Parte17: Un cambio de perspectiva

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"clac, clac, clac" Resonaron las pisadas de un par de zapatos por un pasillo amplio. El piso color gris parecía su peor enemigo en este momento ya que cualquiera diría que sus pisadas estaban cargadas de rabia contenida. El dueño de las pisadas comenzo a contar inconscientemente los numeros de las puertas uno por uno hasta llegar a la de madera gris que tenía una chapa de color plateado dos numeros y una letra en dorado.

-"47 c" Inflo el pecho hasta más no poder y toco el timbre. Por las rendijas de aquella puerta fácilmente podías decir que algo se estaba suscitando en ese departamento, un golpeteo de alivio estremeció su pecho cuando noto solo una esencia.

Gulf había estado teniendo miles de ideas aterradoras en el camino; si en verdad mew estaba teniendo su rut y no se lo dijo quizás estaba con alguien. Si hubiera otra persona la puerta, que tal si estaba aquel beta y lo miraba con sorna mientras emanaba la fragancia de su alfa.

Otra vez el sonido de pasos, está vez desde el otro lado, desde el interior del departamento. La puerta fue abierta lentamente y de manera muy cortés mew hizo acto de presencia, bueno, semi apareció ya que como un ladrón siendo descubierto en pleno acto delictivo quedó detrás de la madera oculto.

"Bebé no es un buen momento, realmente debes irte a casa"

"¡¿Irme a casa?! Pero porque, me mentiste y lo peor es que todos estaban preocupados por ti ya que decidiste no contestar tu teléfono"

"¡Gulf! Debes irte a casa, hablaremos mañana !

"¿No quieres estar conmigo?"

Gulf sintió como se asomaban las lágrimas en sus ojos, quizás él no lo percibía pero si había alguien más, mew lo tenía hablando en el pasillo y ni siquiera le había mostrado su rostro.

"Bebé es por eso que quiero que te vayas, si te hago daño" Gulf elevo el rostro luego de ocultarlo en el cuello de su chaqueta mientras apretaba sus labios para no llorar. Se sentía demasiado mal estar siendo rechazado en un pasillo hasta que mew dijo eso.

"Si tienes un omega porque querrías pasar por esto solo, no lo comprendo, si no abres la puerta me iré y no te hablaré más. "

Al no escuchar respuesta dio dos pasos hacía atrás pero antes de caminar hacía el ascensor del que bajó fue agarrado por la cintura. Apretó los ojos con fuerza y escuchó el portazo.

"aunque quiera no voy a poder detenerme, ni aunque ruegues o supliques, tampoco podré controlarlo por completo, aunque tome supresores ahora ya es demasiado tarde"

El omega estiró sus brazos hasta colgarse del cuello del alfa y siendo tomado por la parte inferior de sus piernas en algunas zancadas ya estaba siendo lanzado sobre la mullida cama. No conocía el cuarto de mew pero este tenía encapsulado una gran concentración de feromonas del alfa.

Feromonas que si bien conocía por las múltiples veces que convivió con el alfa, hoy tenían un corazón diferente, algo que le hacía querer retorcerse contra esas suaves sábanas color gris de seda.

Su cuerpo fue aplastado por un peso conocido, su remera subió hasta el pecho y una sensación caliente y húmeda se arrastró desde su ombligo hasta llegar a su pezón.

Mew se rio entre dientes mientras apretaba el pequeño botón entre sus dientes y la carne capturada era presionada con la punta de su lengua.

El omega abrió aún más sus piernas permitiendo que mew se acomode aún mejor entre ellas, el bulto del pantalón de chándal era escandaloso, de aquel cuerpo podía sentir como emanaba el calor.

Gulf gimió llevando ambas manos a su rostro. El cuerpo más grande abandonó su pecho y el omega separó sus dedos para -"echar una mirada"-

La vista era perfecta, sólo podría describir aquella figura como el cuerpo de un Dios, en toda su vida no había visto alfa más hermoso y atractivo, ahora, en este preciso momento confirmaba que aparte de hermoso y atractivo, era sexy hasta en la bajada de su vientre.

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