Capítulo 19

1.3K 145 118
                                    

Ese mismo día Tomioka-san llegó con dos grandes cestas con suficiente comida como para dos semanas. Uzui-san y yo le agradecimos por el regalo, pero él nos dijo que no era gran cosa, pues estaba feliz de poder ayudarnos.

Entonces el sexy playboy le sonrió de manera extraña y cuando menos acordé, él lo acorraló directamente hacia la pared, apuntando su cuello con un kunai. Tomioka-san se sorprendió por aquella extraña reacción de parte del contrario, pero se mantuvo quieto esperando a que mi amado shinobi le dijera a qué se debía todo aquello. Yo por mi parte sólo esperaba obtener una respuesta a toda esa escena digna de telenovela.

—Sé perfectamente tus intenciones, Giyuu —espetó el albino seriamente.

—No sé de qué estás hablando —Tomioka-san tragó grueso, mientras sentía el filo de aquella arma punzando suavemente la piel de su cuello.

—Si tanto deseas a mi mujer, ¿por qué no me lo dices de frente? —mis mejillas se tornaron coloradas en cuanto vi la expresión de sorpresa de aquel tímido peli negro tras escuchar las palabras de Uzui-san. Sus intenciones eran muy obvias, aunque admito que al principio ni yo lo habría notado por mi cuenta de no haber sido por el sexy albino.

—Uzui yo... Perdóname... —Giyuu cerró los ojos y mi perro fue a lamer sus pies para apaciguarlo.

—Quítate la ropa —ordenó mi amado y Tomioka-san nos miró desconcertado.

—Por favor, olvidemos este tema... Yo no quiero problemas contigo —le decía el peli negro, pero el albino desesperó.

—Si no te desvistes, lo haré yo.

Tomioka-san cerró los ojos fuertemente, mientras las manos del albino comenzaban a profanarlo lentamente. Uzui-san hizo su haori bicolor a un lado y mientras este descendía sobre sus hombros hasta llegar al suelo, no pude resistirme a imaginarme su torso desnudo.

—Uzui, no tienes porqué hacer esto... Prometo que no volveré a mirar a tu esposa si eso te molesta, ni siquiera le dirigiré la palabra —dijo avergonzado de sí mismo.

—Uzui-san,por favor, no asustes así a Tomioka-san —dije preocupada, pues se notaba que el peli negro no quería obedecer a la petición del albino sobre desnudarse.

Entonces Uzui-san me tomó del brazo, mientras su otra mano portaba el kunai amenazando el cuello del pilar del agua.

—Ya lo he decidido, Giyuu será nuestro esposo. Sé que serás feliz con esa decisión, t/n. Así yo podré estar contigo protegiéndote y él se encargará de proveer sustento a nuestra familia...

—No creo que Tomioka-san quiera eso, no todos aceptan la poliandria (una mujer con varios hombres).

—Vamos Giyuu, dile a t/n la verdad. Dile que tú la deseas mucho tanto como yo a ella —le susurró al oído de manera lasciva.

Tomioka-san me miró y pude ver unas cuantas lágrimas asomadas en sus ojos y el dulce e inocente color carmín en sus mejillas.

—Lo siento, t/n. Él tiene razón, yo quiero hacerte mía también —dijo, mientras las lágrimas de sus ojos comenzaban a caer.

—Tomioka-san... —me enterneció la manera en que había admitido aquello y no pude evitar ir a abrazarlo. Gracias a mi abrazo Uzui-san dejó de amenazarlo con su kunai y también nos abrazó a ambos.

—¡Bienvenido a la familia Uzui, a partir de ahora haremos cosas extravagantes! —exclamó con felicidad y Giyuu-san no pudo evitar desmayarse, quizá todo aquello había sido demasiado para él.

♠️♠️♠️

Me divirtió muchísimo escribir este pequeño capítulo, espero que les haya gustado. ¿Quieren limonada en la siguiente actualización?👀

An Airad

Vidas Pasadas (Uzui Tengen x Lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora