Bergen, Noruega; año 2003
La universidad más importante de Bergen en esa época había logrado reunir el dinero suficiente para darle una oportunidad a sus estudiantes de medicina: laborar por dos años en el extranjero. Eridan Amdalh, una de las doctoras reconocidas en Noruega, apostó todo por su hija Paige, desde que era una niña le inculcó disciplina y voluntad, para ella, valió la pena, pues se convirtió en una de las mejores estudiantes, un futuro prometedor en la ciencia.
ㅡPor Dios, Paige. ¿Cuántas cosas llevas aquí? Esta maleta pesa más que tú y yo juntasㅡRuna renegó.
ㅡNo traje tanto, sólo lo necesario, tenemos que dar una buena impresión en Moscú y Kazánㅡacomodó su cabello.
ㅡAh claro, ¿dar buena impresión se traduce en conquistar a un ruso?ㅡ.
ㅡRuna, ¿qué cosas dices?ㅡLa miró malㅡpara nada, si vamos a estar en Rusia por dos años debemos comportarnos, la primera impresión nunca se olvidaㅡsuspiróㅡeso y que yo soy una fracasada en el amor, ya lo comprobé un montón de vecesㅡ.
Ya que el equipaje fue revisado, ellas bajaron al primer piso del aeropuerto, Runa compró dos emparedados de pollo y vasos con café helado para ambas mientras que Paige se dirigió a una silla de espera, eran las once y media, faltaban treinta minutos para que saliera el vuelo. Eridan ya se encontraba en Kazán, por lo tanto tenían quien las recibiera al llegar y de paso un hotel decente en el cual quedarse.
Runa volvió con los almuerzos, le entregó uno a Paige y se quedó a su lado, comenzaron a comer, al mismo tiempo que observaron el cielo despejado de Bergen, su viaje a Kazán duraría una semana máximo, pues es con el único propósito de conocer dicha ciudad. El periodo de espera acabó, tiraron los trastes al bote de basura y se formaron con los respectivos pasajes, duraron diez minutos para llegar a la puerta de salida. Una vez que subieron Paige estuvo en el asiento de la ventana, mientras que Runa en el centro, la chica de cabello rojo intenso miró a Bergen hacerse cada vez más diminuto a medida que el avión iba subiendo.
ㅡ¿Te dan miedo los aviones?ㅡ.
ㅡNoㅡrespondió la mayorㅡen realidad me gustan, creo que cuando nos quedemos dos años en Rusia puede ser una buena oportunidad para míㅡ.
ㅡYa me confundiste, ¿vas a conquistar un ruso sí o no? Digo, también puede ser una rusa, no te juzgoㅡ.
ㅡ¡Que no se trata de eso, Runa!ㅡRenegóㅡme refiero a tomar aires nuevos, quiero a Bergen, pero suelo sentirme agobiada. No estaba bromeando cuándo dije que me preparé para quedarme sola toda mi vidaㅡ.
ㅡSeñoritas, ¿se les ofrece algo?ㅡEscucharon la voz de un chico que venía con un carrito de comida, mayormente papitas y sopa instantánea.
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Ghostverse (I): Todos Tenemos Una Historia
Science FictionYerik Ivanov, mejor conocido como el Dios de la muerte, vivió un periodo enorme de soledad al haber perdido a su especie "redi mortis" y a Angel, la Diosa de la vida, por lo que decide intentar una segunda vez, creando a los "post mortem". Años desp...