Mis ojos se abrieron de una forma lenta, sintiendo el calor en mi cuerpo por fin removiendome sintiendo aquellas gruesas mantas en mi cuerpo, sintiendo lo pesadas que eran. Se intenté sentar y una mano cubrió mi hombro para dejarme acostado de nuevo.
—Por dios chico. - Soltó la mujer mientras cubría mi cuerpo, y bostezo —Creímos que moririas.
Arrugo mis cejas.
—y-yo eh ah.. - Balbuceo,miré sus ojos sintiendo un escalofrío. — ¿Morir? ¿Donde está Elliot?
Volví a sentir como vuelven a recostarme y noté como mi hombro no tenía nada, juraba que me había lastimado este, cerré mis ojos unos segundos sintiendo un paño tibio.
—Caíste al lago - Respondió —Tu novio te encontró, estabas muriendo congelado, el lobo te atacó. ¿Lo recuerdas? - Recordaba algunas cosas y asenti abrazando mi cuerpo reposando mi mano en mi estómago de forma lenta sintiendo este gruñir.
—No quiero estar aquí. - Solté sincero, escucho como hizo un sonido ofendido.
—Te salvamos de tu muerte posible y no quieres estar aquí. ¿A donde quieres ir? ¿Con el lobo?
Aquel escalofrío se hizo presente y me levanté, sintiendo mi cuerpo adolorido y cansado, viendo como mi novio entraba después, me apego a el soltando un suspiro bajo.
Sus brazos me rodearon, haciéndome sentir seguro por fin y lo miré varias veces sintiendo un beso sobre mi frente.
—Temi perderte totalmente, cariño - Soltó y solo me aferro a el.
Abri mi boca un poco para hablar, sintiendo mi garganta adolorida.
—E.. El lobo - Susurro —El lobo me-e quiere me quiere llevar .
Susurro, mirando sus ojos y estos se oscureciendo un poco mientras me aferro a el. No lo escuché decir nada y la mujer salió de la habitación, escuchando como ya estaba cayendo el sol en su totalidad.
—Nos quedaremos hoy aquí. - Susurra mientras toma mis mejillas. —Pero debo quedarme afuera, debo cuidarte cariño. No quiero que te pase algo.
Y asenti despacio.
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