𝙻𝙰𝙲𝙸𝙾

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— Te vez bellísima — alabó Annabeth.

— Y solo tarde tres horas
— agregó Piper — Valió cada minuto linda

Hazel no podía creerlo, se miraba en el espejo esperando a que su cabello hiciera ¡Pop! y volviera a tener sus rizos definidos, sin embargo, su oscuro cabello se veía en un lacio inmaculado con efecto espejo que la hacía ver totalmente diferente.

— Sigue las instrucciones y esto durará así unos cuatro meses

— No puedo imaginar la reacción de Frank al verte

— Ni yo — suspiró la morena — ¿Y si no le gusta?

— ¡Ay por favor! Ese grecorromano esta loco por ti, dudo que esto vaya a disgustarlo

— Además — agregó Piper dejando la plancha a un lado — Siempre puedes hacer que cambie de idea con sola una palabra

Las tres chicas se rieron a carcajada con eso. Es tan divertido saber que pueden manipular a sus novios mencionado una palabra. Ninguna de ella era una palomita blanca, ni una santa como para sonrojarse por esos temas, ya no tenían dieciséis y el sexo era tan común ahora que las bromas siempre eran tan comunes.

— De cualquier manera la situación va para terminar así — dijo Annabeth — Es lo típico, cena romántica, un par de tragos extras, susurros cariñosos y en cuanto menos lo piensas, llegas al orgasmo

— Tal parece que el entrenamiento en los campamentos es más que sólo para defensa

𒊹︎︎︎

Hazel estaba un poco nerviosa ante la reacción de Frank y su nuevo estilo, aunque pensándolo bien es sólo cabello, pero la reacción de su novio era importante para la chica, ella sabía que Frank amaba su cabello, él solía definir sus rizos con sus dedos mientras dormían, cosa que le parecía demasiado tierna y la mataba de amor cada que lo hacía, aunque ahora ya no podría hacer eso.

Esto del alaciado tenía sus pros y contras, como que ya no tenía que estar batallando con desenredar, adiós nudos, adiós frizz, adiós a los millones de productos que ocupaba para que su cabello se viera perfecto. Pero ahora ya no tenía esa cosa tan característica de ella, amaba sus rizos y pensaba que eso la definía, que era algo característico de ella, pero un cambio no hace mal.

Estaba aplicando ese labia color beige en sus labio para terminar de arreglarse, usaba un vestido color rosegold que se definía a su figura con un escote holgado, este era de tirantes y su espalda descubierta en una V perfecta que se detenía antes de llegar a su cadera. Tenía unos tacones abiertos color blancos que combinaban con su estilo. Acomodó nuevamente su lacio cabello y salió finalmente del auto y llegar al bar donde se vería con él.

El Pretor de New Roma tuvo que ir a arreglar unos asuntos a San Francisco, por lo que Hazel se haría cargo de la Legión, claro que no contaba con que sus amigas fueran a verla para programar un inesperado cambio de look. Mientras ella estaba en un proceso químico para que su cabello esté así, Lavinia y su novia fueron las encargadas de la Legión, así que, con las cohortes en buenas manos, la pareja decidió tomarse una noche libre, Frank llamó a su novia para que se vieran en algún bar de la ciudad y tener ese momento a solas que tanto querían.

Cuando entró al lugar se admiró por lo bonito que era, negro y dorado eran los colores predeterminados de aquel bar.

— Buenas noches —saludó al barman cuando se sentó en la barra.

— Buenas noches, un Martini por favor

— En un momento señorita — le asintió y se dispuso a prepara la bebida.

One Shot [Percy Jackson]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora