Siempre fuiste tú. [Terminada]

Capitulo 31

Daniela miró a través de la sala de espera hacia Sofía, la mujer de Santi. Sus hijos sentados a su lado, todos con miradas tristes en sus rostros. Daniela estaba sentada en silencio, negándose a pensar en lo peor. Con los años, Martha se había convertido en mucho más que en una amiga para ella. Estaba más cerca de ser su madre que la suya propia.

Cerró los ojos por un segundo, deseando tener el derecho de poder estar con Poché en ese momento. La morena parecía asustada. Daniela había querido consolarla, pero, bueno, no sabía cuánto sabían todos sobre su relación pasada. Se preguntaba si pensarían que era extraño que estuviese ahí con ellos.

- Sabes que Martha te ve como a su hija ¿Verdad?

Daniela fue sorprendida por la voz de Sofía. Sonrió ligeramente.

- Lo sé. Gracias. La he conocido prácticamente toda mi vida. Con los años... se ha ido ganando el puesto que tendría que haber ocupado mi madre desde siempre.

Sofía abrió su bolso y sacó unos billetes, entregándoselos a sus hijos.

- ¿Por qué no se van por algo de beber? - miro a Daniela con las cejas levantadas, pero Dani negó con la cabeza. Tan pronto como se fueron, Sofía se levantó, uniéndose a Daniela en la sala de espera de aquel hospital - ¿Puedo sentarme a tu lado?

- Claro.

Sofía juntó sus manos, dejando escapar un profundo suspiro.

- Santi ha estado tan emocionado con la mudanza, y con volver a estar con su hermana y su madre... Siente que se ha perdido muchas cosas cuando estaba en el ejercito. Él solo quería pasar tiempo con su familia

- Martha es una mujer fuerte - le recordó Daniela.

- Es solo que ha pasado por mucho - la sorprendió Sofía al coger su mano - Sé que tú y yo no somos exactamente amigas, pero con el paso de los años, Martha me ha hablado mucho de ti. Espero no estar metiéndome donde no me llaman, pero su mayor deseo siempre ha sido que poché y tu volvieran a estar juntas.

Daniela estuvo sorprendida por sus palabras.

-Y yo que pensaba que ni Santi ni tu sabían nada - dijo sintiéndose un poco avergonzada.

- Sí. Hemos intentado incluirte en la familia desde siempre - le apretó la mano y luego la soltó - Poché piensa que esconde muy bien sus sentimientos, pero cuando te mira, bueno, hay que ser tonto para no darse cuenta.

- ¿Lo saben los niños?

- ¿Si saben que su tía es lesbiana? Sí. Pero no se si se han relacionado todavía. ¿Estoy siendo demasiado metomentodo?

Esta vez Daniela se sonrojó libremente.

- No - dijo ella.

Por fortuna, los niños volvieron, dando por terminada aquella conversación. Se sentaron al lado de su madre después de darle una Coca-Cola. Daniela apoyó la cabeza contra la pared, esperando que poché regresara.

No tuvo que esperar mucho tiempo antes de verla entrar con Santi a la sala de espera. Sus ojos se posaron sobre los de ella de inmediato, encantada de ver que algo de angustia había desaparecido. Se puso de pie cuando Sofía lo hizo, esperando noticias.

- No sabemos mucho - dijo Santi - Pero han descartado un derrame.

- Eso es bueno, ¿no? - preguntó Sofía.

- Supongo - dijo Poché - Van a tenerla en observación por ahora. Quieren hacerle algunas pruebas mañana. No se acuerda de nada. Dice que estaba viendo la televisión y lo siguiente que estaba aquí.