Adiós Ranma

Capítulo 18

Narra Shampoo

Cuando Akane murió aunque fuese bastante tarde me di cuenta que Ranma no me amaba, ni lo haría jamás. Por eso ya no insistí más, además había algo en el fondo que me decía que en realidad ni siquiera yo lo amaba, me habia aferrado a él como si fuese el unico chico en el mundo. Me aferre cuando sabía que en el fondo Ranma solo amaria a Akane y eso nunca cambiaría.

Recuerdo la Navidad cuando Akane dijo que ella se convertiria en la esposa de Ranma, que dejaramos de perder nuestro tiempo al acosar a Ranma de ese modo: «Ranma es mi prometido. Él va a pasar la velada conmigo y mi familia como siempre, él siempre estará conmigo. Mejor olvídense de él porque no irá con ustedes. ¿Qué no entienden? Déjenlo en paz, ya basta de locuras; lo único que hacen es perder el tiempo al acosar a Ranma de ese modo, no pierdan su tiempo»

Yo pensé que no se sentía bien, había tomado algo quizá que le estaba afectando. Y, aunque lo que decía sonaba muy sincero aún así nadie hizo caso y menos aun a ninguna de nosotras nos importo, Akane no ganaría tan fácil. No. No podría.

Luego ella continuó diciendo «Ranma estará conmigo ¿lo oyeron? ¡Ranma pasará todas las navidades a mi lado, porque yo seré su esposa!» En ese momento me quedé callada, no nos importaron las palabras de Akane, pero por alguna razón ya no molestamos más, ese día le dejaríamos a Ranma que estuviese con ella y su familia, al siguiente volveríamos a pelear por él, así fue. Claro que no se lo dejamos solo para ella, nosotras también estuvimos ahí.

El día de la pelea a Ranma se le veía inquieto, todos estábamos luchando dando lo mejor de sí. Akane en un mal golpe salió volando, sí no hubiese estado tan lastimada habría podido caer bien, no dañarse, pero su cuerpo no tenía la fuerza suficiente para detener un golpe tan grande, y aún si lo hubiera hecho ni siquiera era seguro que ella hubiera podido salvarse. Akane, era fuerte pero sus fuerzas se iban acabando. «El cuerpo humano tiene un límite, cuando lo superas no saldrá nada bueno» mi abuela Cologne llegó a decírmelo varias veces.

La pelea había terminado, habíamos logrado entre todos vencer al enemigo. Ranma no había notado lo grave que Akane estaba, él estaba muy agotado, al igual que Akane había superado su límite, pero a diferencia de ella, Ranma no estaba tan herido.

Ukyo y yo fuimos a ver a Akane, estaba mal, muy mal, sabíamos que si no hacíamos algo rápido pasaría algo muy malo. Ella le habló a Ranma y entonces él corrió rápido hacia dónde Akane estaba, ella estaba muriendo, Mousse y Ryoga también se dieron cuenta. Nadie estaba tan grave como ella.

Cuando Ranma la vio sin dudarlo la tomo entre sus brazos, la acercó a su pecho como en Jusenkyo, y le habló, ella apenas y le dijo unas palabras. Sin dejar de verlos, pudimos ver cuando Akane cerraba sus ojos a la par que la mano que había puesto en la mejilla de Ranma se caía lentamente hasta tocar la tierra de la montaña.

Ranma la cargo sin importar lo cansado o herido que estuviera y corrió con ella montaña abajo, sabía, como todos sabíamos en ese momento que Akane se había ido. Me sentí triste. Todos estábamos así, no habíamos tenido una victoria. Habíamos perdido.

Ranma siente que tuvo la culpa porque no pudo protegerla, y porque tampoco pudo llevarla a tiempo con alguien que pudiera curarla, salvarla, pero en realidad no es así.

Después de eso La abuela, Mousse y yo regresamos a China; han pasado ya varios meses, en este tiempo me he acercado a Mousse, y ¿saben? Comencé a abrirle mi corazón, quería darle una oportunidad, y sin esforzarse tanto logro conquistarme, él no lo sabía pero lo había hecho. Sus ojos verdes ocultos tras sus lentes me habían enamorado en tan poco tiempo de estar cerca de él.

Así que un día cualquiera fui a su casa y le pedí que nos enfrentarnos en combate, algo justo, si ganaba me casaría con él, y si no también. Después de una pequeña charla que tuvimos acordamos enfrentarnos en un mes, cuando llegó el día de la pelea ninguno aplicó trampas ni trucos, creo que nunca habíamos sido tan leales en combate. Al final Mousse ganó la batalla, ahora estaba confirmado sería su esposa, sin duda sonreí tras esa derrota, para nosotras el que te derrote el hombre que quieres es lo mejor que nos puede pasar.

Ya ha pasado tiempo, nos casaremos en tan solo una semana y aunque puede parecer extraño estoy muy feliz, me siento bien, alegre, se que mi vida al lado de Mousse será feliz. Me he enamorado de él, estoy segura. Hemos enviado invitaciones de nuestra boda al dojo Tendo, espero pueda venir alguien.

Mousse es sin duda el chico con el que me gustaría pasar mi vida, me he dado cuenta de ello; somos jóvenes, pero, estoy segura que si es con él puedo lograr lo que sea, se que si estoy con Mousse podré ser feliz toda la vida.

Porque desde ahora los gatos y los patos han comenzado ha llevarse bien. Desde ahora los gatos y los patos han comenzado a amarse. Shampoo lo confirma.

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Muchas gracias por leer, espero y les haya gustado el capítulo.