Capítulo 14

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Dato curioso
Sasuke tiene 18 años.
Itachi tiene 23 años.(igual que Shintarō) 

Maratón 2/3

Era un nuevo día, en la universidad de Konoha

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Era un nuevo día, en la universidad de Konoha.

Para la hora del descanso, Shin solo tenía ganas de volver a la cama. Izumi estaba con Itachi quién sabe dónde y Shisui había corrido solo hacía algún lado sin decirle nada y Deidara...bueno, el estaba ocupado con su escultura.

Suspiró, estaba solo de nuevo, así que salio al jardín del campus y se puso a dar vueltas como un tonto. No tenía ni idea de a dónde ir, decidió ir hasta a la cafetería a pedir un café.

El simple hecho de soltar dinero le ponía la piel de gallina, algo irónico después de haberlo despilfarrado toda su vida. Su tarjeta de débito cada día estaba más cerca del cero y sus posibilidades de conseguir trabajo eran prácticamente nulas.

Había buscado entre las ofertas laborales, pero nada había aparecido. Estaba harto de enviar currículos por internet y que nadie le contestara, incluso, llego a pensar que no sabía hacer un currículo. Estaba muy preocupado, ¿qué iba a hacer? Si se quedaba sin dinero no podría pagar el alquiler a los padres de los Uchiha ni tampoco tendría para sus necesidades básicas, a pesar de que la comida no tuviera que pagarla. Y lo peor no era quedarse sin dinero, sino saber que tendría que llamar a sus padres suplicando por una transferencia bancaria, arrastrándose
como un pobre.

Se sentó en una de las mesas y desbloqueo su móvil.

Ninguna llamada, ningún mensaje.

¿Debía llamar?

Solo le quedaban pocos yenes.

Buscó el número de su padre y sintió que sus nervios habían olvidado como manifestarse, estaban al límite.

Quiso pensar en lo que iba a hacer antes de pulsar el botón de llamada, pero sabía que si lo hacía acabaría sin llamar, por lo tanto, se quedaría con un «no» mal merecido y sin posibilidad de refutar. Quizá eran ellos los que estaban esperando que llamara y les dijera que había aprendido la lección y que quería volver a casa, sin embargo, eso no iba a pasar.

No volvería, nunca.

Por eso llamó sin más.

Lo llevó a su oreja. Podía oír todo su cuerpo vibrar.

—¿Hola? ¿Shintarō? —su padre contestó.

—Ho… hola.

—¿Cómo estás? —le sorprendió la pregunta.

—Bien —hizo una pausa, necesitaba respirar—, pero no tengo dinero…

El silencio se hizo al otro lado del teléfono.

—¿Eso es lo que quieres de tu familia ¿dinero? —se lo había tomado mal.

—No… no me has llamado —susurró.

𝐀𝐓𝐑𝐀𝐂𝐂𝐈𝐎𝐍 -𝐍𝐚𝐫𝐮𝐭𝐨 𝐅𝐚𝐧𝐟𝐢𝐜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora