Taehyung tenía solo 19 años cuando la prueba de embarazo salió positiva; y Jungkook tenía una familia hecha.
Después de eso Kim Taehyung se ve rechazado por su progenitora, teniendo diferentes dificultades en su vida a raíz de su error.
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Decir que Jungkook no se encuentra preocupado, sería una total y completa falacia. Llegó hace ya más de una hora al departamento en busca de Taehyung, salió de su oficina apenas el peliazul culminó esa corta llamada que tuvieron. Ha estado intentando contactar al chico en todo ese lapso de tiempo, obteniendo nada más que la contestadora del buzón de voz. Se pasea de un lado a otro por toda la sala de estar con el teléfono en la mano izquierda, repitiendo el mismo procedimiento; llamar, escuchar el buzón de voz, dejar un mensaje y colgar.
El Sol está por irse aquel día y eso es lo que le hace preocuparse más. No tiene idea alguna de dónde puede estar o dónde puede buscarle.
Está comenzando a desesperarse.
Y como si fuera cuestión de suerte, pequeñas gotas comienzan a caer del cielo. Ha empezado a llover, aumentando de densidad con el paso de los minutos. Es cuando no puede soportarlo por más tiempo, coge sus llaves y sale del lugar con rapidez. Toma uno de los ascensores y baja hasta el primer piso, sin perder tiempo corre hasta su automóvil, importandole poco el mojarse.
Sale del ayuntamiento. Maneja con cuidado y mira por todos lados para cerciorarse de cada persona que aún se pasea bajo la lluvia. Casi suelta un grito cuando lo ve tres calles más lejos del edificio; Taehyung está sentado en la banca de la parada de autobuses. Pisa el acelerador y se detiene a poca distancia, sin querer ocasionar problemas con el próximo autobús que vendrá. Baja y corre a dónde Taehyung permanece con la mirada baja y la ropa mojada. "Amor..." pronuncia aliviado y se pone en cuclillas frente a él, posa una de sus manos sobre el muslo contrario.
Busca la mirada de Kim, pero él lo evita. No entiende que es lo que sucede. "Vete." Pronuncia débil y tembloroso. Aquella palabra provocó un dolor en el pecho de Jungkook, dónde su corazón se encuentra. "No quiero a nadie ahora, Jungkook. Vete." Repite más fuerte está vez.
Toma una bocanada de aire antes de hablar. "Sabes que no puedo dejarte aquí, ¿Por qué no llegaste antes?" Con lentitud sube su mano hasta el pómulo de Taehyung, acaricia con cuidado cuando ve que el otro no muestra objeción ante su toque. "Vas a enfermarte si sigues aquí, vámonos." Pide dulce.
Jungkook puede notar una lágrima bajar, no deja que está termine su recorrido y con su dedo pulgar, la quita. "¿Tu no piensas, que puedo estar contigo por tu dinero? O, ¿Qué mi único propósito es tener dinero de tu parte porque no puedo costarme cosas por mi mismo? Dime Jungkook, ¿No piensas en eso?" Finalmente, sus miradas se encuentran. Jeon puede ver qué estos están rojos e hinchados, no se ve bien.
Así que eso es, Jungkook piensa. Desde su posición niega con lentitud y sonríe de medio lado para transmitir confianza. "No podría pensar eso de ti, Tae, no. ¿Por qué hacerlo? En todo este tiempo tu no me has pedido nada, te he dado todo por mi cuenta y-"
"Por eso, ¿No has pensado que-" está vez, él le interrumpe.
"Y porque eres un buen chico. Eres puro e inocente, yo sé que tú no eres así Taehyung. Mi chico se pone tímido porque le compro su helado favorito, se ha negado a tantas cosas que aquel pensamiento nunca se ha pasado por mi mente." Añade. Taehyung sonríe tembloroso ante las palabras dichas. "Sea quien sea que haya dicho eso, no dejes que entre en tu mente, Tae. Tu y yo sabemos cómo es esto entre nosotros." Dice, aunque está muy seguro de saber ya quien fue esa persona. "Ahora ven, por favor, vas a enfermar si continúas un minuto más aquí."
