Capítulo 9

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Capítulo 9: En Orielio (Parte 1/2)

Después de la pausa para la comida, que no fue una pausa tranquila en absoluto. Me elevé de nuevo en el aire en el lomo de Ryou, que había adoptado la forma de un dragón.

Supongo que soy un simplón.

En comparación con la época en que sólo disfrutaba de la belleza del mundo y de lo agradable de la naturaleza, ahora no lo hago.

En lugar de contemplar el paisaje, quiero aferrarme a su espalda. Me gustaría abrazarlo con fuerza para aliviar su soledad y suavizar la mía. Me da mucha vergüenza hacerlo y me siento tímido, ¿será por lo que pasó antes en el árbol?

No sé si estoy siendo sentimental.

Siguiendo una ruta diferente a la que tomó para llegar a ese enorme árbol, Ryou agita sus alas y aletea derecha e izquierda, volando tranquilamente por el cielo. Íbamos a un lugar diferente sin que me diera cuenta, esta vez sobrevuela el mar al pasar de nuevo a la capital de Lutyvia.

Había pequeñas islas en el mar, la gente que vivía allí parecía estar muy excitada al ver al dragón, haciendo un enorme escándalo. No podíamos oírlos pero los niños nos miraban y agitaban las manos en el aire.

Un grupo de enormes criaturas marinas con aspecto de ballena apareció en el mar, nadando tras la imponente imágen del Rey Dragón como si lo siguieran. También salen del mar peces grandes y pequeños, delfines y criaturas parecidas a los cocodrilos y el grupo de seguidores se hace cada vez más grande, aumentando considerablemente.

Finalmente, vi una gran colina rocosa con una multitud de las llamadas sirenas: personas en la mitad superior de su cuerpo y peces en la mitad inferior, el tipo de sirenas que tenemos en nuestros cuentos de hadas en la tierra. Vaya, los he visto en los libros ilustrados de la biblioteca, ¡pero existen de verdad! 

Gritaron de alegría y miraron al cielo.

De repente, el Rey Dragón soltó un rugido inmenso que provocó que las criaturas marinas se maravillaran: "¡Gurururu!"

Inmediatamente, un coro de "¡Kurururu!" Las sirenas aplaudieron encantadas, todas se pusieron a cantar con voces altas y claras, alentándolo a hacerlo de nuevo.
 
Ryou frenó su vuelo, disminuyendo la velocidad bajando sus alas y dio vueltas lentamente sobre la colina rocosa durante un rato, acompañándolos.

Un coro de vida marina y sirenas cantando en armonía, acogedor y alegre, llega a través del aire, dándole la bienvenida.

Muchos peces nadan en las olas y muchas otras criaturas chapotean al saltar al mar, buscando la atención del rey para después regresar felices a las profundidades del océano.

El Rey Dragón se les ha aparecido por primera vez en cientos de años. Sólo puedo imaginarlo pero estoy seguro de que todas las criaturas de este mundo se alegran de verlo, lo extrañaron tanto que ahora están satisfechas con la simple silueta de su apariencia reflejada en el mar. La visión de toda la vida marina no terrestre regocijándose sobre el océano que se extiende hasta donde alcanza la vista es como ver un musical de la naturaleza ambientado en el mundo.

Es fantástico y no parece real. Es abrumadoramente conmovedor.

Me recuerda como a una escena de una película infantil.

"Increíble."

"Todos nos dan la bienvenida, han sido muy acogedores conmigo y con Riku."

"¿También a mi?"

"Sí, por supuesto."

Sólo soy un complemento del Rey Dragón. No creo ser importante. Pero me alegro de tener una pequeña parte de su pura felicidad dirigida a mi, sus sentimientos son hermosos.

¡La persona favorita del Rey Dragón!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora