Capítulo 38

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En un altar Levi y Erwin estaban a punto de casarse, el juez de paz comenzó la ceremonia, el pelinegro estaba emocionado, el corazón del ojiazul golpeaba fuertemente contra su pecho, Armin a un lado de ellos sostenía los anillos. Fue el turno de los votos matrimoniales, según Hange la parte más romántica de todas:
- Levi Ackerman, desde el momento en que te ví supe estábamos hechos el uno para el otro, que eras el complemento de mi alma, cuando te veo a los ojos siento que estoy en casa, siempre seré tu sostén de alegrías, lágrimas, risas, sueños y anhelos, te prometo que amaremos esta vida, prometo que siempre te abrazaré con amor y ternura, juro que el amor jamás faltará entre nosotros, nuestro amor es único y siempre será nuestra fortaleza, no importan los retos que nos deparen, podremos con ellos y contra todo lo que pretenda herirnos, te cuidaré con mi vida y si en algún momento, llega mi momento de partir mi alma guiará tu camino, y nos reencontraremos en cualquiera de las vidas que nos toque renacer, porque tú eres mi único hogar y gracias por darme hermosos niños, que los amo con todo mi corazón - Tomó el anillo que Armin le alcanzó y lo colocó en el dedo anular de su amado que tenía las mejillas mojadas de júbilo:
- Probablemente me atasque con mis propias palabras – Los invitados rieron – Erwin Smith, contigo aprendí que el amor es encontrar a alguien te acepte con los pedazos que te faltan, con el corazón agrietado y alma rota, tú me amaste cuando estaba así, me salvaste de la oscuridad, curaste mis heridas con besos, caricias... Cuidaste de Armin y de mí sin importar qué, Erwin, nuestro amor es como el viento no puede verse pero sí sentirse, te amo incondicionalmente... Saben – Se dirigió a los invitados – Encontrar a alguien que ames y sea correspondido es maravilloso, pero que sea tu alma gemela es incomparable porque es alguien que te entiende como nadie y estará ahí para ti, pase lo que pase y la mía es este grandulón... Erwin, Armin está feliz de tener a alguien como tú en su vida, al igual que él - Posó una mano en su vientre – Eres y serás un padre maravilloso -
El juez finalizó la ceremonia declarándolo esposos, se besaron con el sonido de los aplausos rodeándolos, entre los invitados un emocionado Kenny compartía la felicidad por la pareja, recordando a su gran amor, Uri con quien no pudo cumplir el sueño de hacerlo su esposo, pero con la tranquilidad de que lo amó hasta su final y aún seguía haciéndolo.
Los invitados los felicitaron, la comida estaba deliciosa, bailaron, se divirtieron muchísimo, Levi se alegró cuando su tío se acercó a él, les deseo felicidad y toda la suerte del mundo. La fiesta llegó a su fin, pero antes Hange tuvo que lo quería, una propuesta de matrimonio que los hizo festejar el doble.
Armin llegó agotado, Erwin lo bajó dormido del auto y lo llevó hasta su cuarto, Levi lo esperaba en el suyo recostado en la cama en ropa interior, quejándose por la molestia en sus pies...
- Tu hijo está inquieto, mira cómo se mueve – El rubio posó ambas manos en el vientre y sintió los movimientos de su pequeño.
- Continúa de fiesta -
- Sí, qué hermoso estuvo todo -
- Inolvidable, te amo Levi -
- Y yo a ti, pero te amaré más si me das un masaje de pies -
- Mírate, chantajeándome por un masaje – El pelinegro rió – Tienes suerte de que amo tus pies, deja que me quite un poco de ropa – Levi asintió y dispuso a ver cómo su ahora, esposo, se quitaba la ropa, a causa de eso su respiración comenzó a tornarse más pesada, sus dientes aprisionaban su labio inferior – ¿Te gusta lo que ves? - Preguntó con un toque de arrogancia.
- Ven y compruébalo - Erwin se colocó entre las piernas de Levi y palpó su erección - ¿Contento? Yo sólo quería un masaje de pies, ahora quiero que me hagas el amor -
- Me gusta darte masajes pero hacerte mío, es mi actividad favorita – Sus bocas se unieron en un apasionado beso, Erwin sobre Levi repartía su peso en sus brazos para no presionar su crecido abdomen. La desnudez total no tardó en aparecer, los suaves suspiros de placer hicieron lo mismo, el ojiazul penetraba con sus dedos la abertura de Levi mientras con su boca succionaba uno de sus pezones, una de las zonas más sensibles del pelinegro que lo demostraba al sostener la cabeza de su esposo contra ellos. Una vez preparado, Erwin introdujo su miembro lentamente, con el embarazo aprendieron a hacer distintas pocisiones que sean de comodidad para Levi, quien estaba con la excitación a flor de piel... La velocidad de las embestidas fue en aumento, el sonido que producía el cuerpo de Erwin contra el del pelinegro era tan erótico que los volvía locos, los bajos gemidos de Levi pidiendo por “más” o “más duro” estaban orillando a su esposo al orgasmo, que tiempo después calentó el interior del ojigris, quien al sentir que fue llenado por los fluidos de su amante, se corrió contra las sábanas.
- Erwin, que sexy eres - Decía apretando sus piernas.
- ¿Qué haces? No me digas que estás excitándote de nuevo -
- Deja de sonreír así y sí, quiero seguir haciéndolo... Ah - Gimió al sentir la mano de Erwin tocando su miembro.
- Aguanta un round más -
Ni Levi sabía de dónde sacaba energía, un tercer y último orgasmo liberaron dentro de la bañera, fue una intensa noche de bodas, el rubio fue a comprobar si su hijo aún dormía y sí, lo hacía, aliviado retornó a su cuarto donde su pelinegro ya estaba sumergido en un profundo sueño.

Hola! Actualizando temprano! Espero que anden bien!
Gracias por brindarme su apoyo! Ya estamos entrando en la recta final!

El miércoles sale el otro! 🥰 Que tengan un hermoso fin de semana!

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