Vidas Pasadas (Uzui Tengen x Lectora)

Capítulo 4

Había pasado ya una larga semana de mi llegada a la casa de Uzui-san. No lograba acostumbrarme todavía a vivir en ese lugar remoto con un hombre tan extravagante como él. 

Durante los primeros tres días, Uzui-san me había enseñado a cocinar sus platillos favoritos para que según él, yo fuera una buena esposa… Su esposa. Cada que decía eso no podía evitar poner los ojos en blanco, ¿cómo era posible que me pidiera ser su mujer si apenas nos conocíamos? ¿Tan desesperado estaba por tener compañía? 

Desde aquel día en que Daki nos atacó, no volví a tocar el tema de sus esposas, pero por dentro yo estaba que moría de ganas por saberlo todo. Esa chica demonio me había dejado con la duda sobre lo que pasó. Sí, sí, era obvio que las había asesinado, pero yo quería saber más sobre ellas. Sobre la relación que tenían, cuántas eran o cómo se llamaban… 

Aquella tarde mientras Uzui-san dormía plácidamente en su futon después de beber desde muy temprano, me dediqué a limpiar todos los rincones de su casa, la cual estaba descuidada y muy desordenada. 

Mientras recogía algunas cosas, me encontré con algunas prendas de sus mujeres. La ropa era bastante bonita, con estampados lindos y colores llamativos. Aunque muy diminuta y sexy. Vaya, nunca habría imaginado que a ellas les gustara vestir así, yo apenas y usaba shorts cortos y blusas de tirantes.

Yo no tenía nada de ropa qué usar, pues había estado lavando y usando lo mismo con lo que había llegado a esta época, consideré necesario que ya necesitaba un cambio. Así que me sentí con la libertad de tomar lo necesario. 

Tomé un baño rápido antes de cambiar mi atuendo y rogué porque me quedara. Para mi sorpresa así fue y eso me llenó de alivio, pues ahora tendría ropa nueva para usar en el tiempo que permaneciera aquí. 

En ese momento hubiese deseado que Uzui-san tuviera un espejo para poder ver cómo se veían en mí las ropas de esa época, pero por más que busqué no encontré nada.

Resignada me fui a sentar en la entrada de la casa, mientras doblaba la ropa limpia del playboy extravagante, pues la tenía regada por todas partes. 

Mientras estaba sumida en mis pensamientos ideando una y mil formas de volver a mi era, unos fornidos brazos rodearon mi cuerpo y me apretaron con fuerza, la suficiente como para sentir que me faltaba el aire. 

—Hinatsuru… —susurró una voz quebrada a mi oído mientras su aliento chocaba contra mi piel.

¿Hinatsuru? ¿Ese sería el nombre de una de sus esposas? No tenía duda de ello. ¿Acaso ella se parecía a mí o simplemente era porque la ropa que me puse le pertenecía? Cualquiera que fuese la respuesta, al menos ya sabía el nombre de una de sus difuntas esposas… 

Dejé que Uzui-san me siguiera abrazando fuertemente, pues al final de cuentas, estaba ebrio y probablemente no recordaría ese momento cuando estuviera sobrio. 

Grave error. 

Sus habilidosas manos comenzaron a acariciarme lentamente al principio y conforme tocaba mi cuerpo yo me iba poniendo nerviosa. Traté de apartarlo poco a poco, pero mis intentos no servían de nada, él estaba empeñado en seguir tocándome fervientemente. 

—Uzui-san… —apenas pude llamarlo por su nombre, pero eso sólo lo motivó a continuar con sus caricias.

El ambiente comenzó a tornarse tenso para mí cuando una de sus manos descendió directamente hacia mis piernas, donde su gentil tacto se iba convirtiendo en un lascivo toqueteo de muslos. 

—Hinatsuru… Te necesito —susurró y su aliento a alcohol azotó mis sentidos. Uzui-san había pasado de la melancolía al deseo en menos de lo que esperaba.

<<Trágame tierra>> pensé mientras apartaba su mano, la cual estaba palpando más allá de lo debido. 

—Hinatsuru… ¿Acaso ya no me deseas? —me preguntó y un escalofrío recorrió todo mi cuerpo tan pronto hubo dicho aquello. ¿Yo desearlo? Ni siquiera había pensado de ese modo en todo este corto tiempo que había estado viviendo con él. Por mi mente siempre estaba presente el hecho de buscar una manera de volver a mi época, sólo eso me había estado teniendo intranquila en estos días, pero ahora… Las cosas eran un tanto diferentes. 

—Uzui-san, yo…. —las palabras se me fueron de la boca en cuanto sentí que la tela del kimono corto se iba deslizando por mis hombros.

Mis nervios se acrecentaron, mientras él acercaba sus labios a mi cuello. Su aliento hizo que mi piel se erizara y mis ganas de escapar aumentaran. 

<<Sólo está ebrio, sólo está ebrio>> me repetía mentalmente sin parar. 

—Hinatsuru, estás muy nerviosa. ¿Acaso te estoy incomodando? —me susurró, sin esperar respuesta a cambio, pues él ni siquiera se detenía. 

<<Joder. Claro que me incomodas>> pensé, tratando de apartar su mano de mi entrepierna. 

—Hágamoslo aquí, Hinatsuru. Dudo mucho que… 

Una figura inerte apareció de la nada. 

<<¡Gracias al cielo, eres mi salvación!>> pensé totalmente aliviada.

—Lo siento, creí que se detendrían en cuanto me vieran —dijo el inexpresivo peli negro a modo de disculpa. 

—¡Maldita sea, estamos a punto de tener sexo, Tomioka! —gruñó Uzui-san, acomodando mi ropa ante la furtiva mirada del chico. 

—Lo lamento. No fue mi intención interrumpir. Sólo venía a verte y a traerte algunas cosas como de costumbre —el azabache mostró una cesta con algunas frutas frescas y algunas botellas, probablemente él era el culpable de que Uzui-san se embriagara tanto. 

—Bien, sólo por esta vez te perdono —Uzui-san se levantó del suelo y enseguida tomó la cesta. Afortunadamente yo había pasado a segundo plano y escapé de allí para darles algo de privacidad, después de todo mi mente había quedado algo perturbada y necesitaba asimilar todo lo que había sucedido en ese corto momento. 

<<A este paso que vamos, seguramente quedaré embarazada antes de regresar a mi época>> pensé avergonzada tocando mi vientre.

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Por fin he podido actualizar de nuevo, me alegra mucho poder hacerlo. Lamento tanto haberles hecho esperar, las cosas han sido un poco difíciles ahora que soy madre xdxd

Agradezco a todos los que me dejaron lindos mensajes y comentarios a lo largo del tiempo en que había dejado de actualizar. Me motivaron bastante a continuar y a no borrar la historia, pues esa idea loca me había pasado por la mente...

Inicialmente había dicho que actualizaría en cuanto comenzara la segunda temporada, pero como ya tenía la mitad de este capítulo, decidí que lo terminaría cuanto antes para no hacerlos esperar más de la cuenta.

An Airad