《El sexo es lo más divertido que se puede hacer sin reír—
Woody Allen》—. No puedo— dijo soltando la banana.
Sango la miró sería—. Estás muy estresada, esto es algo con lo que ambos deban divertirse, no es algo con lo que debas ahogarte o atragantarte— le dijo su ahora amiga, Aome la miró dudosa.
—. No puedo relajarme, siento que lo haré mal— dijo mientras dejaba a la pobre y mordida banana sobre la mesa, Sango la miró sería.
—. Bueno, recuerdo que la primera vez que hice algo así, él chico terminó mordido— admitió avergonzada—, con la práctica vas mejorando— la ánimo, pero Aome aún conservaba una expresión triste—, recuerda que sólo debes relajar la mandíbula, y tomar lo que puedas— Aome suspiró, se oía sencillo, pero no lo era, la banana que había usado no era tan gruesa como Sesshomaru, y esa pobre fruta había terminado muy dañada por sus dientes.
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Aome respiro hondo y acarició con la lengua el glande de Sesshomaru, este se estremeció, y ella tomó confianza, la última vez que había practicado, la banana había terminado sin ninguna mordida, relajó la mandíbula, y comenzó a introducir en su boca aquel firme y caliente trozo de carne, era una textura suave, uso la lengua para acariciar ese músculo, el peliplata se estremecía volviéndola más audaz, lo introdujo más en su boca, un gruñido de placer la hizo saber que iba por buen camino, lo sacó lentamente de su boca cuidando no rasparlo con sus dientes, y después volvió a introducirlo en su boca, rápidamente conoció el límite de cuanto podía tomarlo en su boca, marcó un ritmo rápido y con ayuda de su mano estimuló la parte de su miembro que no alcazaba a introducir en su boca.
—¡Aome...!—Sesshomaru se aferraba con fuerza a las sábanas de la cama, era demasiado placer, apenas podía pensar, y es que la visión de ese inocente rostro haciéndole aquello, le estaba destrozando el cerebro, podía sentir como su lengua le acariciaba su zona más sensible, mirar como esa pequeña boquita se abría para tomarlo le ponía los sentidos a mil por hora, gruñó, si ella seguía así terminaría muy rápido—. A-aome— apenas podía hablar o tener un pensamiento coherente—, Aome— suspiro y echo la cabeza hacia atrás al sentir que ella le raspaba suavemente con los dientes, su cuerpo se estremeció al experimentar el orgasmo.
Sintió la saliva escurrirsele por la comisura de los labios, Sesshomaru era muy grueso y grande, apenas y podía tenerlo en la boca, lo escucha decir su nombre, lo sentía estremecerse, ella sentía su corazón latiendo como loco, le llenaba de emoción ver como su esposo disfrutaba lo que estaba haciendo, eso le dio un sentimiento de mujer seductora, su vientre se lleno de cosquillas, y su clítoris palpitaba nesecitado de caricias, entonces sintió como un chorro caliente llenaba su boca, casi no tenía sabor, pero no era desagradable, se trago todo cuanto pudo mientras que un poco se escapaba de su boca.
Se puso de rodillas en la cama mientras se limpiaba los restos de saliva y semen de la boca, Sesshomaru se sentó rápidamente en la cama, y con la respiración aún agitada se quitó la camisa y le limpió las mejillas, su boca y barbilla, hizo todo aquello con mucho cariño y cuidado. Aome se sintió como una niña pequeña siendo mimada, cerró los ojos disfrutando como él limpiaba su rostro.
Sesshomaru la miró cerrar los ojos y sonreír, se veía tan bonita con sus mejillas sonrojadas, él apenas había recuperado el ritmo de su respiración, su mirada se detuvo en sus labios, no se resistió y la besó, ella se sorprendió y quiso apartarse, pero no la dejó, en sus brazos Aome se rindió y correspondió su beso, sus leguas se juntaron y jugaron, sintió un ligero sabor extraño, eso lo hizo amarla más, seguramente el semen no tenía el mejor sabor del mundo pero ella se lo había tragado y no había dicho nada desagradable, la besó hasta desaparecer aquel extraño sabor de la boca de su esposa.
