Mimado, divertido, inteligente, rico y rubio. Eran de los terminos más usados para describir a TaeHyun y esto a él no le molestaba en lo absoluto ya que era la verdad. Inclusive su apodo es "Barbie" y a él le gusta eso.
Muchos han intentado ser su...
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Las carreras de artes pueden ser las más sobrevaloradas de todas, desde a que son sencillas de pasar hasta que se mueren de hambre al intentar ejercer. Puede que no tenga la complejidad de las ciencias o matemáticas, pero al ser una dónde las posibilidades no tienen límites hace que quienes las ejercen sientan la presión de poner una parte del infinito en lo que hacen; al menos así se ha sentido últimamente TaeHyun.
Los días para el rubio, y sus compañeros, parecen estar cargados de sobre análisis a sus creaciones; la frase "revisen bien que represente algo suyo" ha hecho que se cuestione si hasta la costura debe ir en cierto lugar.
—¿Es muy tarde para salirme y abrir un onlyfans? —las clases de ese día habían concluido, el rubio junto a YeonJun y Lea se quedaron en el taller sacando sus frustraciones. TaeHyun se preguntó en qué momento se voltearon los roles con BeomGyu y ahora él es quién está estresado.
—Te diría que también quiero pero SooBin se haría el onlyfans él con tal yo no lo haga.
Los tres rieron por lo que dijo el peliazul. Tanto SooBin como BeomGyu se han estado preocupando al ver que la carga que los catedráticos ponen en ellos es mucha; BeomGyu hasta quiso hablar con el encargado de la carrera, claro que TaeHyun no lo dejó y unos cuantos besos le hicieron olvidar la idea.
—Ánimo, quedan dos semanas —intentó alentar el rubio, aunque él igual está estresado con toda la situación— Y sí sirve de consuelo, podremos quemar los miles de bocetos que hemos hecho; inclusive compré un encendedor —Sus compañeros solo elevaron las manos un poco intentando verse animados, cosa que no lograron ni un poco— parecen muertos.
—TaeHyun —le habla el peliazul—, debes ir a recibir a la inversora.
Esta vez fue turno del rubio de parecer muerto, con una mueca de fastidio tomó sus cosas despidiéndose del resto. Por mala suerte, fue elegido para mostrar la universidad, y en específico el área de artes, a una de las inversoras nuevas de ese año. Con una pequeña ida al baño para retocarse, se dirigió a la entrada del edificio intentando lucir lo menos muerto posible.
La mujer no tardaría en llegar y lo menos que deseaba era tener que estar actuando con interés sobre las paredes del edificio cuando le apetece más estar junto al pelinegro mientras ven alguna película.
—¿TaeHyun ssi? —con una sonrisa propia para recibir un premio Oscar, TaeHyun sonríe a la mujer frente a él y le saluda.
—Soy yo, mucho gusto —saludó con una reverencia a la mayor. Honestamente se esperaba una mujer de tercera edad, ha visto algunos inversores y la mayoría rondan por esa edad, pero la mujer frente a él Lucía de unos cuarenta años; su pelo oscuro, ojos grandes y sonrisa amable la hacen ver jovial— ¿Es la señora Kim, cierto?
La mujer asintió amable, TaeHyun le indicó el camino y ambos se pusieron en marcha— ¿Eres del área de diseño de modas, no?