"Mi Vecino, Toji Fushiguro" || [JUJUTSU KAISEN X TOKYO REVENGERS]

011: "𝐒𝐓𝐀𝐑𝐆𝐈𝐑𝐋"

"El secreto, ¿De quién?"

(* * *)

—Si tenia meses sin verte es claro que al que menos esperaba ver es a ti.— contesté sin mirarlo. —¿Qué quieres Sanzu?

El chico de largo cabello rosa y ojos verdes se sentó en el piso junto a mi. 

—Vengo a pedirte un favor— recargó su espalda en la pared y puso sus brazos sobre sus rodillas.

—Estoy fuera, lo sabes— dije a secas y desinteresada.

—Ajá, aún así vengo a pedirte un último favor— en un movimiento rápido tomó la pelota que venía de regreso antes de que yo pudiera agarrarla.

—Ya no hago trabajos para Bonten, olvídalo Sanzu— dirigí mi cansada vista a él.

En el pasado hice cierto tipos de trabajo para esta nada buena organización. Sanzu pertenecía a la ToMan hasta que la abandonó para unirse a Bonten, una organización de delincuentes. ¿El motivo? De ambos, el dinero.

Comencé a hacer trabajos porque quería conseguir más dinero para comprar cosas y apostar y la paga era muy buena, Sanzu fue quien me llevó con Kokonoi, Inui, Ran, Rindou, Kakucho, Mochizuki y su líder Takeomi para que pudiera hacer trabajos de entregas de cierta mercancía. Siempre hice trabajos sencillos e impecables al inicio, conforme pasaba el tiempo me dieron trabajos más pesados con gente de renombre solo para hacer ciertas entregas personales.

Nunca consumí drogas más que hierba, solo me encargaba de hacer los trabajos que me pedían, tampoco nunca usé un arma, no me era necesario, siempre arreglaba todo con los puños, un par de huesos rotos y amenazas si las cosas se salían un poco de control, pero eso no quitaba que ellos claramente las usaban.

Si, el ambiente era pesado y hostil, tuve que adaptarme a la situación en medio de hombres criminales y evidentemente peligrosos, tuve que volverme como ellos pero bajo mis propias reglas.

Los únicos que sabían que hacía trabajos para esta organización eran Mickey y Baji, me advertían constantemente del peligro pero nunca me lo prohibieron pues "estás bajo tu responsabilidad".

Bonten estaba bien con mi trabajo además de que me había ganado de alguna manera el "respeto" de ellos por la manera en la que lo hacía. Después de varios meses haciendo entregas de estupefacientes con autoridades, funcionarios públicos, otras pandilla o personas específicas Ran y Koko me ofrecieron hacerme ejecutivo de Bonten pero nunca acepté, mi intención no era pertenecer a la organización, solo quería dinero haciendo trabajos "sencillos".