El mundo estaba fracturado y a través de las grietas el bien y el mal se hacían presentes.
No había persona en la Tierra que no tuviera un poco de ambas cosas, ningún humano era del todo bueno o del todo malo.
Jungkook no era la excepción. Él tamb...
Tal vez eso era en parte el amor, dolía un poco, a veces demasiado. De una forma que era imposible de soportar, pero a la vez la aceptabas porque no por ello valía la pena sacrificar lo que se sentía bien.
Bogum había perdido a su amor y eso nunca dejo de doler, sin embargo, nunca se arrepintió de sentir.
Y el amor era mixto y diverso, existían tantas formas de amar y se podían amar a tantas personas porque no había un límite para ello.
Asi que Bogum amaba a Hoseok y este lo amaba de vuelta, pero a su vez amaba a su madre y a Jungkook quienes tambien lo amaban de vuelta y Jungkook tambien amaba a V y a Taehyung y estos lo amaban a él y a Yoongi y a Jimin, amor que era recíproco entre ambos y a los otros.
Entonces el amor estaba ahí, flotando como una nebulosa que los envolvía y los dominaba, los tenía a su merced, a su disposición.
Y si era el amor mismo lo que estaba ocasionando lo que vendría a continuación nadie podría evitarlo, porque no había manera de cortar esos sentimientos. No podían dejar de amar.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¿Quién habría si quiera sospechado que el mayor error del cielo había sido el mismo génesis de aquel ángel y aquel demonio que en su momento fueron uno mismo? Que al separarlos habían creado el mayor peligro que era capaz de poner en riesgo la humanidad.
Una vez y había sido Lucifer. Dos veces y entonces tenían algo mucho más poderoso que ansiaba destruirse entre sí y tal vez solo estaban buscando una excusa para ello.
Principalmente aquel que había decido dejar de hacer lo que cualquiera esperaría de él y comenzar a preocuparse dolo por lo que le parecía importante a si mismo.
Quería a sus amigos de vuelta y eso tenía miedo del precio. No estaba asustado de ello. Ya no le importaban las consecuencias. No sabía si había perdido a Jungkook por lo cual estaba dolido y enfurecido. Necesitaba algo para compensar esos sentimientos.
De rodillas, con los nudillos ensangrentados de haner golpeado el asfalto bajo él, Taehyung pronunció:
—Lucifer, quiero hacer un trato contigo.
Y esa frase fue música melodiosa para aquel que lo escuchó, porque era el trato que llevaba ansiando con anticipación desde su llegada a la Tierra.
—Te escuchó —pronunció con su voz fría y áspera cuando apareció frente al castaño.
—Quiero a mis amigos de vuelta. A Jimin, Bogum y Hoseok. Los quierode vuelta y completamente vivos.
—¿Y que me darás a cambio?
—Te daré lo que sea, estot dispuesto a darte lo que tú quieras.
Lucifer sonrió.
—Trato —la sangre terminó por sellarlo todo—. ¿Quieres saber que es lo que quiero?