Simplemente pasan

Extra

La Boda - Villa POV

Me detengo en la puerta del estudio cuando la veo inclinada hacia la consola, mirando los botones con el ceño fruncido en absoluta concentración.

Corrige los niveles y vuelve a reproducir la maqueta en la que está trabajando.

- ¿Qué es esta porquería? – Le grita a los cielos, echando las manos al aire.

Aprieto los labios para no reírme, y luego me deleito un poco solo mirándola volverse a atar el pelo con una cosa que es una especie de palo chino que le gusta usar y que desafía todas las leyes de la física.

Un rizo rebelde queda suelto en su cuello, pero está tan absorta en su tarea que no se da cuenta.

Escribe algo en una libreta y mordisquea la punta de un lápiz pensativamente.

Cuando empieza a tararear, mi cuerpo se mueve solo hacia ella. Le rodeo la cintura con los brazos y dejo un besito en su cuello.

Se le escapa un gritito.

- Me asustaste – Dice con una sonrisa

- Estaba muy concentrada. No quería interrumpir

- No interrumpes. De hecho, podrías salvarme – Da la vuelta en mis brazos y me saluda con un beso de lleno en los labios

- ¿Con esa porquería? – Me burlo. Frunce el ceño

- En serio, Papo. Me estoy volviendo loca con esa mierda, y le dije a Yatra que le iba a enviar alguna cosa hoy

Su cara de frustración me hace reír.

Nunca va a dejar de ser raro sostenerla de esta manera y que me llame Papo del modo en que lo hacen mis amigos.

Todo acerca del nuevo estado de nuestra relación es raro, y a la vez, maravilloso.

- ¿Qué te pasa? – Me pregunta, mientras sube una mano para frotar mi mejilla

- ¿Podemos hablar un segundo, Susi? Le prometo que después le ayudo con esa porquería

- Uhmm...Vale – Acepta – De todos modos, estoy bloqueada

La tomo de la mano y la arrastro fuera del estudio, porque si dejo que "termine" alguna cosa antes de salir, nos vamos a quedar ahí.

Definitivamente otra cosa rara es que a veces siento que estoy saliendo con Isaza.

Eww.

Susana se deja arrastrar por mí hacia la cocina, en donde me suelta para espiar qué hay en la nevera. Alerta spoiler: Nada. Nunca hay nada.

Hace un año finalmente Isaza y Susana abandonaron la casa de sus padres, y se mudaron a esta casa a las afueras de Bogotá que es más bien un estudio con dos habitaciones y una cocina. Remodelaron completamente la construcción inicial, y siempre que estamos en Colombia, lo cual ocurre como dos meses al año, es el lugar favorito de todos porque es un paraíso musical, que es exactamente lo que esperarías del hogar de dos nerds de la producción y la composición como los hermanos Isaza.

Me aclaro la garganta, y apunto a la parte de debajo de la nevera, donde descansan el six pack de Coronas y la tarrina de helado de frutos rojos que traje conmigo, porque ya sabía que no iba a haber nada.

Me sonríe.

- Por eso te conservamos a nuestro lado – Observa Susana con una sonrisa. Se decanta por las cervezas, lo que me parece adecuado porque las dos opciones estaban destinadas a suavizar mis nervios de punta acerca de esta conversación.