HIM || vkook

XII

— Kim Taehyung, no puedo creer que huiste del instituto, activaste tu runa para ocultarte y te dignas a aparecer así, en un día tan importante cómo éste. ¡Mark regresa, y tú te apareces demacrado! — Jisoo lo regañaba con furia mientras limpiaba las heridas del demacrado caballero.

Taehyung sólo mantenía el silencio, no sabía que decir, había tenido una estruendosa noche, no podía ni siquiera formular palabras de su boca, estaba estupefacto ante lo diferente que se sentía de nuevo. Jisoo podía notarlo, así que al terminar de curar sus profundas heridas, se sentó a su lado mirándolo comprensivamente, esperando a que él dijera lo que había hecho, como siempre solía hacerlo cada vez que se metía en problemas.

— Hoseok..

— ¿Otra vez te andas drogando? — Taehyung la miró enojado, recriminando a que lo dejara continuar.

— Intentó matarme, y envió a un demonio de... de el mundo de las sombras, me..me poseyó. — Jisoo ahogó un jadeo atterorizada.— he estado viéndome con..con quién no debería... Jisoo, perdón..de verdad, lo intenté, intenté ser suficiente fuerte, y sé que he cometido demasiados delitos..

Su hermana no sabía que decirle, ni como reaccionar, sus ojos estaban acuosos. Acarició los cabellos de su hermano apaciguando el pesar que sentía al verlo tan dolido por dentro, sabía ella también lo que era amar lo prohibido, porque ella precisamente estaba saliendo con una seelie. no debía tampoco, pero ella no se imaginaba la gravedad de con quién el se veía.

— No te preocupes hermano, todo estará bien, todo se arreglará. Vístete, le avisaré a Nam. Debemos ir a limpiarte.

Taehyung tampoco pensaba decirle a ella qué su corazón palpitaba con fuerza al ver desastres en la ciudad, ver un rastro de sangre negra por las calles, aquél olor a sudor y azufre, que reconocería en cualquier parte. La voz de Jungkook resonaba en sus oídos cada vez que cerraba los ojos, podía sentir su respiración contra su cuello, entre cada beso y cada palabra que le murmuraba.

"me gustas, taehyung... y quiero estar contigo, no importa a cuántos les moleste.."

Pero a él si le importaba, y eso volvía a hacer revoluciones en su cabeza. gruñó enojado y se revolvió el cabello, tomó una chaqueta de cuero negra y caminó a la salida de su habitación. A lo lejos vió el recibimiento de Mark, notó como Jackson percibía su presencia y huyó de ahí. Lo único que no vió, fué la presencia de un grupo de otros cazadores detrás de Seokjin, y uno de ellos que también lo había visto.

De todo esto, habían pasado unas semanas, pero entre tantas peleas con demonios, Taehyung se negaba a darle la cara a Jungkook, y él seguía buscándolo y masacrando demonios para que él lo buscara. Mark había ido a Idris, y se había llevado a un grupo de cazadores. Habían vuelto, y Taehyung sabía que lo regañarían, de siempre regresar destrozado, y con los ojos cansados de no poder dormir.

Nam los condujo hasta la ciudad de hierro, dónde las hermanas de hierro tenían una gran posa de agua, era agua bendecida por el ángel. Taehyung veía aquella con miedo, siempre que le tocaba algo así, dudaba cada vez más de su sangre angelical, debía ya estar maldito, tantas cosas que habían pasado en su vida.

— Entra ahí, V. El agua te limpiará, el agua revelará si eres un cazador digno. — Indicó Nam.

El tembló ante solo pensar que no lo estaría, pero entró, se dejó caer al agua lentamente y de espaldas. El cielo retumbó dejando caer un rayo. Pero el ni se inmutó, en sus oídos sólo escuchó cadenas, cadenas retumbando contra el piso mientras eran arrastradas. Se levantó y el agua seguía igual, tembló de nuevo.

— Estás limpio, V... ¿Qué pasa?

— No lo sé, JiHyo. No lo sé, siento que algo está mal en mí. ¡No puedo sentir cosas por alguien a quien debo asesinar! ¡¿Sabes lo estresante que es tenerlo en frente y no poder atravesarlo con la espada porque no quiero no volver a verlo?! ¡¿Entiendes un poco de eso?!