Mi vecino, ¿me odia?

『 16 』

『 ☁️ 』

Lan Zhan golpeaba el volante con sus dedos mientras conducía a la casa de los tíos de Wei WuXian.

—¿Nervioso? —soltó una risa—. Quien diría que tendría al caballero Lan Zhan nervioso, ¿puedo tomarte una foto? —sacó su celular.

—¿Quién está nervioso? —intentó sonar tranquilo—. No diga tonterías joven Wei.

—Disculpe —siguió riendo—, les agradaras Lan Zhan —tomó su mano.

—Estoy tranquilo, soy agradable.

—Claro —bufo—, solías sonreír con otras personas mientras que a mí me tratabas mal y fingías no conocerme —soltó su mano.

Lan Zhan soltó una pequeña risa. —¿Sabes por qué lo hacia?

—¿Por qué me odias?

—No —no dejó de mirar al frente—. No lograba entenderte, siempre estabas tan positivó con absolutamente todo —lo miro de reojo—. Siempre he sido cordial con las demás personas pero contigo... —sonrió—. Sentía que no podía fingir, simplemente era yo.

—¡Eres tan tierno! —se acercó para darle un beso en la mejilla—. En serio creí que me odiabas, siempre solías ser tan frío y aunque intentara ignorarlo siempre herías mis sentimientos.

—Lo lamento, no era mi intención ser tan molesto como tú.

—¡Oye! —soltó una risa—. Amas que sea molesto.

—Mm, lo hago.

Después de estar conduciendo por bastante tiempo se encontraban afuera de la mansión Jiang. Los dos bajaron del auto y Wei WuXian tomó la mano de Lan Zhan.

—Espera —sintió arrepentimiento—. ¿Estas seguro?

—¿De que?

—De esto, no quiero... —pensó en sus palabras—. Prácticamente acabamos de arreglar nuestras discusiones y a ti te gustaba MianMian y ahora estamos aquí en la casa de mis tíos.

Lan Zhan entendía el miedo de Wei WuXian, habían pasado jugando todo el tiempo desde que se conocieron y ahora estaban dando un paso importante, sabía que podía simplemente regresar a su trabajo o a su departamento.

—¿Me gustaba MianMian? —preguntó.

—¡Ibas a salir con ella! —sintió un sabor amargo en su pecho—. Tal vez sería mejor que no...

Lan Zhan se acercó tomándolo de la cintura, puso una de sus manos en su mejilla y lo besó.

—Desde hace tiempo que solo me interesaba una persona —acarició sus labios—. Es una persona demasiado ridícula y molesta.

—¿Quien podría ser? —abrazó del cuello a Lan Zhan—. ¿Estas seguro? Puedes irte si así lo quieres.

—Podría irme —miro seriamente al Wei—. Pero no lo haré, te dije que dejaríamos los juegos señor Wei.

—Entonces deja los juegos y empieza a decirme 'Wei Ying' —golpeó su hombro.

—Wei Ying —se acercó nuevamente a besarlo pero un sonido lo detuvo.

—¿En serio? —hablo la señora de la casa.

—Tía Yu —se apartó de Lan Zhan—. ¡Que agradable verte! —se acercó para darle un beso en la mejilla.

—Claro que si mocoso —miró a Lan Zhan—. Tú debes ser Lan Zhan —le ofreció la mano.

—Señora Jiang —apretó su mano—. Un gusto conocerla.