"Amar es complicado, pero lo es más cuando el corazón de uno de los involucrados, se encuentra demasiado lastimado y no está dispuesto a sanar para empezar desde cero"
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Por otro lado, Monzón se removía con incomodidad desde donde estaba, mientras esperaba de manera impaciente a Lombardo, para afinar unos cuantos detalles del tema que habían hecho juntos para su álbum.
Llevando más de media hora, esperando a que aquel apareciera en el estudio de Big One, quien mientras tanto, escuchaba los demás temas para encontrar algún detalle fuera de lugar o que no fuera del agradó de él o del ojiverde.
— Che, Lit, ¿Qué te parece este tema? — aquel consulta, a la misma vez que reproducía "Hechizame". Un tema en solitario que Monzón había hecho. — ¿Te parece bien? — dice, esperando a que el ojiverde le dijera algo. — ¿Lit? — lo llama nuevamente, al ver que el mencionado no le había puesto atención.
— Si, si, todo está excelente con ese tema. — Monzón responde de manera automática, haciendo que Big One corte el tema de inmediato. — ¿Dónde mierda se habrá metido el Duko? — le pregunta al otro, quien solo se encoge de hombros.
— No sé, quizás esté con Paulo o se le presento alguna emergencia en el camino. — Big One opina, no creyendo que Lombardo estaba haciendo algo malo, no como Monzón lo creía.
— No, no está con Paulo, porque Paulo está con Matías, ya que lo llevo con la psicóloga a la cita que tenía hoy. — el ojiverde responde, recordando que aquel no le había dicho nada al respecto de que la cita ya había terminado. — Y ahora que lo pienso... Paulo no me ha escrito nada, ni mucho menos me ha hablado. — comenta, ya teniendo muchas ideas intrusivas en su cabeza. — Necesito comprarle un teléfono a Matías. — dice como un recordatorio para sí mismo.
— Hablando de tu novio, ¿Cómo está? ¿Ya anda mejor? — el productor pregunta, ya sabiendo toda la trágica historia que Matías se cargaba, o bueno, la historia que todos sabían por el momento, gracias al mismo peliblanco.
— Más o menos, está empezando a soltarse, así que espero que pueda interactuar con los demás sin sentir miedo en el proceso. — Monzón le responde con una pequeña sonrisa en su rostro, para después recibir un mensaje en su teléfono, que lo obliga a verlo de inmediato.
— ¿Es Paulo o Mauro? — Big One consulta, ante la rapidez con la cual el contrario terminó tomando su teléfono.
— No, es la psicóloga de Matías. — Monzón responde con desanimó. — Me dice que Matías avanza lentamente, que aún se niega a hablar sobre ciertas cosas y que si existe una mala relación con uno de mis amigos. — agrega, siendo lo último que quería saber. — Porque le pregunto acerca de eso, y Matías solo se puso muy nervioso. — comenta por lo bajo. — Y también le dijo que si hablaba iba a pasar algo malo, y el ya no quería que le pasará nada. — dice como punto final, algo que lo pone peor que antes. — Y que la cita terminó hace más de media hora. — confiesa, ya siendo lo último que necesitaba para empezar a sospechar de Londra, tal como lo hacía de Lombardo.
