InFAMOUS: Unknown Destiny

Capitulo I/ El despertar

Como si del sonido de un tiroteo se tratase, abrí los ojos abruptamente por el susto. Desperté por completo y empecé a parpadear una y otra vez sin parar ya que una resplandeciente luz caía sobre mi rostro. Cuando logré recuperar mi vista, alcé mi cabeza hacia el frente intentado averiguar donde me encontraba. 

Eso ero lo primordial. Si una persona despierta de la nada en un lugar desconocido sin tener recuerdos de lo que ha pasado, es muy probable que entre en pánico y quiera saber donde se encuentra, pero yo no era ese tipo de persona. Estaba lo suficientemente preparado para cualquier situación que se me presentara... Era un héroe después de todo.

No obstante, he de decir que me alarmé un poco aquella vez.

Tomé impulso y me paré del polvoriento y sucio suelo en donde me encontraba, intentando razonar para llegar a un pronta conclusión.

—¿Estoy en un callejón? —me pregunté yo mismo—. Eso parece.

Quise salir de ese maloliente lugar.

—¿Qué me pasó? -Empecé a ver mi ropa con tal de responder mi pregunta.

La mayoría de las partes de mi traje de héroe se encontraban malgastadas y rotas en todos los sentidos, pero aún mantenía esa llamativa forma que me gustaba. 

—Diablos... Creo que lo primero que debo hacer es averiguar donde me encuentro exactamente —dije intentado calmarme.

Empecé a dirigirme a la luz del exterior para salir de aquel callejón, y cuando lo hice, noté que me encontraba en un lugar algo transitado. También noté que la gente que caminaba alrededor no lucía como personas de ascendencia Japonesa, lucían como personas americanas.

Me mente se llenó de confusión por lo que mis ojos presenciaron.

—¿Qué demonios? ¿En qué país estoy? —pregunté al aire—. ¡Tengo que averiguarlo, ya!  

Salí de donde me encontraba e intente comunicarme con un transeúnte que pasaba por ahí.

—Espero que las clases de Present Mic hayan servido... —mencioné en voz baja.

Después de algunos minutos de incomodidad al hablar con el civil, supe donde me situaba. En Portland, Oregón. Me quedé impactado en los primeros instantes. ¿Qué había pasado? ¿Por qué desperté aquí?  

Varias incógnitas inundaron mi cabeza y, poco a poco, empecé a entrar en pánico. Sin embargo, recordé lo que era y lo que soñaba ser, un verdadero héroe. Me calmé y me puse a pensar en los principales valores y convicciones que estos tenían y logré mantenerme cuerdo. Debía estar en todo momento firme y con buen autocontrol. No debía dejarme llevar por las emociones negativas. 

Caminé por la calle sin rumbo alguno, captando la atención de la gente por mi forma de vestir y mi aspecto. 

—¿Por qué me ven de esa forma? ¿Acaso en este ciudad no hay héroes?—dije viendo a todos.

Pero mientras pasaba el tiempo, poco a poco noté algo común en este tipo de gente: no poseían una característica de un quirk. A lo que me refiero, es que ninguno tenía las orejas más grandes, nariz más larga, cambio de forma, piel de otro color. Nada. Lucían como personas completamente normales, sin dones.

Eso fue el detonante para confundirme más, pero, primero, quería estar completamente seguro antes de soltar especulaciones. 

Intenté usar el One for All para movilizarme, y vaya sorpresa me lleve cuando noté que estaba algo debilitado, incluyéndome. La fatiga se apoderó de mi cuerpo y luché constantemente para mantenerme en pie, hasta que no pude más. Me dirigí a una casa algo pequeña y trepé lo más que pude hasta que llegué a la azotea donde me senté a descansar.