CAPÍTULO 66/7: ALIANZA

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FERİHA Y GÜNCE

Estaba muy sorprendida de ver a mi antigua amiga aquí. No la había visto desde aquel día en que se fue de intercambio universitario. Desde el momento en que entré había notado esa silueta y ese perfil tan característico de ella.

- ¿Gün...? - inhalé un poco - ¿Günce?

- ¿Feriha? - tomé algo de aire sorprendida de verla. Ambas nos quedamos calladas viéndonos ya que no podíamos comprender si esto era una gran coincidencia o si verdaderamente ella y yo estábamos aquí por la propuesta de Yavuz.

- ¡Günce! - Me acerqué a ella y la abracé. Ella correspondió el abrazo

- Feriha, tiempo si verte amiga

- Lo mismo digo... mírate nada más. Eres otra, desde el momento que te fuiste a Inglaterra de intercambio

- Lo sé amiga. Pero yo debería decir eso. Tú eres otra, literalmente. Yo no me veo tan distinta, pero tú sí. El tiempo pasó y tú cambiaste de los pies a la cabeza.

- Entonces, sé que debes saber algo de mí y mi pasado, supongo

- Feriha, cómo explicarte... yo estuve alejada de esta ciudad por años allá en Londres. Terminé allí mi educación, en la Universidad de Middlesex. Además hice una especialización y bueno. Aquí estoy. Te sorprenderá saber que tu socio Yavuz Sancaktar me trajo aquí desde su Jet privado que venía de un vuelo desde Nueva York

- Ah, con que por ese motivo no quería viajar en un avión común - pensé en voz alta

- ¿Qué dijiste?

- Nada amiga. Solo estaba pensando

- ¿En todo lo que ocurrirá? - tomé un poco de tiempo para poder volver a formar mi discurso - Como venía diciéndote estuve encerrada todo ese tiempo estudiando.

- Sabes amiga, creo que debemos tomar un café y platicar de todo esto. ¿Qué dices?

- Claro Feriha. Vamos

Ambas salimos de la oficina y nos dirigimos a la cafetería más cercana del hotel. Le dije a Cansu que pospusiera las reuniones de hoy, ya que estoy segura de que Günce debe saber algo de mi pasado y tendríamos mucho para discutir. Principalmente sobre la estafa a Emir para quitarle su tan amado club. Subimos a mi auto y manejé hasta el café. Reservamos nuestra mesa en una terraza y comenzamos la plática.

- Muy bien Feriha. Ahora que estamos aquí cuéntame... no te voy a negar que algo sé de ti... allá en Londres me adapté mucho a la vida inglesa por lo que dejé muy atrás las cosas que viví aquí en Estambul. Pero pude haber leído por ahí acerca de una tal cenicienta, o hija del conserje, o FY...

- Supuse que algo sabrías... - tomé una gran cantidad de aire para empezar el relato - En pocas palabras fingí ser una chica millonaria Günce. Ya sabes, la universidad llena de jóvenes ricos y yo siendo la pobre hija del conserje que no tenía ni ropa para usar, más que aquellas sofisticadas prendas que recibía de la vecina que era una diseñadora

- ¿Hablas en serio?

- Ajá. Así como lo oyes, todo ese tiempo engañé a todo el mundo. ¿Cómo creías que iba a encajar en un mundo de jóvenes ricos siendo la pobre hija de una familia conservadora?

- No puedo creerlo - tomé un sorbo de café para seguir oyendo el relato

- ¿Recuerdas esa vez en que platicamos acerca de los regalos de aniversario? Ahí fue cuando traté a mi padre como el chófer... traté a mi mamá, a la mujer más importante de mi vida como la sirvienta y mi hermano Mehmet fue quién chocó el auto de Emir. Ese era el motivo por el cual siempre estaba a la defensiva ante la situación. Aunque mi vida era una total mentira no podía soportar el hecho de que esas personas humillaran a mi familia

EL SECRETO DE FERİHA 3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora