Pd: Éste capítulo está bastante largo. Espero les guste.
~•~
ISABEL.
Mi día comenzó bastante alocado. La puerta de mi habitación se abrió estrepitosamente y entraron papá, y Lucas, sosteniendo un pastel pequeño en sus manos. Tenía una vela rosa y mi hermano se esforzaba porque el fuego no se apagara.
Un tanto adormilada me quité las sábanas y sonreí poniendo los pies en el suelo. Sople la vela, ganándome aplausos por parte de ellos y unos regalos. Lucas me dio dos bolsas y mi corazón se derritió al ver que eran álbumes de fotos, algunas de nosotros, con los chicos y otras que eran paisajes bonitos.
—Gracias, chicos —dije llorando un poco.
—Feliz cumpleaños, zombie.
Abracé a ambos y me dieron un poco de pastel. Decidieron que era hora de que me arreglara, porque me pasarían a recoger en una hora, y debía estar lista.
—¿A dónde me llevarán?
—Es sorpresa. Keitan nos pidió que no dijéramos nada —respondió papá.
No tenía idea de qué podía ser, pero suponía que Rita también estaba detrás de todo.
Decidí que entonces me arreglaría. Me puse unos pantalones sencillos, un suéter holgado y mis Vans. En mi cabeza hice un tomate, para que mi cabello no estuviese despeinado, y tomé mi pequeño bolso. Bajé las escaleras cuando el claxon sonó afuera.
Lucas y papá sonrieron cómplices.
—¿Entonces no pasaré mi día con ustedes dos?
—Claro que sí —aseguró papá—. Pero, la mañana la pasarás fuera. Ahora ve. Diviértete mucho, cariño.
Papá me dio un beso en la frente y abracé a Lucas, luego salí al cálido día. En la camioneta, con su brazo recostado en la ventana, estaba un Keitan moviendo sus dedos contra el volante al ritmo de una canción que sonaba en la radio. Al girar la cabeza, y verme detenerme en su ventana, sonrió abiertamente.
Se bajó rápidamente, casi atropellándome en el proceso, y me abrazó sin darme tiempo a decir nada. Su aroma tan familiar me hizo derretirme entre sus brazos y sonreí a medida le devolvía el abrazo.
—Feliz cumpleaños, mi bella Isabel —susurró contra mi cabeza.
Despegó un poco su cuerpo del mío, sin soltarme, y besó mis labios de pie en medio de la acera. Podía apostar a que desde la ventana papá y Lucas miraban la escena, igual que dos señoras chismosas, y sonreían como tontos.
—Gracias —respondí después del beso—. ¿A dónde piensas llevarme?
—Es sorpresa. Ahora, mi lady, suba a su carroza.
Me reí, rodeando la camioneta con él sosteniendo mi mano y abrió la puerta por mí, mientras la volvía a cerrar y me acomodaba en el asiento a lo que Keitan subía de conductor.
—Hoy tu día será sumamente especial. Ojalá te guste todo lo que planeamos para ti.
La camioneta comenzó a moverse y la emoción dentro de mí parecía querer explotar. Agarre la mano libre de Keitan, él no se quejó, y disfrute el viaje hasta que nos detuvimos. Frente a nosotros estaba la universidad.
—Confuso, ¿no? —Él rio—. Adentro está tu primera sorpresa.
—¿Nos dejaran entrar? Hoy es sábado.
—El entrenador me echó una mano. Tranquila.
Bajó primero él y abrió mi puerta. Me sujeto mientras bajaba, para así caminar pegados hasta la entrada del campus. Dentro todo estaba completamente vacío, por supuesto, y el silencio reinaba en los pasillos de la universidad.
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¿Caer Yo? Jamás ✔
Romance♕ Libro uno de la serie Jamás ♕ "Isabel está a punto de iniciar su primer año universitario en el lugar más codiciado de la ciudad: Walton. En dónde todo se basaba en fiestas, clubes, chismes, y mucho fútbol . Ella había tenido los peores dos último...