Sus manos se colaron debajo de su blusa, y esta salió volando cuando se la quito, los pechos de Aome quedaron a su total disposición, sus pezones estaban duros nesecitados de atención, se amamanto de su pecho como si fuera un niño pequeño, la azabache solo podía gemir y retorcerse bajo su cuerpo, le beso en cuello, en ese punto donde ella temblaba si lo besaban. Le quitó de un rápido movimiento el pequeño chort de pijama, su esposa no acostumbraba a usar ropa interior, así que sus dedos se abrieron paso con total libertad por su intimidad, ella era con un charco ahí, estaba muy húmeda y resbaladiza, estimuló su pequeño botón y ella gritó, introdujo un dedo en su interior y ella arqueo su espalda, dejando sus pechos más cerca de su boca, tomó uno de esos pequeños botones en su boca y lo lamio con total ternura, su dedo comenzó un vaivén de mete y saca rápido, su pequeña movía las caderas al compás de su dedo, sintió como era apretado en aquel canal cálido y estrechó. Todo su cuerpo tembló cuando llegó al orgasmo, su respiración era un desastre, al igual que su mente, sintió como su interior era invadido por algo mucho más grande que un dedo, soltó un fuerte gemido.
Sesshomaru se quedo quieto, capaz y si se movía terminaba como un puberto precoz, ella era tan cálida y estrecha, nunca se aburriría de ella, suspiro y la miró, los cabellos negros se desparramaban desordenados por la almohada, su respiración era gitada, sus pechos se movían en cada respiración, tenía las piernas abiertas de par en par dándole una vista clara del lugar donde estaban unidos, se mordió el labio divertido y le dio un suave palmada en el clitoris, Aome pegó un grito de placer.
—¿Te gustó?— pregunto perverso, ella abrió los ojos y lo miró, sin ninguna vergüenza ella asintió—¿Quieres otra?— sonrió lleno de picardia, ella río y asintió. Le dio otra palmada, igual de fuerte que la anterior, ella se volvió a estremecer mientras soltaba un gemido. La tomó del trasero y cambió su posición, su espalda se apoyo totalmente en el colchón de la cama y ella quedó sobre él, tuvo una hermosa vista de su cuerpo desnudo—. Hazme tuyo pequeña— pidió mirándola a los ojos, ella sonrió y puso sus manos su pecho para tener mejor empujé.
Levantó lentamente sus caderas, y cada músculo de su cuerpo se tenso ante ese pequeño placer, dejó a su cuerpo caer, lo sintió llegar al fondo de su interior, apretó los labios, y volvió a subir lento para bajar de golpe, miró a los ojos a Sesshomaru, sus bonitos ojos ámbar la miraban con deseo y amor, se lanzó a sus labios besándolo con pasión y movió con fuerza sus caderas, no era un ritmo rápido, pero si fuerte, él movió su cuerpo al ritmo que ella lo hacía, todo su cuerpo se estremecía antes los choques de sus cuerpos, no hacía más que temblar y gemir mientras experimentaba el placer, Sesshomaru tomó su trasero y la dirigió haciendo más rápidos sus movimientos, se mordió el labio, estaba tan cerca del orgasmo, apenas podía con todo lo que sentía.
Su cuerpo se estremeció cuando las cosquillas del orgasmo acariciaron su cuerpo, sintió como Sesshomaru se movía con fuerza alargando el éxtasis, su interior fue golpeado por los fluidos del peliplata, se quedó en blanco mientras su respiración se volvía más lenta ¿Como se llama? Apenas y podía recordarlo, sintió como por sus piernas sus fluidos se resbalaban.
Sesshomaru le dio la vuelta, quedando sobre ella, le beso los labios con ternura—. Una vez más— le pidió en un susurró, ella mejor que nadie sabía la resistencia que tenía su esposo, asintió desganada, podía sentir como él estaba tan duro como una roca en su interior, los labios de Sesshomaru volvieron a besarla, esta vez con ternura y se movió con suavidad en su interior, excitandola nuevamente, enredo las piernas en su cintura y tocó cuanto podía, su espalda su pecho.
Continuará...
Un extra +18 más, y el extra final, y terminaremos con esta historia, es una alegría para mi decirles que los publicaré antes del 1 de enero. Los últimos dos capítulos de esta serie los publicaré hoy y mañana, muchas gracias por su apoyo chicas.
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El Novio De Mi Prima (Finalizada)
FanficLos personajes de Inuyasha no me pertenecen, pero sí, la trama de esta historia. Sesshome. Época Moderna. Universo Alterno. Long-fic. *************************** "Tal vez no lo creas, pero desde la primera vez que te ví, te entregué mi corazón" Debi...