01 : ESCUCHAR PARA JAMÁS OLVIDAR.

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12 de noviembre del 2019.
Milán, Italia.
Zara Bianco.

Me estoy muriendo de los nervios, hoy exactamente después de un mes de aquella propuesta de Flor que parecía lejana y ajena a mí, estoy pronta para viajar hasta Maranello con ella para poder firmar el contrato.
Estoy sentada en el living de mi apartamento, esperando que pase la hora, mirando un punto fijo, jugando con un mechón de mi larga cabellera negra, lo que hago siempre cuando estoy nerviosa.
Siento que me están observando y ahí veo a mi mejor amiga parada un poco lejos de mi sobre el marco de la puerta del living, Addison, mirándome.

Addi – Zara estas pálida mujer, ¿Qué pasa? ¿Estás tan nerviosa?
Me agarra del brazo delicadamente y me levanta desde mi hueco en el sofá.
- Arriba, anda maquillarte un poco para arreglar esa palidez mientras te preparo un bowl con frutas.

Addison es la mejor persona con la que me pude encontrar en esta aventura, hoy en día compartimos apartamento y tenemos una convivencia excelente. Nos conocimos de manera muy aleatoria, me encontraba en mi primer día en Milán caminando por las calles más famosas de por allí, un poco perdida ya que aún no tenía internet en su celular y no tenía un mapa. Mientras intentaba entender el mapa de papel había conseguido en una oficina de turismo por allí cerca, se me acerca una chica flaca y alta, una piel como la de blanca nieves con una corta cabellera rubia.


*Flashback*

Chica - Necesitas ayuda? Te noto un poco perdida. Me pregunta ella.

Al verla y ver aquella enorme sonrisa, asentí.
Zara - Es mi primer día por aquí, quiero saber dónde puedo comprarme un café. ¿Tu sabrías ayudarme?

Chica - Claro que sí. – Exclamó entusiasmada. – Me llamo Addison Giordano, un gusto. Sígueme y si te parece te acompaño a tomar uno, podría decirse que soy muy fan.
Ella extendió su mano para presentarse muy contenta.

Al escuchar su confesión, quedé encantada. Realice el mismo acto que ella.
Zara - El gusto es mío, soy Zara Bianco. Ya tenemos algo en común, desde que he llegado necesito tomar un buen café. Te sigo.

Y desde esa tarde nos volvimos inseparables. Así sin muchas vueltas. Como si el destino quisiese que yo me encontrara con Addison Giordano.



Volviendo a la realidad, volviendo a ser la persona más nerviosa del mundo. Arreglo mi cara tal cual me exigió mi amiga y me siento a desayunar algo junto a ella.

Addi – Zara todo va salir excelente, ¿lo sabes no? – Mi amiga me mira con una cara de tranquilidad, y eso es lo que logra transmitirme.

Zara – Lo sé, pero los nervios me ganan y de seguro se sumaron con los del examen final. – Otra vez, ese nudo en el estómago, ese examen se acercaba y cada vez me generaba más terror y ansiedad.

Addi – Saldrá todo bien, en breves tendré una amiga interna y además que va a trabajar en Ferrari y me traerá todo lo que pueda de allí, remeras, gorros. – Lo dice contenta y haciendo un baile el cual me genera mucha gracia.

Puedo afirmar que ella hoy es fan de la fórmula 1 como yo, al correr de los años la hice mirar todas las carreras que habían, le conté todo y pasé mi pasión. Así que hoy en día somos dos mejores amigas fanáticas de la fórmula 1, todos los fines de semana de carrera estamos frente a la televisión con un mate para mirar prácticas, qualy y la carrera correspondiente.
Sí, el mate. No se olviden que soy uruguaya de alma y el mate jamás se irá de mí.

COMO SI EL DESTINO QUISIESE. Charles LeclercDonde viven las historias. Descúbrelo ahora