Yo... me enamoré de Taehyung.

16. Jimin

A la mañana siguiente, Jimin se sentía agradecido por no haber tomado tanto alcohol, pues, si bien había despertado un poco mareado, no tenía resaca y eso era muy conveniente justo en ese momento.

Afortunadamente el menor aún no había llegado. Jimin se levantó a buscar entre sus pertenencias algún dulce. Tenía su estómago vacío y necesitaba comer algo para evitar la fatiga. Para su suerte encontró unos dulces de chocolate en uno de los bolsillos de su chaqueta y los comió. Se volvió a acostar y revisó las redes sociales mientras esperaba que el menor se dignara a aparecer.

Ya más calmado, había decidido enfrentar al menor con tranquilidad. Sabía que si lo atacaba, no iba a conseguir que le dijera nada y solo se iba a ir de la habitación para evitarlo el mayor tiempo posible. Jimin no quería eso, él estaba decidido a saber qué era lo que realmente estaba pasando con su mejor amigo.

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En la habitación de Namjoon, Tae comenzaba a despertar lentamente. Abrió los ojos y tomó su teléfono para ver la hora. Eran las 8:23 de la mañana. Tenía que volver a su habitación. Se giró hacia su novio y lo vió profundamente dormido, no quería despertarlo pero sabía que después de lo que había pasado durante la noche, no podía irse solo así. Decidió despertarlo.

- Hyung, hyung... - le habló mientras movía uno de sus brazos. Namjoon comenzó a moverse. - Hyung, despierta... - dijo nuevamente el menor, esta vez logrando su cometido. El mayor abrió lentamente los ojos y luego le sonrió a Taehyung.

- Buenos días, Taehyungie. ¿Cómo dormiste? ¿Pasa algo? - dijo el mayor para luego sentarse en la cama.

- No, hyung. No pasa nada, es solo que debo volver a mi habitación y no quería irme sin avisarte. - le dijo para luego sentarse también. Sintió un fuerte tirón en su espada baja y se quejó.

- ¿Qué pasa? ¿Te duele mucho? - el menor asintió mientras intentaba incorporarse. - Lo siento. Lo siento mucho. Yo... debí haber comprado algo para el dolor también. ¿Quieres que vaya por algo? - preguntó el mayor preocupado.

- No, hyung. Estoy bien. Creo que puedo soportarlo. - dijo para luego acercarse al mayor y darle un rápido beso. - debo irme. No quiero que los demás me encuentren en el pasillo. - intentó levantarse y el dolor lo paralizó pero dejó que pasara un poco y luego se levantó rápidamente. Sintiendo que el ardor comenzaba a cesar.

Nam se levantó para ayudarlo y Tae se negó. Estaba bien, sentía un dolor punzante es su cola pero nada que no pudiera soportar. Al menos podía caminar normalmente.

- Te veo en el desayuno, hyung. - besó al mayor con dulzura. - Te quiero.

- Yo también te quiero, Tae. Por favor avísame si el dolor empeora ¿sí? De todos modos conseguiré algo para que tomes, al menos por precaución.  - el menor asintió amablemente y luego se fue.

Al llegar a su habitación, ingresó la tarjeta con rapidez. Quería llegar a dormir un rato más. La puerta se abrió y entró, cerro tras él y caminó directo a su cama pero no alcanzó a llegar, se giró hacia la cama de su amigo al ver que alguien estaba sentado en ella, era justamente Jimin. Dejó de respirar por unos segundos, sentía que iba vomitar y el miedo lo invadió con fuerza. Sus ojos se cristalizaron de inmediato.

- Jimin... - dijo apenas audible. Caminó hacia su cama y se sentó con cuidado, quedó frente al mayor.

- Yo, no quiero pelear, Taehyungie. Solo quiero la verdad. Espero que no sigas mintiéndome en la cara. Estoy preocupado por tí.  Por favor no me dejes fuera de esto. Soy tu mejor amigo, Tae. Confía en mi.

Taehyung no iba a lograr contener las lágrimas por mucho tiempo más.

- ¿Quién es? - preguntó el mayor al ver que Tae no hablaba.