Entre Rejas | JenLisa

Capítulo 16

Pov Jennie

Seulgi se retira y me quedo mirando a la nada.

Lisa ofreció su vida por la mía. ¿Por qué lo haría? Ella me odia y lo único que tenemos es sexo. Me giro hacia Lisa y esta tiene la vista en el suelo.

Jennie: ¿Por que lo hiciste?

Pregunto a lo que ella no me contesta.

Jennie: ¿¡Por que carajos lo has hecho, idiota!?

Le gritó cabreada.

Lisa: ¿Por que no podía dejar que te mataran!

Grita devuelta Lisa.

Lisa: No podía, enserio no podía dejar que te mataran y yo quedarme contenta dentro de esta cárcel.

Jennie: ¿Tú crees que es una excusa? Lisa la que planeo todo esto fui yo. No debes pagar los platos rotos que yo tire.

Lisa: Quiero hacerlo, por que quiero.

La pelinegra toma mi mano y la entrelaza con la suya.

Lisa: Quiero salvarte.

Jennie: ¿Por que rayos harías eso?

Lisa: Por que me gustas, Jen.

Responde a lo que yo abro los ojos sorprendida.

Lisa: Me gustas un montón, no puedo imaginarme mi vida sin ti. Una cárcel sin mi reina, una cárcel donde cuando abra los ojos tú no estaras a mi lado. Te necesito, necesito que reines conmigo y si no estás, entonces no soy nadie.

Sube una de sus manos a mi mejilla.

Lisa: Soy patética, me enamore de mi peor enemiga. No sé cómo sucedio, pero todos los días esperaba tú sonrisa, queria acostarme contigo, me imaginaba un futuro contigo.

Jennie: ¿Crees que yo podré imaginarme un futuro sin ti?

Le pregunto y está agacha su cabeza.

Lisa: ¡No, Lisa!... ¿Por qué crees que te pedí que tuviéramos sexo? Joder, podía soportar una semana, pero te quería a ti dentro de mi. Cuando llego Hwasa me empezaron a dar celos, al punto de odiarla, cuando me lastimo y me dijo que te matarían, no sabes lo que sentí por dentro. Sentí que te iba a perder.

Tomo su la cara en mis manos.

Jennie: Te necesito como el aire que respiro.

Lisa: Te amo, Jen.

Esta me da un besa la cabeza y junta nuestras frentes.

Jennie: Yo también te amo.

Me alejo un poco y la beso, Seulgi entra y nos mira a los dos. Nos trae el plato de comida.

Seulgi: La comida de la paciente y tú última comida, Lisa, disfruten.

Se retira y nos vuelve a dejar solas con un gran silencio.

No puedo comer pensando que van a matar a Lisa. No puedo hacer nada, aunque lo intente.

Lisa: Todo estará bien.

Jennie: No puedo, no quiero que te alejes de mi lado.

Lisa: Lo siento.

Dice la pelinegra y comienza a besarme lentamente. Este día fue el primero que Lisa me acariciaba y besaba cada parte de mi como si fuera una pieza que se pudiera romper. Sentía el amor de ella en cada beso, no tuvimos sexo, estoy segura que hicimos el amor. Cada caricia, cada beso, cada palabra que decía Lisa era con amor y se escuchaba la despedida en sus labios.

Lisa esta abrazándome y jugando con mi cabello, mientras yo también la abrazaba.

Lisa: Falta poco, Jen.

Jennie: No me lo recuerdes, por favor.

La última comida de Lisa, el último beso, el último sexo que tuvo Lisa fue conmigo. Con la unica persona que es culpable de su muerte. Todo por protegerme.

Jennie: No quiero que mueras.

Seulgi: Ya hablamos de esto.

Responde esta entrando por la puerta y sonriendo con pena, Lisa se levanta y la tomo de la muñeca. Mis lagrimas ya empezaban a bajar.

Jennie: No me dejes, por favor. Quédate conmigo.

Digo en llanto.

Lisa: Te amo, Nini.

Lisa suelta mi agarre y se aleja. Intento levantarme de la camilla, pero el dolor en la pierna era insoportable. Veo la espalda de Lisa y como los guardias se la llevan. Seulgi me aguantar y yo sollozo.

Jennie: ¡Lisa, vuelve!

Gritó en una mar de lágrimas y tratando de zafarme de las garras de Seulgi.

Jennie: ¡Lisa!

Pataleo, pero es imposible.

Jennie: Seulgi, déjame morir a mi. Deja vivír a Lisa, por favor. ¡Matame a mi!

Seulgi: Lo siento, no puedo hacer nada, Kim.

Suelta su agarre, se levanta y se retira. Me quedo por unos segundos viendo la puerta cerrada y caigo al suelo, mientras sigo sollozando.

Esto me duele, me lastima mucho, la quiero devuelta conmigo. Necesito ver su sonrisa arrogante, sentir su piel contra la mia, besar sus labios carnosos, tocar cada parte de ella, pelear cada segundo que pase, la necesito a ella en todos los sentidos.

Jennie: ¡Lisa!

Gritó con todas mis fuerzas con la esperanza de que ella aparezca, pero nada. Me duele el pecho de tanto pensarlo, se que nunca volvere a verla en mi vida.

De repente el doctor llega y me inyecta algo, después de eso caigo en los brazos de Morfeo...