Guille-neko (wigetta)

Capitulo 1: "El entrenamiento"

Guillermo cayó dormido aun con su forma de gato. La chica, quien sabía que pasaría eso se acerco a él y lo tomo con suavidad entre sus brazos. Pandora solo miraba la escena algo inquieta, ya que no sabía del todo como funcionaba el hechizo. La chica salió del cuarto con Guillermo entre sus brazos y lo recostó en su cama tapándolo con una manta aunque era verano, ella sabía perfectamente lo que pasaría y debía cubrirlo con algo.

Narra Guillermo(Willy)

Desperté algo adolorido, estaba tapado con una manta de color verde, me pareció muy linda. Mire a mi alrededor estaba en una habitación de color celeste tenía un estante con libros y un pequeño escritorio lleno de papeles. Hice un esfuerzo por levantarme pero no podía controlar bien mi cuerpo. Mire mis patas y vi que eran…eran manos, manos humanas. Levanté la manta y vi que mi cuerpo era el de un humano aunque, estaba desnudo. Até como pude la manta a mi cintura, con paciencia me lévate y camine hasta un espejo. Me mire anonadado en el, era un humano, aunque conservaba mis orejas y mi cola, mi cuerpo era humano, “entonces así se ve el cuerpo de Samuel”, ese pensamiento provoco que me sonrojara, sentí la puerta abrirse

-así que era verdad lo que me dijo mi hija- dijo una señora entrando a la habitación con una caja, yo asustado retrocedí hasta topar con la pared
-tranquilo Guillermo, solo vine a dejarte ropa, ten- dijo la señora dejando la caja en el suelo
-gra...graci…gracias- dije costosamente, me costaba hablar. Ella solo asintió con una sonrisa y salió de la habitación, me acerque a la caja, en ella había mucha variedad de ropa, algunas eran muy pequeñas para mí y una nota la cual tenía dibujos explicándome como debía vestirme, al final con mucho esfuerzo me puse una playera de mangas cortas y un pantalón, no sin antes ponerme ropa interior como lo indicaba la nota. Poco tiempo después de que me vestí la chica entro a la habitación,
-¡AAH!- grito al verme -lo siento olvide que estabas aquí- dijo disculpándose -veo que el hechizo funciono-
-si, pe...pero, me cu…cu…cuesta hab…hablar y aun tengo mis orejeas…orejas,-dije forzosamente
-normal que te cueste hablar o dominar tu cuerpo, toda la vida fuiste un gato y lo de tus orejas y cola desaparecerán en tres días- dijo la chica aclarando mis dudas
-y ¿qué hare durante ese tiempo?- dije claramente, cada vez me costaba menos hablar
-te entrenare, para que leas con claridad, camines sin tambalearte y lo más importante, a reprimir tus instintos de gato- dijo lo ultimo lanzando una bola de estambre al suelo, yo al verla me abalance sobre ella para atraparla, cuando la tuve comencé a morderla, la chica soltó un suspiro y se acercó a mí. Yo me sentí avergonzado, deje la bola de estambre a un lado y me senté en el suelo como todos los gatos. Ella soltó un suspiro más notorio, “esto será más difícil de lo que creí”, susurro para sí misma, pero yo al conservar mis orejas de gato la escuche
-por cierto, yo soy Astra- dijo extendiendo su mano para que me levantara del suelo
-mucho gusto Astra- dije tomando su mano, ya podía hablar con más fluidez, me levantó del piso y me senté en su cama y ella sobre su escritorio
-bien, hay muchas cosas que debes saber del mundo humano antes de salir de esta casa, primero, necesitas dinero para conseguir cualquier objeto o comida, segundo y esto es lo que más te traerá problemas, es mal visto por la gente en general que dos chicos estén juntos, pero son unos idiotas, la cosa es que envié a pandora a que siguiera a Samuel para saber si él es de ese tipo de personas y para que me dé un poco mas de información para ver si el plan que te tengo ideado funcionara- dijo Astra seriamente
-¿que ideaste?- pregunte curioso
-dijiste que la mama de Samuel es profesora particular ¿verdad?- yo asentí con la cabeza- y que tienen un cuarto para alquilar ¿cierto?- volví a repetir el gesto -mi idea es que digas que no eres de por aquí y que estas buscando alquiler y alguien que te enseñe..bueno lo que enseñe la mama de Samuel, por eso envié a Pandora, para que recopilara un poco mas de información- Dijo Astra
-¿cómo me entrenaras?- pregunte al ver que estaba dispuesta a responder mis dudas
-así- dijo levantándose del escritorio y comenzando a enseñarme a vocalizar y luego a leer, en fin así pasaron dos días, Astra me daba descansos solo para comer, orinar y dormir, nada más,  este era el comienzo del tercer día, yo me quedaba en la habitación de invitados y ya controlaba casi todo lo que me enseño Astra, gracias a mi dedicación y a algunos hechizos simples ya podía, leer a la perfección, caminaba como cualquier persona, escribía excelente y tenía unos excelentes modales, solo me faltaba una cosa y era controlar mis instintos gatunos. Cada vez que Astra lanzaba la bola de estambre yo me abalanzaba sombre ella, pero Astra creaba una pared invisible entre yo y la bola de estambre, provocando que me diera fuertes golpes contra esta mientras Astra gritaba “¡NOO!,¡OTRA VEZ!” y volvíamos a intentarlo, pero el resultado era el mismo y veía el cansancio en los ojos de Astra. Estuvimos todo el día intentándolo, ya era la noche del tercer día y yo aun no podía controlar mis instintos de gato
-Guillermo- dijo Astra llamando mi atención -concéntrate por favor, si no logras controlar tus instintos antes de que desaparezcan tus orejas, ya no podrás controlarlos y solo serás un gato con forma humana, Guillermo tu lo amas ¿verdad?- dijo acercándose a mí, yo asentí
-entonces, hazlo por él- dijo Astra tomando la bola y lanzándola lejos. Yo me concentre en Samuel, pensé en él y no note como la bola de estambre volaba hasta caer al piso. No me llamo la atención en absoluto, lo único que pasaba por mi mente era que quería estar con él Vi que Astra la volvía a lanzar esta vez hacia mí, cayó cerca mío pero no me moví
-lo, lo lograste…- dijo Astra sin creérselo casi, yo emocionado la fui a abrazar
-lo logre, podre verlo, y, y enamorarlo, y tenerlo cerca y abrazarlo- dije emocionado
-si Guillermo, pero recuerda que él no sabe que tu eres el gato de la calle, eres alguien nuevo para él, procura actuar natural y ahora ve a dormir que mañana es tu gran día- dijo Astra, yo la obedecí y fui a la habitación de invitados. Estaba muy emocionado, mañana probablemente vea a Samuel con mi forma humana, ¿le gustara mi forma humana?, ¿qué le diré cuando lo vea?, los nervios se hicieron presentes en mí, pero la emoción y las ansías de verlo eran mucho más grandes y pensando en todo aquello me quede dormido.