Calma para el caos

21 de febrero, 14:52

es el día. se supone que freyre llegará en un par de minutos a buscarme pero, bueno, le di mal la dirección de mi casa a propósito, así que me toca caminar un par de cuadras. iremos a la playa de no sé dónde mierda, voy a tener que conducir y rezar para que no terminemos estrellándonos contra nada.

al menos seis de mis cinco hermanos empezaron a preguntarme que cómo mierda hice para que freyre haddish me preste atención. todos ellos saben de mis preferencias, por lo que es avaricia pedir que no hagan los comentarios de más sobre lo que dos chicas pueden hacer solas en una playa. mamá y papá, especialmente la primera, ni siquiera les prestaron atención.

con mis hermanos es fácil. todo con ellos es simple: o les da gracia o no les importa. o lo usan para reírse de mí o no les importa. o me lo repiten la vida entera o nunca. para ellos el mundo es sí o no. joder o no joder. así que salir del closet con los cinco fue fácil, cosa que al principio era un alivio. todos supieron respetarme. entenderlo. me cuidaron de que mamá y papá se enteraran antes de que yo pudiera decírselos en persona.

lo dije antes. soy la hijita de la familia. papá se lo tomó normal. ni bien, ni mal. es como el sexto hermano, no le importó demasiado. pero mamá...

me duele que le cueste tanto. lo admito. a veces quisiera haberlos visto reaccionar bien a esto. tomárselo como lo que es: lo más normal del mundo. pero en lugar de eso, tengo que agradecer que me dejen salir con lauren, aun cuando es solo una amiga. sin embargo, también soy obligada a soportar las caras largas y el malhumor de mierda cada vez que lo hago, o cada vez que intento hacer una nueva amiga y traerla a casa. todo eso genera malestar. mamá se convierte en el verdadero diablo cuando de mí se trata. piensa que soy una lesbiana promiscua o algo así. que mujer que veo es mujer a la que le entro.

cosa que es verdad, pero aun así me molesta. odio que mi propia madre haya cambiado tanto solo por esto. es lo último que quería, pero también fue lo primero que pasó.

freyre no es la excepción. sé que en cuanto le nombre siquiera la posibilidad de que la chica favorita del pueblo y yo salgamos a algún lugar... nada será suficiente para calmar a mamá. va a hacer las caras de siempre. habrá un ambiente tenso que nunca sé cómo afrontar. por eso prefiero no decírselo.

freyre no merece ser el conejillo de indias hasta que mamá se haga a la idea, ¿de acuerdo? nadie lo merece.

mamá puede ser jodida, pero si tiene que maltratar a alguien hasta aceptar que me gustan las mujeres, ese alguien soy yo. es lo único que pienso permitirle.

es por esto que no hay ni una sola chance de que pueda traer a freyre a casa algún día de estos.