice yo. Un gil.- rió y siguió con el monólogo- Ayer me fui porque estaba enojado, pero no contigo, sino por la situación. Confundimos las cosas después del primer beso y no es por ahí...Aunque admito que yo confundí un poco mis sentimientos hacia vos y ahora los tengo que aclarar y supongo que vos también, porque sino la pelea de ayer no hubiera pasado.-me miró- No quiero que nos alejemos, Meu. Sos la mejor amiga que tuve en mi vida, y si nos distanciamos me pego un corchazo.-

Lo miré esperando a que siguiera.

-ya terminó el discurso-

Me reí y lo abracé.

-Obvio que te perdono. Y perdóname vos, no me quiero distanciar de vos por nada en el mundo, sos mi mejor amigo y no se que hago sin vos, gordo.- me abrazó él también.- somos unos boludos.-sonreí.

-te quiero muchisimo-

-yo a vos, Meu-

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son más lindos😭😭😭

últimos capitulossss👀

𝘁𝗵𝗲 𝘀𝘁𝗼𝗿𝘆 𝗼𝗳 𝘂𝘀 | 𝗧𝗶𝗮𝗴𝗼 𝗣𝘇𝗸Donde viven las historias. Descúbrelo ahora