『 5 』

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『 ☁️ 』

Lunes por la tarde.

El mundo gira a su alrededor mientras se levanta de la cama, el mareo lo toma por sorpresa.

—¿Resaca?

Toma varios respiros mientras escucha a su estómago quejarse, exigiendo comida.

—Okey, prioridad uno, comer.

Toma unas sobras de pizza que tiene en el refrigerador. Y las pone en el microondas.

—Debería conseguir un trabajo. Me pregunto si Lan Zhan a comido pizza alguna vez, es tan aburrido que creo que no lo ha hecho. Él y su hermano son tan parecidos aunque...

Sale de sus pensamientos al escuchar al microondas sonar. Las saca y se espera. Da su primer bocado.

—Wow. Las sobras de pizza son mucho mejor que la pizza recién horneada.

Para acompañar su pizza comienza a hacerse un café, los recuerdos de la madrugada vienen a su mente.

—¡Plátanos! ¿Por qué no puedo dejar de pensar en plátanos? Ni siquiera tengo plátanos.

De repente se cruza en su mente la madrugada, incluyendo a Lan Zhan preocupado mientras agita su mano diciendo adiós.

—Lan Zhan. Fue realmente amable conmigo. Lo que significa que... tal vez me odie un -5% —sonríe.

Pasa el resto de la tarde viendo tv desde su cómoda cama, mientras la idea de la amabilidad de Lan Zhan persiste en su mente. Con el último rayo de sol, saca su teléfono para ordenar algo. Ordena una hamburguesa con papa fritas y un batido de plátano. Deja su teléfono por ahí cuando de repente comienza a vibrar. Y por supuesto es Nie HuaiSang.

—Hola, cariño. ¿Estás vivo? —HuaiSang preguntó.

—Por supuesto, si no, no hubiera contestado.

—Supe que tuviste una noche intensa ayer.

—Claro es el rey del chisme, nada se le escapa —pensó—. Si, definitivamente la tuve. Mis tíos vinieron a mi departamento, pero sabias que ni siquiera se prestan atención? Realmente me llego verlos así.

—Se a lo que te refieres. Apesta. Si en algún momento quieres sacar todo, sabes que estoy aquí, ¿verdad?

—Siempre, ¡Mejores amigos! —mencionó feliz.

—Siempre. Llamaba para preguntarte si querías hacer una cena con todos. Invita a quien gustes. Será en tu departamento por si quieres asistir.

—Claro, creo que es una buena idea. ¡Espera! ¿Cómo que en mi departamento?

—¿Cuál es el punto de mudarte a un edificio con una gran terraza?

—Espera, pero...

—Nos vemos mañana, te quiero!

Nie HuaiSang cuelga antes de que pueda discutir con él, dejándole el rol de andrógino de una cena la cual se acaba de enterar.

—Más le vale que se quede a limpiar.

Justo cuando acaba de poner su teléfono a descansar, vuelve a vibrar nuevamente con un mensaje, es su tía Yu.

Mi vecino, ¿me odia?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora