Capítulo 14

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Sequé mis lágrimas mientras veía el mísero plato de comida que había recibido esa noche: un pan duro con moho alrededor y un vaso con agua turbia, que más bien parecía proveniente de un charco. 

—Odio esto, quiero estar en casa —dije en voz baja, haciendo a un lado la bandeja con mi cena deplorable —Mamá, papá, abuela… Los echo tanto de menos… —las lágrimas comenzaron a caer una por una y la imagen de Uzui-san y Tomioka-san pasó por mi mente —Si tan sólo fuera tan fuerte como ellos o si tan sólo ellos vinieran por mí…

—Tienes un cliente —dijo Daki entrando precipitadamente a mi habitación —Debes lucir radiante para él, así que deja de lloriquear, tonta.

Pronto ordenó a las kamuro alistar mi atuendo y ordenar la habitación, por fortuna se llevaron mi cena y en su lugar dejaron unos dulces que tenían un sabor muy diferente a todo lo que había probado en mi época. 

—El cliente que tendrás es bastante apuesto —aseguró con una pizca de envidia —Qué lástima que él haya elegido a alguien tan fea como tú. Le insistí en que escogiera a otra, pero él te pidió especialmente a ti. Que desperdicio… pero bueno, ojalá logres satisfacerlo y ser obediente—me dijo Warabihime, mientras me miraba de manera severa —Espero que con este hombre al menos ya dejes de resistirte a tener sexo… 

Tragué saliva y asentí, pensando en que sería una tortura ser tocada por un hombre que no fuera Uzui-san… 

En cuanto ella y las kamuro salieron, respiré hondo para prepararme mentalmente a lo que estaba por venir. 

Mi cuerpo no dejaba de temblar ni un poco y traté de apaciguarme al imaginar que estaba a punto de tener mi luna de miel con el amor de mi vida. 

En cuanto escuché los pasos de mi cliente aproximarse, cerré los ojos un instante pidiéndole perdón a Uzui-san, pues se suponía que él era mi esposo y bueno, estaba a punto de serle infiel. Me senté rápidamente dándole la espalda a mi cliente, para ocultar mis nervios y cuando menos esperé, él ya había entrado. 

—Te extrañé tanto —me dijo una voz que rápidamente conocí.

—¡Uzui-san! —me di la vuelta y miré a un hombre muy distinto del que usualmente estaba acostumbrada a ver. Era realmente sorprendente el cambio en su imagen. Se veía tan apuesto e irresistible con el cabello suelto, sin maquillaje y en yukata, sobretodo porque podía ver su pecho un poco descubierto.

No lo dudé ni un poco y me abalancé a sus brazos, esperando que su calor borrara los horribles recuerdos que otros habían dejado sobre mi piel. 

—¿Te encuentras bien, t/n? —me preguntó en voz baja con preocupación, mientras acariciaba mi espalda y hundía su rostro entre ni cuello y mi hombro. 

—Más o menos —respondí, recordando lo que había pasado con aquel hombre de ojos como el arcoiris.

—No tienes que decir nada, ya lo sé todo… —dijo inesperadamente para sorpresa mía. 

—Uzui-san, yo en verdad estoy avergonzada de que me mires así. No quería que nada de esto sucediera, pero fui una tonta al alejarme di ti aquel día… Yo… Yo… 

Él se apartó de mí y me tomó de los hombros con sus fuertes manos, para después mirarme a los ojos. 

—T/n, no debes preocuparte ya… Nadie volverá a hacerte daño, te lo  prometo —me dijo y secó algunas de mis lágrimas —Sé que nada borrará esos recuerdos de tu mente, pero al menos permíteme estar más tiempo contigo… 

Uzui-san se inclinó hacia mí lentamente, mientras nuestras miradas se conectaban. El latir de mi corazón era presuroso y él probablemente ya lo habría escuchado, porque me dedicó una sonrisa antes de sellar sus labios contra los míos. 

La calidez de su boca y el sabor de aquel beso no tenían comparación a ninguna situación anterior. Todo era diferente y mucho mejor. Besar a alguien de algunos años mayor que yo, me hacía sentir especial de cierta forma. 

Uzui-san comenzó a acariciar mi rostro mientras nuestras bocas seguían unidas. Apenas podía llevarle el ritmo, pues su manera de besar era diferente a la de mis ex novios, quienes eran anticuados y aburridos. Pero el sexy playboy era distinto... Bueno, ¿qué se podía esperar de alguien que seguramente ya era un experto besando luego de haber tenido tres esposas? Probablemente había practicado muchos tipos de besos con ellas. Sentí una pizca de celos de sólo recordar que él ya había tenido otras mujeres antes que a mí. 

Repentinamente él desnudó mis hombros para tener más acceso a mi cuello, el cual fue el siguiente en tener su atención. Fue inesperado el momento en que sus labios tocaron la sensible piel de esa zona, la cual comenzó a ser devorada por él, mientras agudos gemidos se me iban escapando. 

En un intento de no apartarlo de mí, lo tomé entre mis brazos con fuerza y él perdió el equilibrio cayendo encima mío. 

—T/n, eres tan hermosa... Me gusta este atuendo de oiran que llevas puesto... Aunque yo no quiero que sigas siendo una oiran, no estoy dispuesto a soportar que otros hombres te toquen. 

—Entonces, permíteme ser tu oiran por esta noche. Has pagado por mí y yo debo atenderte como es debido —le dije a modo de broma, pero nunca me imaginé que él se tomaría mis palabras muy en serio.

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Ups lo siento, el capítulo terminó en la mejor parte xd

El próximo capítulo sí tendrá limonada... 100% real, no fake, se los juro jsjs

An Airad

Vidas Pasadas (Uzui Tengen x Lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora