Capítulo 6

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Sonreí, me encantaba hacerlo sentir nervioso, era muy dulce que con semejante porte que tenía le apenaba invitarme a salir, aunque debía admitir que estaba impaciente por recibir alguna señal de su parte, 6:30 pm, aún tenía tiempo de sobra, el problema era como demonios me iba a escapar de ahí.

Di un paseo por la casa entera, fijándome con extremo cuidado en las ventanas para ver en donde había guardias sin aparentar tanto interés,  mientras calculaba la altura de mi ventana al suelo, pase por la habitación de mi padre, quien se estaba intentando poner una corbata, lo mire divertida, a pesar de todo seguía siendo mi padre y yo lo estimaba muchísimo.

-Déjame ayudarte con eso.-dije y me miro sonriendo, soltó la corbata por vencido

-Gracias hija mía.- agrego con su curioso acento, no entendía porque mi hermano y yo no hablábamos de la manera.-Sabes que soy una abominación con estas cosas.

-¿Tienes una reunión?.-pregunte temiendo que me dijera que tenía que acompañarlo

-Es un baile de caridad, el presidente llamo ayer en la tarde para invitarnos.-me reí internamente, uno de los mayores jefes de la mafia en una fiesta de la casa blanca.-pero solamente iremos tu madre y yo

Suspire aliviada, por suerte mi padre no lo noto, me despedí de él y camine rápidamente a mi habitación, ahora solo necesitaba escaparme de Alexandré, cosa que sería prácticamente imposible, después de meditar un rato en la oscuridad de mi habitación y de revisar constantemente el reloj, escuche como el coche arrancaba cerca de la puerta principal, mis padres se habían ido, ¿Qué rayos haría?, mi cabeza decía que le dijera la verdad, solamente iba a salir con un chico y listo, ¿pero que demonios le diría?, Hermano, voy a salir con un chico que conocí en medio de la calle que me salvo de que un ebrio me disparara una noche que me escape de la fiesta porque estaba harta, si, el tipo de la motocicleta, el que no te simpatiza, el mismo, ¡no!, ¡claro que no!.

-¿Así que saldrás con el tipo de la motocicleta?.-Me paralice de inmediato, yo y mi maldita costumbre de hablar en voz alta

-Pues…-me di la vuelta, estaba apoyado en el umbral de la puerta.-Tal vez lo haga

-¿Me estas pidiendo permiso?.-dijo y encarno una ceja

-No tendría por qué hacerlo, soy mayor de edad y puedo salir con quien yo quiera.-respondí orgullosa

-Así es, entonces ¿Qué esperas?.-rodee lo ojos

-Le dirás a papá y papá me matara.- se incorporó.- además él no te cae bien, ¿Qué tramas?

-Yo nada.-respondió pasivo.-Adelante, no te acusare

-¿Qué?.- Lo mire incrédula

-Pero.-Aquí vamos, lo sabía.-Tengo que conocerlo antes de que te vayas con el.

-Espera, ¿Qué?.- bufe

-Esa es mi única condición.- dijo sonriendo de lado

-Bien, acepto.-suspire vencida y vi su expresión de satisfacción

Faltaban 15 minutos para las 8:00, había convencido a Alex de que lo esperáramos afuera, tenía mi chaqueta de cuero negra y unos zapatos bajos, supuse que así no sería complicado subir a la motocicleta, algo se revolvió en mi interior, fue extraño pero agradable, de pronto una idea se me plasmo en la cabeza, me reí de mi misma, ¿acaso estaba ansiosa por ver a Steve?, sinceramente ya lo extrañaba, sentía como si me hiciera falta, era algo totalmente estúpido pero de alguna forma era reconfortante.

El ruido lejano de una motocicleta antigua se hizo presente irrumpiendo el silencio de la calle, vi de reojo a Alexandré quien miraba con cierto interés el lugar de donde provenía el ruido, después de unos minutos que en realidad me parecieron eternos, Steve llego en su motocicleta, se quitó el casco y le sonreí, definitivamente era un hombre atractivo,  me regreso la sonrisa, que pronto se desvaneció, supuse que ya se habría percatado de la presencia de mi hermano.

-Steve, el mi hermano, Alexandré él es Steve.-dije intentando hacer todo este proceso más rápido y menos incomodo

-Un placer.-Steve le ofreció la mano, mire a mi hermano quien la tomo mirándolo con recelo, examinándolo

-Cuídala o te cortare la cabeza.-dijo, dio la media vuelta y se metió a la casa, Steve me miro buscando una respuesta coherente

-Es un encanto, ¿nos vamos?.-el sonrió y encendió la motocicleta

Le dije que parara cerca de un parque, se estaciono tranquilamente y ambos comenzamos a andar sin un rumbo fijo, después de un rato Steve logro tomar confianza y hablaba más fluidamente, hacia bromas un poco anticuadas pero igual de divertidas, nos sentamos en una banca cerca de una fuente, el parque estaba solo totalmente, unas tenues lámparas alumbraban nuestro alrededor y el cielo estrellado adorando una luna llena daban el toque final, mire a Steve quien miraba la luna como si nunca la hubiera visto, sus ojos eran perfectos, eran de una azul tan profundo, que podría ahogarme en ellos mil veces, el me miro y me atrapo.

-¿Pasa algo?.-Dijo sonriendo

-Tienes unos ojos muy lindos.-dije de golpe, realmente lo pensaba, no tenía por qué guardármelo, no soy ese tipo de chica, el miro hacia abajo y  soltó una leve risa

-No tanto como los tuyos.-dijo mirándome.-y si me permite el atrevimiento, debo decirle que es muy hermosa

-Dios, Steve.-dije mirando hacia abajo, sentí como mis mejillas comenzaban a calentarse.-hablas de una manera tan

-¿Anticuada?.-Respondió rápidamente, negué con la cabeza y le sonreí

-Especial.-rio un poco y se hecho hacia atrás

Mire hacia abajo, ¿Qué rayos tenia este hombre? ¿y porque me encantaba tanto?, me levante de ahí y me acerque a la fuente, observe mi reflejo, de pronto una figura mucho más alta que yo se posó a un lado mío, voltee hacia arriba, “¿quieres algo de comer?” asentí y sonreí, me ofreció su brazo y salimos de ese parque.

Hola!, espero que les guste ^^, mil gracias por todo el apoyo, encerio me hacen sentir tan feliz!, las quiero muchisimo, hasta pronto!!!

Déjame estar contigo (Capitán América & tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora