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Había llegado esa tarde de nuevo a Seúl.

Los ultimos meses los había pasado trabajando en Gunsan y en Busan, había recibido algunas visitas de su pareja en ocasionales fines de semana, y ahora por fin había llegado el día de volver a estar juntos. Esperaba que esta vez fuera para siempre, sin viajes de negocios ni complicaciones.

La casa ya estaba lista. Los fines de semana que Jimin no viajaba a Gunsan para estar con él, Yoongi iba a Busan para trabajar en su propia casa.

El último mes habia sido un tanto complicado luego de un malentendido que Jimin había presenciado. Yoongi se habia encargado de aclararlo pero aun asi Jimin le había pedido tiempo para pensar. Mismo que Yoongi habia aprovechado al máximo para concluir con el trabajo de su propia casa.

Ahora estaba de vuelta para darle la noticia a Jimin e informar a sus familias, estas ya estaban casi al tanto de todo, solo esperaban un mensaje en el grupo de chat familiar para poner manos a la obra.

Yoongi había comprado una botella de vino y un ramo de rosas, le entregaría esa misma tarde la llave a Jimin y podrían seguir con sus planes.

Cuando llegó al departamento en el que vivía con su pareja estaba rebosante de emoción, queria ver la cara de Jimin cuando le dijera que todos sus planes que habia hecho a lo largo se su relación al fin podrían hacerse realidad por lo que habia pasado por alto muchas señales que podrían haber avisado sobre lo que estaba sucediendo bajo su techo.

Entró al lugar y no le importó nada mas que ver a su pareja. Camino por el pasillo rumbo a su habitación pero no lo encontro ahí. Siguió su búsqueda directo al baño que estaba al otro lado del pasillo, sabia que Jimin disfrutaba de pasar tiempo en la tina y queria sorprenderlo.

Pero fue él quien se llevo una sorpresa.

Apenas había abierto un poco la puerta cuando escucho ruidos dentro de la habitación, le pareció muy extraño. Se escuchaban respiraciones agitadas y el chapoteo del agua contra algo más.

Cuando abrió completamente la puerta, la botella de vino resbalo de sus manos impactando contra el suelo logrando que el par que usaba su ducha fuera alertado de su presencia.

Todo habia sido demasiado rápido pero para Yoongi todo pasó en camara lenta. Jimin estaba apoyado sobre la mampara de la ducha, una mano grande y con tatuajes le sostenía del cuello mientras que otra tenia sujetando con fuerza las manos del rubio, ambos cuerpos se movían al ritmo de las embestidas del peli negro. Jimin jadeaba y gritaba mientras el otro lo penetraba, habia gruñidos saliendo de la garganta del más alto y su cuerpo, aun mojandose con el agua de la regadera, mostraba un sonrojo pecaminoso.

Ambos se giraron cuando escucharon el estruendo que la botella habia ocasionado. El vino de la botella pinto el piso blanco como si fuera sangre, como si fuera la sangre derramada del corazón roto y herido del pálido.

Jimin palideció al ver a Yoongi de pie en la entrada del baño, unas rosas en el suelo impregnandose con el líquido derramado, el rostro deformado de su pareja y las lágrimas que comenzaron a bañarlo habían logrado que el corazón de Jimin se estrujara en su pecho. El joven más alto miro al pálido con confusión. Él sabia que Jimin habia estado en una relación antes de él, el mismo rubio le había comentado que decidieron darse un tiempo luego de que el mayor lo traicionara, Jimin habia asegurado que su relación habia terminado por lo que no comprendía que hacía él ahí.

Yoongi los miro por varios segundos, el par permanecio inmóvil en su lugar, todo parecía haberse detenido. El pálido no dijo nada, simplemente se dio la vuelta y salió de la habitación.

Déjame amarte [ YoonTaeGi ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora