17.

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Al despertar aún él estaba dormido, sus piernas estaban entrelazadas con las mías, me abrazaba por el abdomen y su cara estaba escondida en mi cuello, acaricie su espalda cuando se movió

-¿Te desperté?- negó -¿Quieres desayunar?- asintió sin mover su cara de mi cuello podía sentir su respiración -Si quieres toma un baño, te hará sentir mejor- no quería salir de su abrazo sin embargo me levante, fui directo a la cocina.

Unos 15 minutos después tenía listo el desayuno unos huevos revueltos, jugo de naranja, café y por supuesto su pan, salió con ropa limpia y el pelo húmedo, se sentó en el banco sin mirarme

-¿Te sientes bien?- asintió, desayunamos en silencio y no me agrado pero no lo molestaría, cuando iba a preguntarle algo

-Gracias- por fin pude ver esos ojos azules -Por todo-

-Recuerdas todo- negó

-Solo recuerdo que estaba con Lei y se fue con una chica, me encontré a Jesé bebí un poco estaba rica y después tome unas 3 bebidas más, me invito a bailar un chico creo que se llamaba Marcos o algo así y ya no recuerdo nada-

-Marcelo-

-¿Qué?-

-El imbécil con quien bailabas se llama Marcelo- frunció las cejas -Lo conozco ya que estábamos juntos en primer semestre pero se cambio de universidad y es un imbécil y....... un pendejo- lo último me hizo sonreír

-Y eso te hace feliz-

-No bonito, recordé algo….entonces no recuerdas después que paso- negó -Nada-

-Absolutamente nada- me miro confundido -¿Por qué  no tengo una resaca de la mierda?- reí

-Ayer te di unas pastillas que ayudan……aunque pensabas que eran drogas y no que rías tomarlas-

-¡Que!...dime que no hice ninguna tontería…..¿Qué hice?- le conté todo solamente no mencione que me llamó su pendejo y me beso -Y es todo-

-Maldito imbécil, le hubiera dado unos putazos que me recordaría de por vida…….gracias- fui hacia él y me metí entre sus piernas

-No es nada……y lo lamento….- me sonrió -Lamento haberme comportarme como un idiota, esque…..me importas Jaoco y no quiero que nada te pase-

-A mi también me importas…….nada me pasara es un viaje de tres días, es corto, aprenderé mucho- sus manos fueron a mi cabello empezando a juguetear con el

-¿Me perdonas?, ya no estés molesto conmigo-

-Ya no lo estoy……gracias por cuidarme anoche y también lo siento por como me porte no estando en mis cinco sentidos- se acerco dejándome un beso cerca de mis comisuras.

-La verdad fue divertido, nunca me imagine verte borracho- le acariciaba sus costados

-Sera la única vez que me veras- me sujetó de la nuca atrayéndome a él, empezó el beso lento solo roces, me separé un poco

-¿Listo para el viaje?- sonrió

-Nací listo- volvió a juntar nuestros labios, dejaba que su lengua tomara el control, chupe su lengua algunas veces y al terminar el beso jalo mi labio tal y como yo lo hacia con él.

El resto del día lo acompañe a comprar materiales para la universidad, se quedó conmigo ya que mañana se iría a su curso

………………….

-Seguro que tienes todo listo-

-Emilio es la quinta vez que te digo que si- cerró su pequeña maleta, me acerqué y lo abracé por detrás -Te voy a extrañar- se giro

TrioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora