Calma para el caos

31 de octubre, 18:36

sorprendentemente, lauren logró convencer a mamá de que me dejara salir por halloween.

no sé cómo hice para conseguir una amiga con el poder de persuadir hasta a una piedra, pero tal parece hay gente que nació con magia.

así que por fin volveré a verla.

eso supongo.

este tiempo fue una tortura de principio a fin, pero pensar que está por terminarse hace que el mundo ya no se sienta blanco y negro.

no hubo día en el que mamá y yo no hayamos discutido. todos los días era un nuevo problema. cada vez que intentaba sacar el tema para decirle qué pienso al respecto de lo que me está haciendo, solo responde "algún día lo entenderás" como si yo siguiese teniendo dieciséis años y fuese la primera vez en la vida que intento estar con alguien. mamá no me permitió nunca ir más allá. ella tuvo muchísimo que ver en todo, y solo ahora empiezo a darme cuenta.

me hizo ver el mundo a través de sus ojos.

el miedo lo generó siempre ella.

esa incomodidad para creer que merezco algo.

entonces surgió la cuestión.

¿y si hizo lo mismo con las mujeres con las que intenté estar antes?

hablarles. asustarlas para que se alejen de mí.

una noche me atreví a preguntárselo directamente. no sé porqué mierda lo hice. "sé que esto es tu culpa, mamá. sé que freyre no es la primera a la que atacas para que me deje". fue todo lo que alcancé a decir antes de empezar a llorar, y eso solo la hizo enfadarse el triple. desde entonces decidí dejar de intentar hablar las cosas con ella. es imposible.

algún día lo entenderé. eso me dijiste.

y sí, mamá. algún día entenderé que esto está mal. que me odias porque es gratis hacerlo, y porque nadie va a juzgarte por esto. hacerme lo que me haces parece ser tu única forma de demostrar lo que de verdad sientes y piensas al respecto de mis preferencias, pero también de dejar ver lo triste que estás con tu vida.

pero yo no soy tuya, no soy la hijita que quieres que sea aunque me muera por intentarlo.

aunque no lo entienda, sé que no tengo la culpa de esto. de no ser lo que quieres que sea. no tengo porqué serlo solo para hacerte feliz, para que por fin te sientas orgullosa de mí. pero tampoco lo necesito.

pones la vara fuera de mi alcance, tan alta, con la intención de que nunca pueda alcanzarla.

sabes muy bien que no lo haré, y si no puedo es porque eso significa cambiar algo que a mí no me molesta ser. es a ti a quien incomoda, y yo no estoy aquí para complacerte.

tienes razón, quizás no hoy, pero algún día lo entenderé. y, quizás también, solo hasta entonces pueda perdonarte.