Guille-neko (wigetta)

Capitulo 17 - Intento

Narra Samuel

Me quede unos segundos atrás de la puerta avergonzado. La imagen de Guillermo secándose el cabello se repetía en mi mente, logrando que me ruborizara. Solté lentamente la manilla de la puerta y camine a mi habitación. Al llegar me desplome una vez más en la cama. Mi mente había quedado en blanco, me sentía suspendido, como si volara. Recordé que hoy debía juntarme con Tamara para los preparativos de la boda. La realidad me golpeo en la cara en el momento en que me acorde de eso.
-No quiero- susurre a mi mientras me levantaba. No recuerdo bien como fue que acepte todo esto, lo único que recuerdo es que mis padres estaban realmente felices. No puedo negarles esto, es lo que siempre desearon, me siento tan competido con ellos que… basta Samuel, me dije mientras intentaba desviar aquellos pensamientos de mi mente. Me cambie de ropa y fui al comedor, en donde Tamara me esperaba junto a mi madre, ya que mi padre aun no llegaba del viaje de trabajo. Mi madre al verme entrar en la sala me dedico una mirada de reproche, lo comprendí, debí estar listo hace una hora.
-bueno ahora que estamos los 3 podemos ir- dijo mi mama emocionada
-buenos días Samuel- dijo Tamara al verme
-buenos días- dije respondiéndole a ambas. Salimos enseguida a esas tiendas de pasteles y luego fuimos a ver el lugar. Estaba realmente aburrido y no podía sacar a Guillermo de  mi mente en ningún segundo, ¿Qué estará haciendo?. ¿Cómo será el lugar donde trabaja?... y cosas por el estilo. Siempre me sorprendía a mi mismo preguntándome cosas absurdas sobre él y sentía como mi corazón se aceleraba al recordar su rostro dormido junto a mi. Dejaba de prestarle atención a Tamara y a mi madre, que miraban emocionada todos los detalles de eso que sabía que era un error. Ya estaba atardeciendo y nos tocaba la última tienda por visitar, la joyería.

Narra Astra

Me preguntaba si había echo bien en enviar solo a Guillermo con Benicia, pero es que no puedo ir y decirle “hola Benicia que tal, me quieres matar a mi también o a mi madre”. Mierda, no puedo superar esto, viviré con rabia hacia ella por siempre, esto me matara lentamente y lo se. ¿Pero que quieren que haga?, mato a mi tia que era como una segunda madre, la quería demasiado, aunque, se veía tranquila cuando me pidió que confiara en ella, pero se que lo hizo por el bien de Guille. Solté un suspiro, en este momento necesitaba a Pandora, pero hoy fue a ayudar a mama con la tienda. Se preguntaran, “¿Cómo una gata puede ayudar en una joyería?”, es simple, mi madre a veces necesita ayuda con hechizos en los que solo un animal puede ayudar por lo que Pandora va con ella. Me decidí en ir a la tienda, aunque me quedaba algo lejos y de seguro llegaría por la tarde casi noche, no me importo, necesitaba salir y despejarme. Espero que Guillermo este bien, necito una forma de volver a unirlos, de hacer que Samuel lo recuerde, después de todo se lo prometí.

Al llegar vi como mi mama estaba atendiendo a Tamara y a la madre de Samuel y este estaba codiciando por la tienda. Quede unos segundos petrificada en la puerta y al darme cuenta de que mi mama les ofrecía un anillos de compromiso eterno decidí actuar lo mas rápido que pude
-mama como les ofreces ese horrible artilugio- dije mientras entraba y pasaba el mostrador para quedar a su lado, sentí la fuerte mirada de odio de Tamara en mi, ¿de verdad Guillermo tiene que aguantar esto?
-hija- dijo ella sorprendida y feliz –¿necesitas algo?- agrego tan atenta como siempre
-necesito habar algo contigo- le dije y vi como veía de reojo a sus clientas – será solo un momento, lo prometo- agregue al ver que dudaba
-esta bien- respondió, yo le sonreí con agradecimiento –me disculpan un momento, volveré dentro de poco, mientras pueden ver si algo les agrada- dijo mi madre y me guio a la parte de atrás donde se encontraba Pandora viendo atentamente una piedra 
-aun no esta limpia-maulló sin perder la concentración
-tranquila tomate tu tiempo- dijo mi madre –ahora dime Astra ¿Qué es tan urgente que no puede esperar?- dijo algo enojada
-mama esa que estas atendiendo es Tamara, no puedes darle un anillo de entorno compromiso- dije explicándole el por que de mi comportamiento
-¿es ella?-pregunto sorprendida –entonces el chico que estaba con ellas ¿es Samuel?- agrego aun mas sorprendida
-si es el, asique no puedes darles algo que los junte por siempre- dije a lo que ella asintió
-esto es culpa de esa maldita bruja, pero voy a romper su mierda de conjuro en este momento- dijo mi madre enojada tomando una piedra de color rojizo casi trasparente, parecía un rubí, pero no lo era.
-¿Qué harás?-pregunte algo confundida
-sacar la verdad a flote- dijo ella, para luego hacer que la piedra se dividiera. Mi madre tomo dos anillos de compromiso y incrusto una mitad en cada uno –solo hará falta que se los prueben- dijo mientras dejaba ambos anillos en un estuche.  Yo asentí mientras veía como se relajaba para pode venderle los anillos encantados. La seguí y vi como con una sonrisa les ofrecía los anillos. Tamara quedo fascinada con los anillos y llamo a Samuel que aun miraba distraído la tienda
-mira, son hermosos ¿te gustan?- dice emocionada Tamara mientras los sacaba del estuche y le ofrecía uno a Samuel mientras ella se probaba el otro. Samuel lo miro con desinterés y se lo probó. Al ser anillos mágicos estos se adaptaron enseguida a sus manos sin que ellos se dieran cuenta
-si hasta les quedan a la perfección- dijo la madre de Samuel feliz
-si-dijo Samuel de mala gana mientras se sacaba el anillo –compren ese, yo… recordé que debía hacer algo- agrego Samuel mientras le entregaba el anillo a su madre
-pero hijo…- la señora intento decirle algo, pero Samuel ya se encontraba afuera. Me sorprendí un poco de la repentina acción de Samuel, pero recode el hechizo de los anillos, pero al ver a mi madre vi la misma mueca de impresión. ¿Entonces no fue por el hechizo?.