N/A: El siguiente capítulo describe escenas un poco fuertes, si son sensibles a este tipo de contenido están advertidos. He tardado un poco más porque estaba avanzando con dos capítulos, en unos cuantos días se estará subiendo el capítulo 14. Muchas gracias por todo el apoyo que le han dado a mi historia, les dejaré una referencia del Señor P, al final... y recuerden:
Todo lo escrito en este FANFIC es FICTICIO, ninguna de las acciones que se escriben en él tienen que ver con las personas mencionadas. No intente nada de lo que se describe.
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Los pasos de Mew se hicieron más veloces, el camino a la habitación de Gulf parecía hacerse más largo. La terrible situación le fue informada por Boss, era demasiado pedir un día tranquilo en su vida, cuando llegó a aquella puerta elegante con un aparato cuidadosamente conectado de seguridad en ella, pudo respirar tranquilamente.
Tocó la puerta despacio, no quería angustiarlo más de lo que probablemente estaba. No quería ni imaginarse el terror que habrá sentido al ver y tener ese tipo encima suyo a punto de matarlo, el misterio de cómo había salido de ese lugar, no era tan misterioso, era alguien que lo traicionó, alguien que pertenecía anteriormente a su grupo. Sabía cómo funcionaban el sistema del infierno, pero... si algo tenía que aludir era la resistencia que había tenido para levantarse de donde estaba y salir de ahí.
Gulf abrió la puerta mirando al hombre frente a él, haciéndose a un lado dejando que entrara. No sabía realmente como comenzar la conversación, podía tartamudear miles de cosas que probablemente no entendería, pero... no podían simplemente quedarse mirándolo a los ojos esperando que el otro iniciará una conversación que seguramente no llegaría.
—Yo... lo siento... —susurró Gulf, apretando un poco la tela de su pantalón. Las ropas sucias se las habían llevado hace apenas unos minutos, había decidido ponerse su pijama y dormir como si no hubiese mañana, incluso pensó que podría faltar a clases al día siguiente.
—¿Por qué? —preguntó Mew tranquilo, caminó hasta la cama de él y se sentó en el borde. El rostro de Gulf solo demostraba que estaba en una batalla mental, una que seguramente no podría encontrar alguna explicación de lo que estaba sintiendo. La primera vez que él hizo algo similar, no sabía cómo enfrentarlo... ¿había hecho algo malo? Lo era, pero simplemente no podía dejar que esa persona le arrebatará su vida. Más que sentirse culpable, se sentía como si hubiese llegado a alguna clase de selva en donde tenía que ser la presa o el cazador, no había una tercera opción.
La angustia y confusión de Gulf era bastante evidente, extendió su mano hacia la cabeza de él y acarició suavemente su cabello.
—Todo va a estar bien. —dijo Mew haciendo que Gulf saliese de sus pensamientos, no es como si no confiará en el jefe Suppasit, pero esto era algo nuevo para él. Aun no podía creer que hubiese hecho eso, un suave toque en su mentón hizo que lo voltease a ver. Los ojos de él parecían brillar, le reconfortaban su corazón de cierta manera.
—Lo sé... me acostumbraré—susurró Gulf, provocando que Mew lo mirará extrañado. —Quiero decir... a este tipo de situaciones, no sé qué sentir en este momento, pero... quiero ser capaz de poder pararme a tu lado y ser más que una carga.
Mew soltó un suspiro, no sabía cómo pensaba algunas veces. Gulf era alguien tan transparente y a la vez difícil de leer, cualquiera que lo conociese diría que es un joven bastante cerrado en algunas cosas, Mew sabía que no era del todo cierto. Había situaciones en las que podía comprender en su totalidad al joven Kanawut.
—No pienses más en ello. Mejor... cuéntame cómo estuvo tu viaje y si te sirvió el lugar a dónde fuiste.
Gulf sonrió levemente y se acercó abrazándolo, la calidez que le proporcionaba el cuerpo del jefe no podía describirla, pero le gustaba. —Te extrañé demasiado... —dijo Gulf besándolo, Mew sonrió entre el beso, él también lo había extrañado, pero no se lo diría por el momento... sería más oportuno hacérselo saber a través de sus manos, sus labios, su cuerpo.
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M-Malicious (HIATUS)
Genel KurguSuppasit Jongcheveevat, uno de los más fuertes jefes de la mafia Tailandesa, se enfrentará con un gran dilema en su vida: "¿Realmente esto es lo qué quieres?" El joven que apareció en su vida en ese momento, hará que se cuestione algunas cosas que...